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MAZATLÁN, México (AP) - Una interminable lluvia suspendió el
sábado los dos partidos en calendario de la Serie del Caribe,
provocando la celebración de cuatro juegos el domingo en la última
jornada regular y un caos en la organización del evento. El aguacero comenzó temprano en la mañana y, aparte de unos
cortos minutos, continuó ininterrumpido hasta entrada la noche de
Mazatlán, cancelando los juegos de República Dominicana contra
Venezuela y Puerto Rico contra México. República Dominicana y Venezuela jugarán el domingo a las 10.00
(1700 GMT), Puerto Rico y México a las 13.30 (2030 GMT), y luego
Puerto Rico choca con Venezuela a las 17.00 (0000 GMT), y República
Dominicana con México a las 20.30 (0330 GMT). La última ocasión que se jugaron cuatro partidos en un día fue
en la Serie del Caribe de 1992 en Hermosillo, México. Aunque la lluvia no cedía y el cielo negro pronosticaba más
precipitación, la Confederación de Béisbol del Caribe y los
organizadores del torneo mantuvieron esperanzas hasta el último
momento de poder salvar al menos uno de los choques, esperando
hasta las 20.00 para anunciar oficialmente la suspensión. "Hemos debido esperar hasta el último momento para ver si
podíamos celebrar al menos un juego", dijo el presidente de la
Liga Mexicana del Pacífico y presidente del comité organizador,
Renato Vega. Vega dijo que mantienen los dedos cruzado para que la lluvia no
continúe el domingo, reconociendo que no tenían un plan B en el
caso contrario. Descartó la posibilidad de jugar más allá del
lunes, fecha reservada para reasignaciones. "Nadie puede predecir lo imponderable", indicó Vega. "Si esto
falla, pues qué podemos hacer", agregó resignado. El presidente de la Confederación de Béisbol del Caribe, Juan
Francisco Puello, dijo que el reglamento del organismo no contempla
una solución en caso de que no se complete el itinerario de la
serie. Puello convocó a una reunión de emergencia de los presidentes de
las cuatro ligas invernales participantes del evento para delinear
un plan anticipando la posibilidad de que la lluvia continúe y no
puedan jugar el domingo. El lunes, día separado para casos de emergencia, ya está ocupado
por el choque entre Puerto Rico y República Dominicana que no se
pudo celebrar en la jornada inaugural por la ausencia de las
Aguilas Cibaeñas dominicanas, que perdieron su vuelo desde Santo
Domingo. "Estamos trabajando para que se enmiende el reglamento para que
si hay un equipo que no está ahí cuando comience el torneo, pierda
el partido por confiscación", dijo el presidente de la Liga
Puertorriqueña de Béisbol, Joaquín Monserrate. El terreno del estadio Teodoro Mariscal, cuyo cuadro interior no
fue cubierto hasta después de más de seis horas de lluvia en la
mañana, asemejaba un lodazal, con enormes piscinas en sus jardines. Las Aguilas y los Tigres de Aragua venezolanos, cuyo partido
estaba señalado para comenzar a las 13.00 (2000 GMT), llegaron al
estadio, pero cuando fue evidente que su partido no se jugaría,
regresaron a sus respectivos hoteles. Los Venados de Mazatlán mexicanos y los Tigres están empatados
al tope de la tabla de posiciones, con tres victorias y una derrota
cada uno, seguidos de las Aguilas, con un triunfo y dos reveses, y
los Indios de Mayagüez puertorriqueños, que no han ganado en tres
salidas.
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