OWINGS MILLS -- La música resonaba en el vestidor de los Baltimore Ravens el sábado, mientras los jugadores guardaban su equipo en bolsas negras frente a sus casilleros.
Próxima parada: New Orleans.
Tras un entrenamiento final en sus propias instalaciones, los participantes del Super Bowl se tomarán el domingo libre antes de dirigirse al "Big Easy" la tarde del lunes de cara a su duelo del 3 de febrero contra los San Francisco 49ers.
"Estamos justo donde queremos estar", dijo el receptor abierto Torrey Smith. "Ahora tenemos la oportunidad de jugar en el más grande. Pero al final del día, aún nos estamos preparando para un partido de fútbol americano".
El entrenador John Harbaugh dirigió la práctica del jueves al sábado como si fuese una semana normal de trabajo. Subieron la intensidad jueves y viernes y se relajaron el sábado.
"Hemos tenido una gran semana. Tuvimos un entrenamiento excelente", dijo Harbaugh tras la sesión de dos horas a puerta cerrada. "Los muchachos están brillantes y están emocionados. Tendremos que ir allá y hacerlo así [o] mejor".
La próxima vez que los Ravens pisen el campo de entrenamiento, será en New Orleans. Esta semana, al menos, no hubo distracciones.
"Creo que siempre es importante tener una buen práctica sin importa qué", dijo Harbaugh. "Tienes que practicar bien para jugar bien. Casi siempre juegas la forma en que practicas. Eso es algo que aprendimos como niños y eso nunca va cambiar".
Fue el último entrenamiento en las instalaciones del equipo para Ray Lewis, quien se retirará tras el Super Bowl.