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Una derrota que complica

LA CORUÑA (EFE) -- El protugués Carlos Queiroz, entrenador del Real Madrid, reconoció este sábado, tras la derrota de su equipo ante el Deportivo de A Coruña, que "la Liga está más difícil, pero no ha terminado".

"Todavía no acabó la Liga y vamos a mantener la ilusión de luchar por el título hasta el último minuto, aunque reconocemos que está difícil", agregó el preparador portugués.

El técnico del Real Madrid se mostró enfadado por el hecho de que su equipo se quedara en inferioridad numérica ante el Deportivo por tercer encuentro consecutivo.

"Tengo que reconocer que jugar una Liga con diez jugadores es muy difícil, y recibir una roja en los tres últimos partidos consecutivos es algo extraño y anormal, pero no voy a discutir los criterios del árbitro, aunque es muy difícil jugar con diez contra el Deportivo y el Barcelona", sentenció.

Pese a la derrota, Carlos Queiroz alabó el carácter de sus jugadores: "Hemos jugado con mucha dignidad, profesionalismo y honor, incluso jugando con diez, porque tuvimos oportunidades para marcar y merece ser gratificado el esfuerzo".

Destacó que en la segunda mitad la actitud de sus pupilos fue "fantástica" y lamentó que la diferencia entre ambos equipos ha estado "en la eficiencia y la suerte, porque el resultado podría haber sido diferente incluso con diez, ya que hemos tenido ocasiones para marcar".

Por su parte, el entrenador del Deportivo, Javier Irureta, comentó que la victoria ante el Real Madrid es "importante de cara al partido del próximo martes ante el Porto en la UEFA Champions League".

El técnico vasco explicó que este triunfo les "anima" para afrontar el encuentro histórico de la vuelta de las semifinales de la máxima competición continental, y aseguró que la clave del partido fue la "expulsión de Zinedine Zidane".

"Ha sido un partido disputado que empezó igualado, pero en el que el primer gol nos ha dado tranquilidad y la expulsión de Zidane ha sido clave y lo ha condicionado, porque jugar con diez a estas alturas condiciona mucho", señaló.

"En la segunda parte hicimos cambios para dosificar y el gol de Cadevila nos ha dado la absoluta tranquilidad", añadió.

Además de para el equipo, Irureta considera que la victoria ante los de Carlos Queiroz "es también importante para el público" y comentó que espera que la afición blanquiazul tenga ante el Oporto "como mínimo el mismo comportamiento que el sábado, porque ha estado volcada y muy cerca y encima del equipo".

"El apoyo del público es vital porque con este ambiente el equipo se crece mucho y espero que el martes todavía sea mejor", concluyó el entrenador del Deportivo, que piensa ya en la cita con el conjunto portugués.

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