Luego del gran triunfo de Los Pumas 7’s ante Nueva Zelanda por 33-5 en el primer día de competencia del Seven de Singapur, Gastón Revol y Germán Schulz expusieron sus sensaciones con Scrum.
En primer lugar, Gastón Revol, emblema del seleccionado argentino de seven se mostró feliz por lo conseguido. “Muy contento por lo que jugó el equipo, veníamos de un momento muy duro. La verdad que después de Hong Kong nos replanteamos muchas cosas y, así y todo, tuvimos un muy mal partido con Australia. Mal partido porque no salieron las cosas, no porque el equipo no hubiera estado en cancha, porque realmente nos preparamos muy bien para el partido, pero las cosas lamentablemente no salieron y había que levantarse contra los de negro con todo lo que eso significa”, afirmó.
Además, el cordobés de 37 años aseveró: “Me parece que de una vez por todas el equipo demostró ese carácter que siempre tuvo, eso es lo que nos da mucha alegría y, por supuesto, un empujón muy fuerte para seguir firmes en este torneo”.
Con quince años vistiendo la camiseta albiceleste en este tipo de competiciones, el oriundo de La Tablada Rugby Club no deja de sentir nervios antes de entrar a la cancha. Al respecto, el forward manifestó: “Me puse nervioso, creo que es la palabra. Ansioso, sabés que arrancás el partido, sabés que tenés esa primera pelota, esa responsabilidad. No es lo mismo que estar en el banco, por lo menos para mí, estar en el banco tiene su otro grado de dificultad. Pero, sí, me puse nervioso porque siempre me pongo nervioso, porque sé lo que esta camiseta representa y sabía lo importante que era este partido para todo nuestro equipo y para nuestros deseos de progresar en el torneo”.
En lo referido a los aspectos del juego frente a los All Blacks 7’s, Revol detalló cómo fue la preparación y la puesta en práctica de lo conversado previamente. “Hicimos lo que nos prometíamos que íbamos a hacer, que era trabajar el partido, pelota a pelota, defensa a defensa, ataque a ataque, paso a paso, creo que así lo fuimos trabajando, lo fuimos dominando y terminamos haciendo una diferencia más que importante contra uno de los mejores equipos del mundo”. Asimismo, la leyenda argentina de la disciplina agregó: “Fue pura conexión, hubo errores, arrancamos abajo en el marcador, pero viste cuando te das cuenta que el equipo está plantado, está parado, nos hicieron un try, y dijimos muchachos vamos de vuelta”.
La actuación del seleccionado argentino no inició de la mejor manera y rápidamente debían enfrentarse a un competidor directo. Al respecto, Revol explicitó: “Nos estábamos olvidando de ese fluir que nos caracteriza dentro de la cancha. Obviamente que vas mirando los otros resultados, sabemos lo que nos jugamos no hace falta ni que repetirlo, había que conectar, pero no es simplemente 'che muchachos conectemos', hay un montón de cuestiones que se tienen que trabajar individualmente antes de cada partido para que de golpe el equipo termine apareciendo adentro de la cancha. No es tan fácil como parece o como lo venimos demostrando este año, que un montón de veces apareció el equipo adentro de la cancha”.
No obstante, el hombre que pasó los 1000 puntos con Los Pumas 7’s comentó dónde encuentra la clave. “Es muy difícil de lograr, pero creo que cada uno ya va sabiendo, conociendo y descubriendo lo que tiene que hacer para llegar al partido de la mejor manera y es un poco lo que nos propusimos de cara a lo que viene".
Por otro lado, Germán Schulz también comentó su percepción sobre el juego ante Nueva Zelanda. “Estoy contento porque pudimos dar esa vuelta de tuerca que nos faltaba al equipo, conectar, poner la intensidad que queríamos y sacar adelante un partido que fue durísimo y que tuvimos que laburar los catorce, porque más allá de los primeros que arrancamos, creo que somos catorce loquitos que vamos para adelante, que cuando conectamos, todo fluye”, aseveró.
El jugador surgido de Tala Rugby Club se detuvo en lo pertinente a esa fluidez, gran característica del combinado dirigido por Santiago Gómez Cora y puntualizó: “Se siente antes de entrar a la cancha, en ese vestuario, en la entrada en calor, cuando no se cae la pelota en la entrada en calor, cuando levantamos la cabeza y vemos que todos estamos concentrados pensando en el rival y en que tiene que hacer cada uno. Me parece que ahí es donde se empieza a sentir “.
Finalmente, el forward de 30 años sentenció: “Creo que la clave está en laburar el partido de una pelota a la vez, porque todos los partidos van a haber errores, se nos va a caer la pelota, vamos a hacer tries y lo importante es lo que sigue, porque lo que pasó ya pasó. Lo importante es eso, estamos tan conectados que nos olvidamos de lo que pasó y pensamos en la siguiente y si fue buena no importa y si fue mala también. Un poco esa es la sensación que me quedó y es donde se ve que estamos conectados”.