Si se sorprendieron por la elección del Boxeador del Año 2009 de ESPN.com, bueno, no prestaron demasiada atención a los últimos 12 meses del boxeo.
Es Manny Pacquiao, la selección más evidente desde, bueno, el 2008, cuando Pacquiao también fue la elección evidente.
De hecho, el rey libra por libra e ícono de las Filipinas ha clamado los honores a boxeador del año en tres de los últimos cuatro años mientras concluía otra tremenda campaña en el 2009. En el 2008, Pacquiao subió la escala, ganando títulos en las categorías de ligeros Jr., con su decisión ajustada contra Juan Manuel Márquez, y en peso ligero, con su pelea contra David Díaz, antes de subir a peso welter y llevar a Oscar de la Hoya al retiro.
El 2009 de Pacquiao fue igual de impresionante ya que continuó impactando a los fans ganando sus dos peleas por nocaut dominante. Con victorias decisivas contra Ricky Hatton y Miguel Cotto, ambas en el MGM Grand en Las Vegas, Pacquiao sumó campeonatos dos clases de peso más para tener títulos en un record de siete divisiones -- peso mosca, pluma junior, pluma, ligero Jr., ligero, welter Jr. y welter. También fue un año en que Pacquiao puso su nombre firmemente en la discusión. El zurdo más destacado, el mejor boxeador asiático. Uno de los mejores boxeadores en el top 25 de todos los tiempos.
Su promotor, Bob Arum de Top Rank, lo llama "el mejor boxeador que yo haya visto" en más de 40 años del negocio. Compara el poder de Pacquiao al de Muhammad Ali, a quien Arum también promovió.
El entrenador Freddie Roach, quien ha estado con Pacquiao desde el 2001, cree que Pacquiao podría estar camino a más victorias de boxeador del año, quizás nuevamente en el 2010 si gana la pelea del 13 de marzo contra Floyd Mayweather Jr.
"Lo que asusta es que aún no vimos lo mejor de Manny Pacquiao", dijo Roach tras el nocaut de Cotto. "Nunca entrené a un atleta como Manny, quien tras más de 50 peleas aún está dispuesto a aprender nuevas técnicas y es capaz de aplicarlas. Uno de los motivos por el que Manny es tan difícil de pelear es porque uno no ve al mismo Manny dos veces seguidas. Siempre tiene un nuevo estilo que lo hace totalmente impredecible e imposible de anticipar. No hablar que su condicionamiento es superior al de cualquier otro boxeador. Es un fenomenal atleta.
"Yo recibo mucho crédito por su éxito, pero es Manny quien hace el trabajo en el gimnasio y pelea en el ring. Es increíble. Sus últimas cinco peleas fueron en cuatro clases de peso distintas. Sube de peso. Baja de peso. Es el mejor en cada división".
Tras la impactante victoria contra De la Hoya en el 2008, Pacquiao (50-3-2, 38 KOs) bajó a welter junior en mayor para enfrentarse a Hatton, el campeón que nunca había sido vencido en la categoría de 140 libras.
Pacquiao se encargó de el en poco tiempo, aplastándolo en dos rounds con uno de los nocauts más memorables en la memoria reciente. Eso le dio a Pacquiao un título en una sexta división, incluyendo un cuarto campeonato record.
Eso estableció el escenario para la pelea más importante del año mientras Pacquiao, quien cumplió 31 el 17 de diciembre, subió nuevamente a welter para desafiar a Cotto por el título. Cotto es el boxeador más fuerte y grande al que Pacquiao jamás se haya enfrentado. A pesar de que la pelea empezó competitivamente, la corriente viró a favor de Pacquiao tras un par de rounds. De ahí, Pacquiao aterrizó un nocaut de duodécimo round para ganar otra pelea titular que también fue el éxito comercial más importante del año ya que generó 1.25 millones de ventas PPV.
La reacción de Pacquiao a esto fue típica: Humilde y con su país en mente. "No es algo personal, estoy haciendo mi trabajo", dijo Pacquiao tras la pelea de Cotto. "Una de las mejores ventajas que tengo es que cada pelea es una oportunidad de honrar las Filipinas. La gente de las Filipinas no sólo me da su apoyo, también me da su fuerza, su orgullo y su amor. Es un poder impresionante y una gran responsabilidad. La gente recordará que el primer hombre en ganar títulos mundiales en siete clases de peso distintas era un Filipino".
