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Ormaechea: "Yo tengo mucho más, pero ella no me dejó hacer nada"

PARÍS -- Hay momentos duros en la carrera de un deportista. Y vaya si eso vivió la argentina Paula Ormaechea el viernes en Roland Garros, al sentir impotencia en su derrota contra la rusa Maria Sharapova, quien le infligió un 6-0 y 6-0 en menos de una hora en tercera ronda.

"Sé que yo tengo mucho más, pero ella no me dejó hacer nada... La vi jugar partidos y tiene algunos muy buenos y otros no tanto. Hoy fue impecable, no puedo decir nada", comentó en rueda de prensa la tenista de Suchales, de 21 años y ubicado Nº 75 en el ranking de la WTA.

Ormaechea dispuso de una mínima opción al inicio del encuentro, cuando tuvo dos bolas para romper el servicio de la rusa. La lluvia obligó a suspender temporalmente el encuentro y, tras la reanudación, Sharapova borró de la cancha a la argentina.

"Ha jugado increíble. No he tenido ninguna oportunidad. Tiene todo el mérito. ¿Qué puedo decir?", insistió la argentina.

Ormaechea insistió en que Sharapova firmó un partido perfecto, algo que no le ocurre siempre. "No creo que la distancia tenística sea tan grande" entre su nivel y jugadoras de ranking similar al de Sharapova, pero "me tocó perder".

"Sinceramente, es feo estar dentro de la cancha y ver que no tenía posibilidades. Dentro de todo, hice lo que pude. Metía las pelotas, pero era muy difícil. Venían cañonazos", agregó la argentina. Y reconoció que "no ha sido fácil estar ahí, no poder hacer nada".

Poco pudo analizar sobre el partido porque no pudo desplegar ninguna táctica, pero señaló que "la idea no era entrar a jugar palo y palo porque ella le pega mucho más fuerte. No pensé en que me quería ir de la cancha. Traté de disfrutar. Me reía... ¿Qué iba a hacer? No se juega todos los días en un estadio así", añadió.

Por su parte, la rusa, campeona de Roland Garros en 2012 y finalista en 2013, no dudó: "No hay razón por la que no deba ser favorita para el torneo", comentó, con 27 años, la octava del listado de la WTA.

"Si no me viera como favorita para ganar, no tendría sentido venir a París", agregó Sharapova, que subrayó que la arcilla es una de sus "superficies favoritas para jugar".

La rusa tendrá que derrotar en octavos de final a la australiana Samantha Stosur, finalista de Roland Garros en 2010, si quiere seguir avanzando en un cuadro en el que ya se despidieron las tres primeras del ranking, es decir, la estadounidense Serena Williams, la china Na Li y la polaca Agnieszka Radwanska.