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Denver vive un gran ambiente

DENVER -- El Partido de Campeonato de la Conferencia Americana se calentó de manera anticipada como nunca en la historia para los Denver Broncos.

El sábado, la temperatura subió hasta los 16 grados centígrados, 61 Fahrenheit, un día antes de que los New England Patriots y los Broncos se enfrenten por el boleto al Super Bowl XLVIII.

El clima se sintió espectacular en los alrededores del Sports Authority Field in the Mile High, según aficionados latinos que se paseaban por el estadio al mediodía del sábado.

"Venimos desde Hermosillo para el partido y jamás pensamos que el clima fuera a estar así", dijo Luis Fernández, un mexicano de 32 años, que viajó en apoyo de los Broncos, junto con su esposa. "Seguro veremos un gran partido, sin que el frío sea factor en el resultado".

Desde el aeropuerto hasta la zona del centro, a unas tres millas del estadio, muchos aficionados de ambos equipos caminaban este sábado desde temprano con los colores alusivos a los dos finalistas de la Conferencia Americana.

Jerseys de los Broncos con el N° 18 de Peyton Manning, y hasta con el N° 7 de John Elway, el último mariscal de campo que los hizo campeones, pululaban por las avenidas en medio de un sol radiante.

En el aeropuerto, varios aficionados procedentes de Texas portaban el N° 83 del receptor de los Broncos Wes Welker.

Muchos otros en el aeropuerto, lucían el N° 12 de los Patriots, propiedad del mariscal de campo Tom Brady, quien jugará su octavo Partido por el Campeonato de la AFC, el tercero consecutivo.

"Ahora sí ganamos y vamos al Super Bowl", dijo en el aeropuerto Terry Whingham, un aficionado estadounidense de 57 años, quien viajó desde Minnesota en apoyo de los Patriots.

El juego por el boleto al Super Bowl comparte escenario en la ciudad con uno de los festivales anuales más populares de la región y de todo el país, el National Western Stock Yard Show.

El sábado, ninguno de los dos equipos tuvo acceso a la prensa; a diferencia de los tres días anteriores, cuando tuvieron que llevar una rutina casi tipo Super Bowl, de miércoles a viernes.