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Un Giro de ensueño para Julián

Julián Arredondo tiene un estilo diferente a Nairo Quintana Cortesía Luis Barbosa/Titan Sports

VALSUGANA, ITALIA - Esas piernas de roble son la causa de tanta alegría para millones de aficionados que comprobaron que los mejores escaladores tienen denominación de origen: Colombia. Julián Arredondo posee un físico compacto, pero sumamente eficiente para dominar el terreno de las rampas más complicadas. Un estilo diferente al de Nairo Quintana, quien parece que flota en los pedales. El de Perico es un golpe de pedal que se deja sentir y exige a los materiales de su bici cada vez que rota esos pistones que dios y su tierra le dio. Unos que se parecen mucho a los de Carlos Betancur... será porque los dos nacieron en la misma ciudad. Pero es la bendita tierra del café la que además tiene a 5 entre los mejores especialistas en subida con el venezolano Yonathan Monsalve (NRI) como el sexto latinoamericano en la lista del top 10.

Hemos sido testigos de todos los estados anímicos y físicos por los que ha pasado Arredondo. Cuando su equipo le dio carta abierta lo único que tenía en mente Julián era ganar una etapa y en ese afán se hizo de la maglia azzurra. Con el paso de los días se apreciaron algunas estrategias a veces un poco encontradas dentro del equipo: primero pensaron en victoria de etapa, luego en defender la camiseta, luego en llevar a Robert Kiserlovksi a los mejores 10 de la general y más tarde otra vez la lucha por la maglia azul.

Sinceramente esta faena ha sido muy solitaria y con un doble desgaste para Perico, porque llevarle ritmo a su compañero Kiserlovski en la subida con los mejores no ha sido fácil. Ese cansancio, las ansias de querer ganar la etapa y en algunas ocasiones equivocarse -como cuando salió muy temprano en Montecampione- tenían a Julián muy nervioso por lo que realmente podría sacar de este primer Giro.

En la etapa de la nevada en el Stelvio nos confesó Julián que estuvo a punto de bajarse de la bicicleta porque había sufrido un caso de hipotermia. Quién sabe de dónde sacó fuerza y convencimiento propio para seguir y terminar con el grupeto a 44 minutos de Nairo ese día. Recuperar el cuerpo es una cosa, pero la mente puede jugarle a ellos una mala pasada.

El vivaracho muchacho de Ciudad Bolívar iba perdiendo el brillo en sus ojos conforme pasaban los días, con muy pocas oportunidades de las cuales echar mano y con el reto de permanecer activo para buscar sumar puntos. Pero aunque muchos llegaron a ser segundo lugar en la clasificación de la montaña, incluido ayer el también colombiano Robinson Chalapud, Julián parecía inmune al daño que pudieran provocar las fugas del día. Como si ya fuera cosa del destino permanecer ahí en los últimos 10 días.

Finalmente llegó el momento bueno, donde todos esperábamos que una fuga cargada se hiciera de la etapa en el Refugio Panarotta. En la escapada se montó Julián, pero también Fabio Duarte, el otro joven líder del Colombia Coldeportes. Fabio además traía esa espinita clavada cuando en la etapa 16 pudo rebasar a Quintana en la línea de meta, pero no a Fabio Aru, quien ganó la etapa. Para Duarte también era la oportunidad soñada y su condición en la tercera semana -así como las características de la llegada en alto- le daban una ligera ventaja ante el resto gracias su punto de velocidad al remate.

Los dos colombianos se mantuvieron ecuánimes ante los diferentes ataques hasta que llegó la hora de la verdad para ambos dentro de los últimos 3 y medio kilómetros. "Yo veía muy fuerte a Fabio desde el inicio de la etapa", nos dijo Julián más tarde. "Desde el auto me venían poniendo al tanto de la situación y ellos fueron los que me dijeron que tenía que atacar de lejos".

