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Decio de María y "¿Tú también, Brutus?"

MIAMI -- La traición ha sido consumada. "Et tu, Brute?", puede preguntar el futbol mexicano a los mismísimos directivos del futbol mexicano.

Del latino al español: "¿Y tú también, Brutus?", pregunta Julio César ante la sublevación y el magnicidio. Y Brutus, muy bruto, con el puñal en la mano. Y Decio de María y sus senadores, muy Brutus, con la daga satisfecha.

Los directivos del futbol mexicano han consumado el crimen. Y esperan ser glorificados por ello dentro de tres semanas, al hacer el anuncio oficial. Desde ahí, desde el trono de la impunidad.

1.- Cada equipo de la Primera División podrá registrar a diez jugadores no nacidos en México. Una decisión ya tomada. Se anuncia 25 o 26 de mayo. Dependerá de que el patíbulo esté listo, según difunden varios medios, entre ellos Grupo Reforma.

2.- ¿Cuántos de esos diez no nacidos en México pueden estar en la cancha? Todos. Los que los miedos del entrenador, la voracidad del directivo y la delincuencia con los promotores permitan.

3.- Esas mentes, retorcidamente falaces, pretenden compensar la perpetración de este daño, estatuando que para cada partido, técnicamente, deben ser registrados ocho jugadores mexicanos.

4.- Además, esta decisión de consolidar a diez no nacidos en México, tiene un acápite: no se piensa, ni remotamente, en reducir el número de extranjeros o de regularizar de manera drástica a los naturalizados. Y claro, el espectro de no nacidos en México es amplísimo.

Evidentemente hay hipócritas. Varios. Numerosos. Y algunos que prometiendo empobrecieron su credibilidad. Y otros que sumisos, enriquecieron la masa inerte de su pusilanimidad. Y otros más que ven el camino de ser más promiscuamente millonarios.

1.- Recordemos que Jesús Martínez y Andrés Fassi, el Grupo Pachuca, pues, se relamieron los bigotes anunciando el estudio de mecanismos para salvaguardar la jerarquía -¿sí, cuál?- del futbolista mexicano, en su propio balompié. La realidad es que en la globalidad de su institución hay becados jugadores de África y Sudamérica.

2.- ¿Y Jorge Vergara? En Raza Deportiva de ESPNDeportes se comprometió a dar nombres de quienes se opondrían a su proyecto de reducir el número de extranjeros y buscar mecanismos para desarrollar al jugador mexicano. Es el momento de que ejerza su promesa y revele a los brutos Brutus que consuman la traición.

3.- Podemos sintetizar las palabras de otros presidentes en la frase del ingeniero Alejandro Rodríguez, como presidente de Tigres: "No hay talento en el futbolista mexicano, por eso recurrimos al extranjero".

4.- O en la aseveración de Alejandro Irarragorri, presidente de Santos. "Tenemos que incrementar el nivel de espectáculo de futbol con esos futbolistas (no nacidos en México)".

5.- O en la visión de Luis Miguel Salvador, director deportivo de Monterrey: "Esta es una industria, es un negocio, y sí necesitamos jugadores extranjeros para sostenerlo".

6.- Y claro, en el futurista Decio de María, presidente de la FMF: "Sí estamos preocupados por el número (de no nacidos en México), pero el nivel del espectáculo, de competencia y como negocio, es muy importante".

Obviamente todas estas decisiones se toman en un escenario turbio, sospechoso, malsano, perverso.

¿Tiene culpa el futbolista mexicano? Sin duda. Pero en su desarrollo, los Herodes son sus patrones. El infanticidio de los Sub 17 aún no termina.

1.- Claro que hay hombres felices. Los promotores que seguirán distribuyendo jugadores. Pocos de buena calidad, muchos de mediana calidad, y claro, numerosos de infame calidad.

2.- Y no sólo los representantes, sino directivos cómplices que aceptan una comisión por semejantes esperpentos de jugadores. El fraude debe cerrarse por ciclos.

3.- ¿Cuántos jugadores sobresalientes han llegado a México recientemente? ¿Gignac? ¿Cardona? ¿Funes Mori? ¿Egidio? ¿Boselli? ¿Benítez? Porque la inconsistencia suele ser su sello. Aún en Tigres buscan a Gignac en los videos de la Final de Libertadores ante River y en la Concachampions ante América.

4.- Chivas, lo citábamos en su bofetada a la FMF, es un emergente mentís a las aseveraciones de Decio, Rodríguez, Salvador, Irarragorri, y al discurso falaz de Martínez y Fassi. Está en Liguilla, jugando de manera agradable, ofensiva. Y respetando su historia.

5.- La cruda elección de la afición: quiere ver a su equipo ser protagonista. Le importa poco la invasión de no nacidos en México. Hasta se confunde pensando que si ocurre en Europa, puede y debe ocurrir en México.

6.- Al final, claro, sufre la selección mexicana, que con este retroceso, con este casi deceso, en una par de generaciones más, seguramente terminará recurriendo a una sobrepoblación de naturalizados en sus filas.

La traición ha sido consumada. "Et tu, Brute?". Y de apellido puede elegir a cualquiera de los personajes mencionados anteriormente. Y de los no mencionados, también.

Escribió Shakespeare: "Dueños de sus destinos son los hombres. La culpa, querido Bruto, no está en las estrellas, sino en nuestros vicios".