BUENOS AIRES -- La AFA ratificó la suspensión del comienzo del torneo Apertura y de todos los campeonatos de ascenso en una jornada en la que su presidente, Julio Grondona, fue a la AFIP a mostrar que con los recursos que tienen a los clubes se les hace difícil cumplir con los aportes fiscales y salió de la reunión con renovados reclamos para las empresas que disponen de los derechos de televisación de los partidos.
En el cierre de la jornada, el comité ejecutivo de la AFA resolvió por unanimidad y aclamación mantener la postergación indefinida de la puesta en marcha de las competencias domésticas, comunicó el jefe de Medios, Ernesto Cherquis Bialo.
"Le ofrecen al fútbol una solución de forma, y este comité ejecutivo busca una solución de fondo", argumentó Cherquis. Por lo tanto, el Apertura de Primera División no podrá comenzar el 14 de este mes, como estaba previsto.
Se desprende de esta disposición que la AFA espera que las empresas que emiten las imágenes de los distintos cotejos flexibilicen sus posiciones para hallarle una salida a la crisis económico financiera que afecta a los clubes.
Por lo pronto, Grondona, fue temprano a la AFIP y tras esa gestión reiteró en forma pública su pedido para las empresas que tienen los derechos de televisión le aporten al fútbol 12 pesos por cada abonado de cable para solucionar la problemática.
Ya por entonces Grondona había dejado abierto el enigma sobre la iniciación de los torneos de fútbol, a la espera de conseguir más fondos de parte de la televisión. "Sería lo ideal", sostuvo Grondona al terminar su encuentro con el titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, al ser consultado sobre un aporte mayor de la TV, que tiene los derechos sobre la televisación del fútbol hasta 2014.
"¿Del básico (del servicio de cable) no habrá doce pesos por abonado?", se preguntó Grondona, quien consideró que "no habría que aumentar nada" a los usuarios y en todo caso "dos o un peso".
Dos veces acicateó a la TV, al señalar que la gente "si no hay fútbol no creo que compre el cable" y que con esos doce pesos por abonado que se destine a la AFA "todos los partidos serían libres" sin codificar y que "hasta la Selección" se podría ver en ese sistema.
Así, Grondona dejó en claro que no le alcanzará con el aumento de casi 38 millones de pesos que le dará la televisión para la temporada 2009/10, en la que recibiría 268 millones.
El dirigente de AFA, que fue junto al titular de Agremiados, Sergio Marchi, a la reunión con Echegaray y otros cuatro funcionarios de la AFIP, aseguró que no fue a pedir rebajas en las alícuotas que deben pagar los clubes al fisco y que la mayoría de las instituciones, que deben alrededor de 300 millones de pesos al Estado, están acogidos a un plan de pagos de deudas de 120 cuotas.
"Es una cuestión de porcentajes, no alcanza para pagar lo que la AFA recibe", explicó Grondona, y agregó que los recursos son de las recaudaciones, la televisión y el prode tradicional, que aporta poco y nada a las arcas afistas.
Sin pedir rebajas al Estado y con planes de pago a los que los clubes ya estaban adheridos, el encuentro se asemejó a una puesta en escena para continuar con los reclamos del fútbol a mayores aportes de la TV.
Sin embargo, las empresas que tienen los derechos de transmisión tienen contratos establecidos vigentes, que en su momento fueron avalados por la AFA, la misma que ahora quiere modificarlos.
"Fue una suspensión tomada de manera unánime. En tanto no esté la solución de fondo, el fútbol no seguirá. Emparchar como se ha hecho siempre no sirve. Hemos intentado hasta ahora buscar soluciones, pero parece que queda mucho por hacer", argumentó Grondona al salir de la AFA, tras la reunión del comité ejecutivo.
"Para nosotros, la situación como está no sirve, queremos cifras que estén acordes con lo que genera el fútbol", sostuvo Grondona apuntándole a la empresa que dispone de los derechos sobre la televisación de los cotejos correspondientes a las diferentes categorías.
De todos modos, la máxima autoridad de la AFA se valió de los cronistas que lo aguardaban en la puerta del edificio de la calle Viamonte para pedirle a los simpatizantes del fútbol que tengan confianza en sus gestiones porque él considera que todo se va a arreglar.
"¿Y qué se la va a decir (al hincha)?, que tenga esperanzas de que se va a encontar una solución, estamos trabajando en eso. Lo que se está pidiendo es para que los clubes no sigan vendiendo a sus figuras para poder salvarse", argumentó Grondona.
El dirigente sostuvo que la globalización también tuvo que ver con la actual crisis económica y financiera que afecta a los clubes.
"La situación no es fácil y se ha ido complicando todo por las variaciones económicas que se producen en el mundo y eso cambia todo. Los distintos convenios de trabajo han ido detrás de esa situación y han distorsionado el sistema", expuso a modo de fundamento el veterano caudillo.
Claro que más allá de su optimismo se ocupó de reflejar que la salida a esta problemática de ninguna manera se hallará con remedios mágicos.
"No voy ni al final ni al principio, soy coherente y trato de encontrar las solución. Uno siempre confía, pero es el tiempo el que dirá", se atajó.
"Lo que pretendo es que nos entreguen lo que corresponde. Esta resolución es para que hablemos bien de entrada, ya que de lo contrario en dos meses más estamos hablando de lo mismo", subrayó.