MÉXICO -- David 'Severo' Carmona demostró que la derrota ante Omar Narváez el año pasado, cuando disputó por primera vez el cetro mundial, le ayudó a ser mejor peleador. La noche del viernes, con una mano lesionada, tuvo los arrestos suficientes para vencer a un veloz Ricardo Rodríguez y dio nuevamente banderazo hacia una nueva oportunidad titular.
Con lo justo, pero convincentemente, Carmona (17-2-4, 8 Ko's) volvió a la senda triunfal en medio de un gran ambiente en el Plaza Condesa de la Ciudad de México, hasta donde cientos de seguidores de ambos se trasladaron para ser testigos de una buena pelea de boxeo, llena de estrategia, velocidad, contragolpes y castigo.
"Una pelea difícil, sabíamos que era una pelea dura, de campeonato mundial, venía preparado para combatir los 10 rounds a todo vapor, lo dijimos, tenía la seguridad de que podía soportar todos los rounds, desafortunadamente desde el cuarto round me lastimé la mano izquierda, me dolía hasta para tirar el jab, sin duda es la mano maestra, pero me lastimé y gracias a Dios salimos con la mano en alto, encontramos su punto débil y ya para el último round ya no quería nada", expresó Carmona.
"Comienza de nuevo la ruta al campeonato, en este deporte nunca se deja de aprender, voy a seguir aprendiendo para llegar a las grandes ligas y ojalá algún día se me conceda la revancha con el gran Campeón Narváez o quien esté en turno, porque sé que puedo lograr mi sueño de ser monarca mundial", confió el púgil mexicano.
Sobre el gran apoyo que recibió David sobre el pleito, el púgil mexicano se dijo orgulloso de haberse llevado los aplausos en su primer pleito desde que cayó con Narváez en diciembre pasado en Argentina.
"Era un aliciente extra que tenía y a la vez una presión el regresar ante mi gente, en mi casa y con mi familia, tenía su apoyo y fue un aliciente extra para dejarlo todo en el ring, la mitad de la pelea la llevé con sólo una mano", sentenció el púgil mexicano de apenas 23 años.