Julián salió con una buena aceleración y dejó a Duarte siguiéndole la estela, aunque no tan distanciado. De vez en cuando el antioqueño volteaba a ver a su amigo y compatriota. Un duelo emotivo, pero igualmente cruel en un cierre que le pareció eterno a Perico. "Ya en el último kilómetro casi no tenía fuerzas, pero así es el ciclismo, si yo sufro yo sé que todos los demás sufren", nos dijo ya con una con sonrisa de alivio. A su pensamiento llegó la imagen de sus padres, sus amigos y todos aquellos que le dieron una mano "cuando nadie sabía quién era". Pero esos caminos anónimos y su dominio en el Asia UCI Tour le dieron el motor que atrajo al equipo Trek Factory Racing. El campamento de esta escuadra de licencia estadounidense está en los cuernos de la luna y no dudamos que quieran traer a un complemento para Julián y darle apoyo para las clásicas, carreras de semana y las grandes. No estaría nada mal que le echarán un ojo a alguien como Fabio Duarte.

El corredor del Coldeportes se quedó a 17 segundos de su compatriota, Julián venía haciendo zigzag en los últimos metros ya sin fuerzas prácticamente. Fabio llegó con el corazón en la garganta y con una desazón muy grande por no poder rematar.

Mientras su equipo lo cobijaba en la carpa de corredores, Julián no cabía de alegría en el podio haciendo toda clase de celebraciones, besando la maglia azzura que ya es suya de manera oficial y más tarde mojando a medio mundo con la champaña.

En el grupo de favoritos se vivieron algunos arrancones, el más significativo el de Pierre Rolland a cuyo castigo sobrevivieron Quintana, Majka, Aru y Urán, pero no Evans. El australiano perdió dramáticamente su tercera casilla del podio y cayó hasta la 9º posición, mientras que el francés del Europcar es ahora 3º, pero con Fabio Aru (AST) y Rafal Majka (TCS) a 2 segundos.

Esta mañana tuvimos oportunidad de hablar un par de minutos con Rigo, quien estaba de buen semblante -algo nato en él- y nos comentó que había descansado y recuperado bien después de la congelada etapa 16. Nos habló de la tranquilidad que tiene, las ganas por terminar bien la carrera y de no enfocarse en las cosas que ya no tienen vuelta de hoja. "Es mejor no encerrarse en lo mismo", nos confió.

Hablamos también con Andrey Amador, uno de los aun 9 corredores del Movistar. El tico nos dijo que el equipo se había preparado para una defensa porque sabían que Nairo en cualquier momento podría tomar la camiseta de líder. Ahora saben que la responsabilidad es grande, pero nada extraño cuando el año pasado el tren azul hizo su labor para que el boyacense terminara segundo en el Tour de France. Andrey por cierto nos dijo ya sentirse mucho mejor de la lesión en su cuello y con muchos ánimos para contribuir a la causa mayor del equipo. Nairo también nos dijo el ritmo que pusieron en la última etapa fue relativamente moderado para guardar un poco de cara a la jornada del viernes.

Llega el duelo mano a mano en la cronoescalada de 26.8km para llegar al Cima del Monte Grappa después de un inicio de 7.5km en llano. Los últimos 20 corredores saldrán cada tres minutos, Rigoberto Urán será el penúltimo en salir y será referencia de Nairo Quintana, quien cierra la etapa. Los primeros 11.8 kilómetros de subida tienen una media de 7.4% aunque hay muchas rampas de 9% y más. Pero no solo es el terreno en constante subida sino las curvas que harán que el ritmo sea una tarea bastante complicada.

Luego de un ligero respiro entre el km 9 y 8 a la meta, las rampas volverán a clavarles los dientes a los ciclistas con una media sobre el 8% y rampas máximas de entre 11 y 14%, El cierre es tremendo porque no hay una pausa, no hay alivio sino hasta que los seigneurs sostengan a los protagonistas. Es un duelo de pronóstico no solo entre Nairo y Rigo, sino por saber quién es el dueño del tercer cajón del podio... por ahora.