SALTA -- Nunca Los Pumas habían hecho más de 30 puntos en el Rugby Championship. Nunca Los Pumas habían apoyado tres tries en un mismo partido en este torneo. La última vez que habían superado los 31 tantos de este sábado ante Sudáfrica fue hace más de dos años ante Italia en San Juan, cuando ganaron por 37-22. Pero la realidad es que todo eso pasó como si nada. La cara de los jugadores era de frustración tras la caída con los Boks, en Salta.
El seleccionado argentino ganaba por 28-16, es decir por 12 puntos, en el minuto 18 del complemento. Y se les escapó. Como en 2012 y 2013 con Sudáfrica en Mendoza, y al igual que en Gold Coast y Perth frente a Australia. El triunfo estaba en sus manos, y se esfumó.
"Perder cuando estás tan cerca es muy duro", confesó Juan Fernández Lobbe, con los ojos rojos de bronca. "Nos duele porque creíamos que se nos iba a dar el resultado que tanto buscamos", agregó Marcos Ayerza. Hourcade empezó su conferencia y dijo que "la sensación es fea, estamos muy enojados".
La expresión de cada uno que pasó por la zona mixta del Padre Martearena reflejaba dolor. Los Pumas fueron mejores que Sudáfrica. Merecieron el triunfo. Pero los pequeños errores se pagan caro contra estos equipos. Ya se dijo una y otra vez, cada vez que los argentinos estuvieron al borde del triunfo en el Rugby Championship.
Sin embargo, la bronca es mayor. Porque desde que se inició este certamen en 2014, Los Pumas dieron pasos adelante en el juego. En las formaciones fijas, tanto en el scrum como en el line, brillaron frente a los Boks, el segundo mejor del mundo. En Salta, ¡hicieron tres tries! Y tuvieron unas cuantas chances más para apoyar, que se desperdiciaron por detalles.
Parecía que era el día. Todo estaba dado. Y se escapó. Una vez más. Encima ahora viene la parte más dura, con el viaje a Nueva Zelanda y Australia. Los All Blacks les metieron 51 puntos a los Wallabies y mostraron que están vigentes. Los de McKenzie, pese a la caída abrupta en Auckland, están en franco ascenso.
La bronca es inmensa. Pero ya los jugadores y el staff tienen que dar vuelta la hoja. La sensación es que se perdió una oportunidad histórica. El primer triunfo en el Championship, la victoria ante Sudáfrica que tampoco se había dado nunca y la plataforma de despegue para lo que viene.
Hay algo que está claro. Hoy Los Pumas tienen un plan de juego, un sistema, un convencimiento que hacía mucho no se veía. Eso, a lo largo del camino, traerá sus frutos. Hoy, es difícil ver el lado positivo de todo lo bueno que se hizo porque la derrota volvió a llamar a la puerta.