Otros contendientes:
Vitali Klitschko: Klitschko no había peleado desde fines del 2004, fue forzado al retiramiento el año siguiente y a ceder su título de pesado a causa de lesiones. Pero tras un receso de casi cuatro años, las lesiones sanaron y Klitschko tuvo un regreso triunfal a fines del 2008 para castigar a Samuel Peter camino a un nocaut de octavo round para reclamar su viejo título. No fue una aparición individual. En el 2009, Klitschko (39-2, 37 KOs) puso candado a su título a los 38 años de edad. Mientras su hermano menor y campeón de pesados Wladimir Klitschko peleó tan sólo una vez en el 2009 a causa de lesiones, Vitali, de Ucrania, estuvo ocupado. Tuvo tres defensas contra oponentes de calidad, ganando cada una con performances dominantes en las que casi no perdió uno sólo de los 31 rounds. En marzo, Klitschko se enfrentó al zurdo Juan Carlos Gómez, un técnico de calidad y ex titular crucero, y lo apaleó en el noveno round. En septiembre, Klitschko, quien hace de Los Angeles su hogar part time, se enfrentó al nativo del sur de California Cristobal Arreola y lo venció tras 10 rounds brutalmente unilaterales. Klitschko tuvo un répido regreso en diciembre para anotar un virtual shutout contra el americano Kevin Johnson, quien quedó tan petrificado que tan sólo pudo aterrizar cinco golpes de poder en 12 rounds.
Timothy Bradley Jr.: Con Manny Pacquiao noqueando a Ricky Hatton para ganar el campeonato de welter junior en mayo y luego dejar la división, y marcando serias dudas sobre el futuro del ex campeón Hatton, la división de 140 libras estaba bien abierta para que emergiera un nuevo boxeador número uno. Ese es Bradley (25-0, 11 KOs), quien tuvo un excelente 2009 para convertirse en ese hombre. Pero Bradley realmente se lució en el 2009. Comenzó en abril, tomando una dura decisión contra Kendall Holt para unificar títulos, sobreviviendo a derribamientos en el primero y duodécimo round y tomando la decisión. Holt regresó a la acción en agosto para lo que muchos pensaron sería una difícil defensa contra el ex titular liviano Nate Campbell. Pero Bradley dominó hasta que la pelea fue interrumpida en el tercer round porque Campbell no podía continuar a causa de un severo corte sobre su ojo izquierdo. Bradley originalmente fue premiado con una victoria TKO, pero luego fue reconocida como un no contest cuando la comisión de California dijo que el corte había sido causado por un accidental choque de cabezas. De todas maneras, Bradley había dominado durante la pelea. En diciembre, Bradley tuvo una defensa mandataria contra el titular interino Lamont Peterson, su compañero de los ranks amateurs. Se esperaba que fuera una tarea difícil. Pero Bradley puso las dudas a dormir. Anotó un derribamiento de tercer round y dominó a Peterson para llevarse una victoria por shutout en lo que fue la mejor performance de su carrera.
Andre Ward: Grandes cosas se esperaban de Andre Ward cuando puso su pie sobre el podio para aceptar la medalla de oro olímpica en el 2004, y en el 2009 dio a cumplir esas expectativas. El muchacho de 25 años de edad de Oakland, California, pasó de contendiente en ascenso a titular al estar a 4-0 y al establecerse como el número uno en la profunda división de super medianos. Ward comenzó su año en febrero con una dominante victoria por decisión contra Henry Sugar Poo Buchanan. Eso estableció el escenario para el primer paso de Ward en competencia contra un golpeador peligroso en Edison Miranda. Ward (21-0, 13 KOs) lo dominó con facilidad camino a una decisión unilateral. Como calentamiento para su torneo de Super Six World Boxing Classic de Showtime, Ward derribó a Shelby Pudwill en tres rounds para marcar el escenario para su oportunidad por el título. Ward la obtuvo en noviembre en su apertura de Super Six y no sólo para vencer al danés Mikkel Kessler via decisión técnica de undécimo round para ganar un título, lo dominó con poder. Fue una performance estelar de Ward y una manera sensacional de terminar el año.
Hozumi Hasegawa: El boxeador más importante de Japón es un virtual desconocido en los Estados Unidos, pero el titular gallo zurdo tuvo un año impactante. Conocido como un técnico supremo, Hasegawa (28-2, 12 KOs) tuvo tres defensas en el 2009, ganando cada una por nocaut para llevar su total de defensas a 10. Hasegawa, 29, comenzó el año con un blowout de primera ronda contra Vusi Malinga, un buen contendiente mandatario de Sudáfrica, a quien derribó tres veces. Hasegawa siguió su carrera registrando dos derribamientos en otra destrucción de primer round contra Nestor Rocha en julio. En su tercera defensa del año, Hasegawa anotó otro nocaut contra Alvaro Pérez de Nicaragua en el cuarto round de una pelea sin lustre. Quizás no hayan escuchado de Hasegawa, pero es bueno. Muy bueno.
Carl Froch: La Cobra tiene mucha confianza en si mismo y es fácil ver porque. El totular supermediano de Inglaterra había clamado un título vacante a fines del 2008 con Jean Pascal y lo retuvo dos veces en el 2009 contra oponentes de calidad. En abril, Froch vino a los Estados Unidos y defendió su título contra el ex campeón indiscutido de los medianos Jermain Taylor. Taylor lo derribó por primera vez en su carrera en el tercer round y estaba delante de Froch cuando Froch (26-0, 20 KOs) corrió para un tremendo nocaut de duodécimo round en un regreso dramático. En octubre, Froch, 32, regresó a Nottingham y defendió su título en la ronda de apertura de Super Six World Boxing Classic al tomar una ajustada decisión dividida contra Andre Dirrell.