TAMPA -- En medio del escándalo que envuelve a los New England Patriots por supuestamente manipular balones antes de la Final de la Conferencia Americana, el ex mariscal de campo campeón del Super Bowl con los Tampa Bay Buccaneers, Brad Johnson, reconoció haber pagado para alterar los ovoides antes de dicho campeonato.
En entrevista para el Tampa Bay Times, Johnson confesó que le costaba trabajo lidiar con los ovoides recién comprados, situación que le motivó a tomar acciones en torno a los 100 balones con los que contaba la NFL antes del Super Bowl XXXVII, disputado entre los Oakland Raiders y los Bucs.
"Le pagué a algunas personas para arreglar los balones", reconoció. "Fui y tomé los 100 balones y me hice cargo de ellos". Johnson se gastó "7,500 dólares".
Las declaraciones avivan la crítica pública e interna que ha caído sobre los Patriots por la revelación de una fuente sobre los ovoides utilizados en la Final de Conferencia, la cual aseguró que 11 de 12 ovoides no estaban inflados conforme reglamento.
Mover la ofensiva con los balones alterados representaría una ventaja competitiva para New England, situación que motivó una investigación de la NFL para determinar si en efecto cometieron la falta.
Los Patriots accedieron al Super Bow, tras imponerse 45-7 a los Indianapolis Colts en Foxborough.