La historia de Francia 1998

FRANCIA 1998

Equipos: 32.

Equipos en Eliminatorias: 168.

Ausencias notables: Uruguay y Portugal.

Sorpresas: Croacia, Jamaica, Irán.

Goleador: Davor Suker (Croacia), 6 goles.

Estadísticas: Se marcaron 171 goles (2.67 por partido). Francia (15) fue el más goleador.

Por primera vez con 32 equipos, se disputó en un formato de ocho grupos de cuatro equipos, con los dos primeros avanzando a octavos de final.

Número de partidos jugados: 64.

Innovaciones
• Por primera vez en la historia participaron 32 equipos y se disputaron 64 partidos.
• En el partido entre Francia y Paraguay, por los octavos de final, se marcó el primer gol de oro de la historia de los Mundiales.
• Se comenzó a mostrar los minutos adicionados en el cartel electrónico que marca las modificaciones de jugadores durante el partido.

Controversias
• Minutos antes de la final entre Brasil y Francia, el delantero brasileño Ronaldo sufrió un ataque de convulsiones que pusieron en duda su participación. Pese a esto, Mario Zapallo decidió incluirlo en el equipo aunque su desempeño fue muy malo.
• En medio del conflicto bélico entre ambos países, Irán y Estados Unidos se enfrentaron en la primera fase. Antes del partido que finalizó con triunfo asiático se intercambiaron flores y banderines.

Curiosidades
• Lothar Matthaus rompió dos marcas que parecían imposibles de superar. Alcanzó al mexicano Antonio Carbajal como los futbolistas con más Mundiales disputados: cinco. Además, se convirtió en el jugador con más partidos y más minutos jugados: 25 encuentros y 2048 minutos.
• Croacia, Jamaica y Japón debutaron en una Copa del Mundo y compartieron la zona H. El otro debutante fue Sudáfrica.
• El danés Ebbe Sand marcó un gol a los 16 segundos de haber ingresado.
• Se produjo el récord de expulsados, con 22 tarjetas rojas.
• Es el Mundial con más cantidad de goles anotados: 171.

Historia

De la mano de Michel Platini como presidente del comité organizador, Francia superó a Marruecos en la votación final y se ganó el derecho a ser sede del último Mundial del siglo XX. De esta manera, el país galo se transformó en el tercero que acoge dos Copas del Mundo, después de Italia y México.

Tras una fiesta inaugural que ocupó las calles de París y culminó en el flamante estadio de Saint Denis, Brasil tuvo que sufrir para ganar en el partido inaugural. El equipo de Mario Zagallo era el campeón defensor y uno de los máximos candidatos al título, sin embargo, Escocia lo puso en un aprieto y recién logró la victoria 2-1 en el segundo tiempo. En su segunda presentación, el Scratch se recuperó y venció con comodidad a Marruecos, aunque en el cierre del Grupo A volvió a jugar mal y fue sorprendido por Noruega, que le ganó por 2-1.

Francia volvía a los Mundiales tras haber fracasado en las últimas dos eliminatorias. El local buscaba volver a los primeros planos y para eso necesitaba llegar lejos en el torneo que organizaba. La primera fase fue un verdadero trámite para los dirigidos por Aimé Jacquet. Ganaron los tres partidos, marcaron nueve goles y recibieron sólo uno, de parte del danés Michael Laudrup.

España llegó, como casi siempre, con el mote de favorito. Sin embargo, no logró confirmar su fama y quedó eliminada en primera ronda, con mucha pena y nada de gloria. Perdió 3-2 ante Nigeria, igualó con Paraguay y se despidió con una goleada 6-1 sobre Bulgaria que no sirvió de nada. La Furia volvía a decepcionar y se quedaba sin jugar las instancias definitivas de una Copa del Mundo.

En el primer Mundial post Diego Maradona, Argentina hizo una primera fase perfecta. Venció por la mínima a Japón y Croacia y goleó 5-0 a Jamaica. Con una gran actuación de Gabriel Batistuta, el conjunto dirigido por el campeón de 1978 Daniel Passarella se ganó el respeto de todos, aunque en las instancias definitivas no iba a lograr mostrar el nivel necesario para seguir adelante.

Las otras potencias europeas no tuvieron grandes problemas en avanzar a octavos. Mientras Alemania, Italia y Holanda se clasificaron en forma invicta, Inglaterra debió conformarse con el segundo puesto tras una sorprendente derrota frente a Rumania.
El mejor choque de la segunda fase del certamen fue, sin duda, el que protagonizaron Argentina e Inglaterra. La historia reciente y el potencial de ambos conjuntos lo convirtieron en el partido que nadie quería perderse. La sede fue Saint Etienne y los jugadores no defraudaron. Empataron 2-2 en un choque plagado de emociones y buen nivel, que culminó con el triunfo de los sudamericanos en la definición por penales.
En el resto de los duelos de octavos, casi no hubo sorpresas, salvo por el batacazo de Croacia ante Rumania. El seleccionado balcánico ganó 1-0 y se metió entre los ocho mejores del torneo, pese a su inexperiencia en este tipo de competencias.

Brasil goleó a Chile sin grandes problemas, al igual que Dinamarca, que se sacó de encima al fútbol alegre de Nigeria. El local Francia sufrió más de la cuenta para eliminar al duro Paraguay, que recién fue superado en el tiempo suplementario. En tanto, Alemania superó a México, Holanda a Yugoslavia e Italia venció con lo justo a Noruega.

Los cuartos de final mostraron a cuatro campeones del mundo enfrentando a cuatro selecciones que buscaban su primera corona. De los consagrados, sólo Brasil logró superar la prueba y se clasificó para las semifinales. Argentina, Italia y Alemania quedaron en el camino.
De la mano de Lilian Thuram, Francia obtuvo un triunfo histórico y alcanzó por primera vez la final de una Copa del Mundo. Con dos goles del defensor, el equipo galo venció a la sorprendente Croacia y se metió en la definición. Davor Suker abrió el marcador y silenció a todo el estadio, pero enseguida Thuram igualó y después decretó el 2-1 que llevó al conjunto liderado por Zinedine Zidane al partido definitorio en Saint Denis.

En la otra semifinal, Brasil venció a Holanda por penales tras el empate 1-1 en un gran partido, con muchas situaciones y gran fútbol mostrado por ambas Selecciones. Ronaldo anotó el primer gol y Patrick Kluivert igualó sobre el final del tiempo reglamentario. En la definición, Dunga pateó el último penal y dio rienda suelta a la alegría del Scratch, que alcanzaba su segunda final del mundo consecutiva y busca el pentacampeonato.

Tras el histórico triunfo de Croacia ante Holanda y el tercer puesto ganado por el plantel balcánico, el día de la gran final comenzó muy mal para el visitante, ya que su estrella, Ronaldo, sufrió un ataque de convulsiones y estuvo a punto de quedar marginado del partido. Sin embargo, el cuerpo técnico decidió su inclusión y el astro del Barcelona salió a la cancha.

Pese a la presencia de su mejor jugador, el equipo sudamericano sufrió mucho ese mal momento y Francia lo superó desde el inicio hasta el final del partido. La goleada 3-0 habla por sí sola, el local jugó su mejor partido del Mundial justo cuando más lo necesitaba. Con un Zidane pletórico y un equipo que supo seguir a su líder, el seleccionado galo ganó en casa el primer título de su rica historia.