Cuando Tiger Woods se casó con Elin Nordegren hace cinco años, la preocupación en el ambiente era que ese matrimonio pudiese ocasionar que el mejor golfista de todos los tiempos ya no contase con la misma ventaja competitiva.
Lo anterior no ocurrió. Sigue siendo el mejor golfista. Pero lo cierto es que en los últimos días, Woods se ha dado cuenta de que ser un ícono del deporte casado puede dar lugar a muchas otras cuestiones.
Por primera vez en su carrera, su vida personal es una atracción más importante que sus logros dentro de la cancha de golf. No es común que un accidente automovilístico -- en el que Woods chocó una boca de incendios y se fue contra un árbol al salirse de su carril -- llame tanto la atención, pero cuando se dice que el accidente podría estar vinculado a un altercado con su esposa sobre un posible affaire, se convierte en la prioridad número uno de los paparazis.
Hasta el momento, Woods ha sabido manejarse con increíble aplomo y gracias. Por lo general dice y hace lo correcto, y hace las movidas acertadas -- ya sea en el deporte o en los negocios.
Pero la controversia en la que Woods se ha visto inmerso en estos días es algo que nunca ha experimentado. Este incidente no desaparecerá de la noche a la mañana. Ganar el U.S. Open con la rodilla lesionada parecerá fácil en comparación con lo que él y su familia deberán afrontar los próximos días.
Woods es muy naíf si cree que la declaración cuidadosamente redactada que se publicó en su sitio web pondrá final a todas las especulaciones, los rumores que corren por Internet y las notas de tapa de la prensa amarilla. De hecho, las cosas se complicarán.
Se complicarán mucho más.
"Este incidente ha sido muy estresante y complicado para Elin, para nuestra familia y para mí", dijo Woods en la declaración. "Aprecio la preocupación de todos y agradezco todos los mensajes de apoyo que he recibido. Pero a la vez les pediré que entiendan que mi familia y yo necesitamos un poco de privacidad".
El pedido de privacidad de Woods pasó a ser irrelevante en el momento en que las conjeturas comenzaron a sugerir que el motivo del conflicto habría sido entre Woods y su esposa el Día de Acción de Gracias, después de que el National Enquirer publicara una historia sobre un supuesto affaire. Aún no se ha podido confirmar nada, pero TMZ.com informó el lunes que la Patrulla de Florida Highway está en busca de una orden para solicitar los registros del hospital con el fin de averiguar la probable causa de las lesiones de Woods -- un reporte de la Patrulla de Florida Highway no lo confirma. Pero en estas instancias, la confirmación es irrelevante. Lo que importa es la especulación de que el conflicto sobre el que se rumorea fue la razón por la que Woods no sólo salió a tanta velocidad de su casa sino también por la que se niega a ser entrevistado por la Patrulla.
Hasta el momento, Woods no tiene que explicar nada a la policía ni al público. Además, para ser sinceros, mantenerse callado será lo mejor que podría hacer a menos que quiera que lo que haya ocurrido en su casa de Orlando antes del accidente se convierta en un asunto público.
Pero dejando de lado si estos rumores de infidelidad y la violenta discusión con su esposa son ciertos, los medios no serán generosos con Woods -- o su matrimonio, en su defecto. Todos los medios de la prensa amarilla -- y hasta quizá algunos que no lo son -- ahondarán en la vida personal de Woods. Ya ocurrió con Roger Clemens. Una vez que lo vincularon con el consumo de esteroides, los rumores de que Clemens había tenido un affaire de diez años con la cantante de country, Mindy McCready -- algo que según se comenta arrancó cuando McCready tenía 15 años -- comenzaron a correr poco tiempo después. Si Woods le ha, al menos, giñado el ojo a una mujer que no sea su esposa, Anderson Cooper hará un especial de 30 minutos por CNN.
En un lapso de 24 horas, TMZ posteó 14 notas sobre el accidente de Woods, incluyendo imágenes de la supuesta amante de L.A. con la abogada Gloria Allred y Michael Clayton. Algunas de ellas -- según la declaración de Woods -- bastante "indiscretas".
Los titulares han pasado de hablar sobre la posibilidad de que Woods sea el mejor golfista de todos los tiempos a " ¡Habla la amante de Tiger Woods!" y "¡Fore! Allá va la imagen de Tiger".
El sumamente privado Woods no está acostumbrado a esto. Está acostumbrado a controlar el acceso de los medios y manipular la manera en la que los medios lo cubren. Está acostumbrado a las conferencias de golf, en las que no dice nada y por lo general entretiene a los redactores con alguna broma trillada. Si es criticado, está acostumbrado a que sea por lo que hace en la cancha, no como padre o esposo.
Pero ahora, Woods les ha dado la noticia a los medios, la más atractiva para seguir de cerca -- ¿Tiger Woods, es Lotario?
"Este es un asunto privado y quiero mantenerlo así", dijo Woods en la declaración en su sitio web.
Buena suerte.
No espero que Woods pierda respaldo por esto, pero ya ha cambiado radicalmente la manera en la que se lo considera. Además, cabe la posibilidad de que lo afecte en su performance dentro del campo de golf, en especial si todo termina en una larga disputa legal. Según su agente, Woods ya se ha bajado de su propio torneo, el Chevron World Challenge, que arranca el jueves en Thousand Oaks, Calif., debido a las lesiones que ha sufrido.
Lo que caracteriza a Woods es la disciplina y la resistencia mental, pero cuando "Entertainment Tonight" y "Access Hollywood" están en el hoyo 18 la historia cambia. Woods era de los atletas cuya vida no se divulgaba, ahora apuesto que lo quieran a que todos están a la espera de lo que se publique.
Puede que algunos deportistas, como Derek Jeter, tengan un poco más de cancha para manejar estas cuestiones. Otros, como es el caso de Tony Romo, se ven muy afectados por el asedio de los medios en su vida personal. A veces se convierte en una gran distracción. Estoy seguro de que Alex Rodríguez no debe extrañar que le pregunten sobre su divorcio y las supuestas infidelidades y no creo que Romo haya disfrutado el uso que le dieron a las fotografías que le tomaron cuando estaba de vacaciones en Cabo con Jessica Simpson para sugerir que no estaba interesado en lo que ocurría en el fútbol con los Cowboys.
Cuando un deportista profesional ve que su santuario privado es constantemente violado, lo afecta. Vivo en Orlando y puedo afirmar que Woods disfruta de una existencia despreocupada aquí. Nadie lo molesta cuando sale, es tratado como un residente más.
Sospecho que lo anterior está por cambiar. Orlando no es New York City, pero los medios que cubren a Woods y su accidente creen que sí. Hay más de un camión de cadenas televisivas en la entrada del vecindario de Woods -- algo que sus vecinos deben adorar -- y es probable que Woods tenga un miedo constante de que TMZ aparezca por medio de los arbustos una vez que muestre su cara en público.
La vida ha dado un giro de 180 grados para Woods. Ahora tendremos que esperar y ver si es algo que puede manejar. Al menos, ha aprendió dos dolorosas lecciones: Esta es la desventaja a de tener un matrimonio que se ha convertido en el centro de atención y la fama casi siempre se basa en concesiones mutuas.