Bay
Para los Piratas
Es el momento ideal para canjear a Jason Bay -- llegando a la agencia libre, pero le queda un año de control y bajo un contrato con buen salario. Ese año extra de control parece ser valorizado muy altamente en el mercado en este momento, considerando el delta entre el valor de Mark Teixeira en 2007 y su valor ahora como jugador de alquiler por dos meses. Los Piratas no van a ir a ningún lado en 2008, y de esta forma logran agregar jugadores que pueden contribuir ahora o en poco tiempo en las Grandes Ligas por un salario mínimo, además de un prospecto con alto potencial.
LaRoche
Andy LaRoche puede -- y debería-- jugar todos los días para un equipo de Grandes Ligas en este momento. Sin embargo, los Dodgers parecían tomarlo como una camiseta regalada, que no te gusta, pero de la que no puedes deshacerte. Ahora encaminado hacia un equipo sin un tercera base capaz, debería batear para promedio y registrar un gran porcentaje de embase, con poder promedio y una defensa marginal-promedio. No es un gran atleta, y no es un jugador al que me gustaría tener después de los 30, pero por los próximos cuatro o cinco años debería andar bien.
Last Name
Craig Hansen fue elegido en primera ronda del sorteo del 2005 y se pudo haber sido elegido entre los mejores 10 si no hubiera sido por el bono de $4 millones que pedía. Eso le permitió caer en los Medias Rojas, quienes le dieron el dinero y un contrato de Grandes Ligas. Sin embargo, a pesar de tener un gran brazo, su pobre control y envíos rígidos lo han llevado a tener malas actuaciones en las Grandes Ligas. Pitchea entre las 93 y 96 mph y tiene un slider sobresaliente, pero por cada buen slider que lanza, dos le salen mal. Tiene un cambio de velocidad que es superior al promedio, por encima de las 80 mph con buena caída, pero casi nunca lo usa. El Craig Hansen que he visto varias veces en Boston no es un lanzador de Grandes Ligas, pero es un brazo que impacta y un muchacho por el que vale tomar un riesgo.
Moss
Brandon Moss debería encajar como jardinero izquierdo regular en Pittsburgh, pero se proyecta más como un cuarto jardinero de calidad en un buen equipo. Tiene un poder promedio y disciplina en el plato, y jugaría regularmente si pudiese jugar en el centro de los jardines, pero su bate podría no encajar en una esquina. Probablemente necesite un derecho que lo ayude a mejorar si los Piratas quieren hacerlo jugar todos los días ante lanzadores derecho.
El verdadero atractivo del acuerdo es Bryan Morris, quien está en su primer año completo luego de la operación de reconstrucción de codo Tommy John y ya está lanzando bien en la Clase A baja. Morris tiene un brazo de poder, que llega a las 90-96 mph con una potencial curva hacia fuera, un lanzamiento rompiente de dos planos con buena profundidad. Todavía está desarrollando su cambio de velocidad y su control también está mejorando, pero sigue debajo de la media. Lanza apenas cruzando el cuerpo, aunque los Dodgers venían trabajando para minimizar eso, lo que puede generar lesiones de brazo (y podría, en teoría, explicar porqué se rompió el codo en primer lugar). En un mundo perfecto, es un segundo o tercer abridor, pero si los problemas de brazo persisten, terminará como un relevista dominante.
Los Piratas vienen silenciosamente acumulando jugadores a los que les falta potencial pero pueden contribuir en las Grandes Ligas por un salario mínimo. En algún punto, necesitarán insertar jugadores con calibre de estrellas, pero en el interín, es una buena estrategia armar un equipo competitivo sin desperdiciar dinero en veteranos "probados". Y considerando el hecho que ningún equipo estaba dispuesto a ceder un prospecto de impacto por Bay, fue inteligente tomar la mejor oferta disponible ahora en lugar de intentar mover el mercado nuevamente diciembre cuando el valor de Bay hubiera caído nuevamente.
Para los Medias Rojas
Los Medias Rojas empeoran un poco para el final de este año, pero de repente lucen mucho mejores para el próximo. Jason Bay definitivamente es una baja a nivel ofensivo a corto plazo respecto a Manny Ramírez, y aunque tiene poder y disciplina en el plato, se ha enfrentado al pitcheo inferior de la Liga Nacional y está un paso por debajo de Manny en el plato. Tiene mejor defensiva, dado que Manny ha sido ubicado consistentemente entre los peores jardineros en el béisbol, y es improbable que Bay tenga un día "Jason-siendo-Jason" o falle al correr un rodado clave.
Pero Bay realmente mejora a los Medias Rojas en 2009. Boston estaba casi seguro en declinar la opción de $20 millones que Ramírez tenía para 2009, dejándolos con un hueco ofensivo por llenar el próximo año. Bay estará bajo control el próximo año, por lo que el hueco ya está cubierto, y sólo cobrará un precio de baratillo de $7,5 millones. Incluso considerando los $7 millones que Boston le envió a LA para pagar el sueldo de Manny de este año (con los Dodgers aduciendo que no podían agregar pagos a la nómina en 2008), los Medias Rojas obtienen en Bay a un bateador de $15-20 millones sin los dolores de cabeza que Ramírez venía causando últimamente, y lo logran sin tener que desarmar su fuerte sistema de fincas y sin tener que comprometerse a pagar un contrato de cuatro o cinco años del que se arrepentirían a mitad del segundo.
Para los Dodgers
Los Dodgers mejoran mucho en este 2008 a cambio de un gran brazo joven que está a probablemente tres años de destacarse y un tercera base para el que no tenían lugar. Deben imaginar que esta es vista como una enorme victoria para la gerencia de los Dodgers.
Si Ramírez, ahora liberado de un equipo que "no lo merece", deja de desperdiciar turnos al bate y conecta como puede hacerlo (como lo hizo en abril, por ejemplo), los Dodgers acaban de realizar una rápida mejoría a cambio de un buen jugador que no iban a usar y un prospecto de calidad, sin tener que agregar nada a su nómina. La movida retiene a Juan Pierre y Andruw Jones en la banca, donde pertenecen, y no me sorprendería que el equipo sacara a Jones de la banca y lo enviara a la Triple A para limpiar un lugar en el roster. La movida transforma a los Dodgers en leves favoritos a ganar la División Oeste de la Liga Nacional, asumiendo que pongan al personal adecuado en el diamante.
Keith Law, anteriormente el asistente especial del gerente general de los Azulejos de Toronto, es el analista senior de béisbol para Scouts Inc.