El partido no tuvo mayor historia que ver cómo los jugadores de la NBA mostraron su gran superioridad en la competición mundialista y en ningún momento fueron inquietados por un rival, Rusia, que demostró no tener en la actualidad ningún potencial ni parecerse al equipo que ganó el oro en los Juegos Olímpicos de Múnich (Alemania).

Estados Unidos no tuvo que pensar en la revancha de la polémica derrota, simplemente los jugadores de la NBA, encabezados de nuevo por el alero de los Celtics de Boston, Paul Pierce, 27 puntos, se limitaron a demostrar la gran superioridad en el campo.

Junto a Pierce, el base Andre Miller aportó 18 puntos, el ala-pívot Antonio Davis logró 13 y seis rebotes y Elton Brand encestó 11 tantos.

"Hemos jugado el partido más consistente del torneo y aunque todavía tenemos que hacer mejor defensa, al final las cosas salieron desde el principio como queríamos", declaró el entrenador de Estados Unidos, George Karl. "El partido de mañana, martes, contra Nueva Zelanda será otra historia diferente y tendremos que trabajar duro".

Estados Unidos finalizó el partido con un 53,9 por ciento de acierto en los tiros de campo; el 47,4 en los triples y el 68,2 desde la línea de personal, con 36 rebotes, 24 asistencias y ocho tapones.

"No podemos perder 19 balones en un partido y eso será algo que debemos corregir en el futuro", destacó Karl.

Rusia tuvo al escolta Zakhar Pachoutine como su máximo encestador con 16 puntos; Rouslan Avleev aportó 11 tantos y Evgueny Pachoutine aportó 10, siete rebotes y cinco asistencias.

Al margen del triunfo de Estados Unidos, que sigue sin levantar ningún entusiasmo en Indianápolis, lo más importante de la primera parte fue el debut del escolta Reggie Miller, el ídolo de la afición local de los Pacers de Indiana, que con 2:13 para que finalizase el segundo cuarto, salió ante el delirio de sus seguidores.

Miller, que se lesionó frente a Alemania en el partido amistoso que Estados Unidos jugó en Portland el pasado mes, está completamente recuperado de la torcedura de tobillo y con el pitido final de la primera parte anotó un triple para dejar a un parcial de 54-44 a favor del país anfitrión del mundial.

La segunda parte fue un paseo para Estados Unidos, que siguió sin hacer una buena defensa, pero tampoco la necesitó con el parcial de 35-19 y la falta de un líder en el equipo ruso, que jugó sin el alero de los Jazz de Utah, Andrei Kirilenko, lesionado en el tobillo izquierdo.