La Liga MX se ha convertido en la "Liga Decio de María". Es más, la Liga tiene su desorden, su personalidad, su manera de expresar y de entender el "juego sucio". Y Decio es el que maneja el arbitraje a su antojo, establece condiciones en la comisión de arbitraje y en la disciplinaria y en su deseo --imagino-- de generar justicia, revoca la decisión que los jueces dictaminaron el fin de semana.
LOS ANGELES -- Habrá que avisarle urgentemente a la FIFA que el futbol mexicano ha aportado una nueva forma o un método distinto para aplicar la justicia en el campo de juego: las cédulas arbitrales no existen, los partidos se "pitan" los lunes y los silbantes pueden ser expuestos a un "linchamiento público" sin que tengan forma alguna de defenderse.
Bienvenidos a la "Liga MX" o la "Liga Decio de María".
Dicen que nunca es tarde para aplicar la justicia. Y puede que hayan existido errores en las sanciones de Nicolás Bertolo (Cruz Azul) y de Paulo Da Silva (Pachuca), pero en qué posición han quedado los árbitros si la Liga viola la cedula arbitral después de cada partido. El arbitraje en México jamás ha tenido independencia, tampoco la Comisión de Disciplina. Los partidos se están "pitando" los lunes. Los árbitros están siendo pisoteados. La cédula arbitral tendría que ser como una "carta magna": intocable.
La Liga MX se ha convertido en la "Liga Decio de María". Es más, la Liga tiene su desorden, su personalidad, su manera de expresar y de entender el "juego sucio". Y Decio es el que maneja el arbitraje a su antojo, establece condiciones en la comisión de arbitraje y en la disciplinaria y en su deseo --imagino-- de generar justicia, revoca la decisión que los jueces dictaminaron el fin de semana.
Quiero pensar que Decio de María actúa de buena fe, pero cuando hay intereses de por medio y cuando de actúa como "juez y parte", es fácil confundir los caminos y cruzar esa delicada línea.
Felipe Ramos Rizo, ex árbitro internacional mexicano y analista de ESPN, dice que "las decisiones para revertir la cedula y el trabajo arbitral dependen de la playera y de los directivos que están detrás de los equipos perjudicados". Cuidado con este tema. Está claro, entonces, que los equipos más poderosos se verán siempre más beneficiados en esta clase de situaciones y que la Liga entrará en un paraje de dudas siempre que su estructura dependa del punto de vista de un persona o y no de una estructura competente y seria.
El arbitraje necesita apoyo, fortaleza, independencia. Lo mismo una Comisión de Disciplina, que pueda trabajar conjuntamente con la de arbitraje para impartir la justicia, pero si Decio de María mete sus manos, el asunto tomará otra vertiente, una muy peligrosa, donde las sospechas estarán por todas partes.