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Bajo presión

El futuro del entrenador del Chelsea, Luiz Felipe Scolari, está bajo el microscopio, de nuevo, con los diarios británicos asegurando que sólo tiene semanas para salvar su
trabajo.

La derrota de Los Blues por 3-0 ante Manchester United el domingo ha dejado serias dudas acerca de su posición a largo plazo y una impensable derrota en la FA Cup, el miércoles,
podría forzar a la directiva a tomar una decisión.

Scolari debe atender la reunión de la Junta Directiva el jueves y ya enfrenta un severo interrogatorio, aún si supera la prueba en Roots Hall.

La prensa le da a Scolari entre cuatro semanas y cuatro meses para dar vuelta las cosas, aunque los Blues aún están segundos en la Premier League y en octavos de la UEFA
Champions League.

Y ahora se ha reportado que Scolari ha sufrido una gran decepción con el goleador Nicolas Anelka en el partido en Old Trafford.

Scolari quedó con un dolor de cabeza por su elección, luego de que Didier Drogba se recuperara, considerando que el DT detesta poner a los dos en el ataque.

De acuerdo con The Sun, el entrenador brasileño le dijo a Anelka que sólo lo pondría de titular contra el Unided, si estaba de acuerdo con jugar en el costado izquierdo
del mediocampo. Esto habría enojado al jugador, que es máximo artillero de la Premier League y ha iniciado los tres últimos partidos en el banco.

Los rumores del corte de las comunicaciones ahora se intensificaron y Big Phil sabe que el tiempo no está de su lado. Luego de un gran comienzo en Inglaterra, las cosas se
complicaron y él podría no durar más de una temporada.

Scolari ahora está buscando respuestas para los problemas del club.

"Hay dos opciones", dijo Scolari. "O sigo con los mismos jugadores y ellos mejoran o los cambio y trato con algunos jugadores diferentes".

"Habrá algunos jugadores nuevos, que lleguen. Hablé con Peter Kenyon (el Jefe Ejecutivo) hace un mes y hace diez días. Este es mi plantel y estoy contento con él".

"No sé cuál es la respuesta. Necesito pensarlo. No estamos jugando suficientemente bien para ganar cualquier competición. No hemos jugado bien en los últimos cinco partidos y
perdimos muchas oportunidades. Esta (la carrera por el título) no está definiida aún".

"Necesito probar hablar con los jugadores y mostrarles lo que ha pasado. Tienen que entender qué pasó en los últimos dos o tres partidos. Tienen que preguntarse en sus propias
cabezas si creen que todavía podemos hacerlo, pero aceptar que tienen que trabajar más para hacer lo que hicieron en el inicio de la temporada".