LONDRES -- Los corazones de muchos se estremecerán cuando recuerden cuando en el boletín del colegio decía: "podría ser mejor", y esa es la frase que mejor se aplica al West Ham United esta temporada. La gente habla de dar pelea, y esa fue la expectativa en 2013-14. La mayoría dirá que hubo avances mientras que otros pueden reclamar que el equipo ha tambaleó hacia atrás. La verdad es que la mitad de tabla es una posición aceptable si tenemos en cuenta el saldo bancario del club y la forma en que la Premier League está estructurada financieramente.
Alumno estrella
Mark Noble fue votado como "Hammer del Año" en la ceremonia anual de premiación y es testimonio de la clase de temporada que el club ha tenido. El galardón fue para uno de los hijos favoritos del club; alguien que ha brillado a veces y al que nadie le ha hallado deficiencias. Ha tenido una temporada sólida con algunos momentos sobresalientes, pero no siempre ha sido excepcional; esto es una recompensa por años de servicio desinteresado a la causa. James Tomkins fue el único otro jugador individual excepcional -- otro favorito local mostrando que los mejores jugadores son a menudo los que están justo debajo de tu nariz -- algo a lo que Sam Allardyce debería prestar más atención.
Alumno decepcionante
Si el West Ham fuese un colegio habría un gran número de jugadores parados esperando fuera de la dirección, pateando las paredes, mirándose el uno al otro y murmurando en voz baja: "Es tu culpa que debamos estar en penitencia".
Nadie ha sido verdaderamente horrible, pero nadie ha brillado. George McCartney simplemente avanza con cautela haciendo lo que hace bien y sin problemas. Los debates entre los fieles seguidores todavía giran en torno a la función del capitán Kevin Nolan, mientras que a menudo parece que sus críticos ven al jugador de Liverpool como un hombre peligroso. West Ham es un club confundido en este momento.
Notas del profesor
Ah, Allardyce. ¿Por dónde empezamos? Puedes amarlo u odiarlo, él sólo seguirá haciendo lo que siempre hace. Obstinado en el mejor de los casos y simplemente intratable en el peor, si buscamos en el diccionario la definición para un campechano del norte, debería estar la fotografía de Sam.
Él juega siguiendo los porcentajes y nunca perseguirá una causa si siente que ya está perdida, pero poner un equipo juvenil para ser sacrificado ante el Nottingham Forest en la Copa FA -- uno de los peores momentos de la temporada -- fue un error importante y uno que ningún seguidor del West Ham quisiera volver a ver. Tiene que cumplir con los fanáticos de alguna manera, sin embargo, y un poco de estilo y ritmo para la próxima temporada, unido a la destreza indudable del manager en el arte de la defensa, seguramente podrá revertir cualquier sensación de malestar.
Nota final: C
El puesto final del West Ham en la liga deja al equipo en casi exactamente la misma situación que el año pasado y los fanáticos esperarán alguna gran inversión para mejorar el rendimiento -- especialmente en el departamento de entretenimiento -- para empujar a los Hammers hacia un confortable lugar dentro del top ten mientras entran en su penúltima temporada en Upton Park. Incluso los que están fuera del club podrían decir que lo que se necesita en la próxima temporada es algo de estilo y ritmo para hacer que el equipo sea menos unidimensional.
Calificar una temporada golpeada por las lesiones, frustrante, pero en última instancia de mitad de la tabla no es fácil, pero si las calificaciones son las mismas que cuando iba a la escuela -- por lo general de la A a la F (reprobado) -- entonces, ¿qué podría darle a este equipo que no fuese una C-más? (nota de los Spurs, una carrera hacia la semifinal, buena cantidad de planillas limpias) o C-menos (nota del Crystal Palace, tercera ronda en la Copa FA, el mes de enero y entretenimiento pobre).