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Regresa la Bundesliga con morbo y un Bayern recargado

BUENOS AIRES -- Este viernes 30 de enero regresa a la acción la Bundesliga 2014-15 tras el parón invernal.

El campeonato alemán, en el que Bayern de Múnich pasa por la piedra a sus rivales. Sólo 4 goles en contra en 17 partidos. 41 a favor. Ninguna derrota. De 51 puntos en disputa apenas se le escaparon 6 (tiene 45) fruto de tres partidos empatados. Unicamente en dos encuentros no marcó goles, sendos 0-0 contra Borussia Möenchengladbach y Hamburgo en calidad de visitante.

Descansa en sus cuatro fantásticos, Robben (10 goles), Götze (7), Lewandowski (7) y Muller (7) y bajo la tutela de Josep Guardiola en su segunda temporada como entrenador, extiende un dominio de apariencia imperecedero.

El multilaureado técnico catalán continúa sorprendiéndose como el primer día por la eficacia con la que los equipos alemanes despliegan el juego de contraataque, pero ha dado con la fórmula para que éste deje de sorprender a sus defensas. Con él en el banco, el Bayern se encuentra inmerso en una etapa de transformación a la que se abraza con pasión y convencimiento.

El gigante bávaro dulcificó su relación con la pelota, incorporó el balón a su preparación física, redescubrió el juego, y luce adaptado al 3-4-3 de Guardiola que tanto le gusta al entrenador. Sistema que, interpreta, le posibilita aprovechar por completo el ancho del campo y establecer superioridad numérica en los sectores de la cancha donde le interesa que se desarrolle el juego.

El Bayern de Guardiola visitará el viernes al Wolfsburgo, su escolta en la clasificación. El equipo de la marca Volkswagen se ubica a 11 puntos de distancia del cuadro muniqués (45-34), que parece competir sólo contra sí mismo.

Bayer Leverkusen y Borussia Möenchengladbach, tercero y cuarto respectivamente en la tabla, se sitúan demasiado lejos pese a su altura en la clasificación. Con 28 y 27 puntos, ya han perdido de vista al Bayern. Guardiola incide de manera permanente en una necesidad imperiosa.

Exigir a sus jugadores el máximo esfuerzo por más que la Liga esté prácticamente en el bolsillo a falta de la segunda parte del campeonato. Concluyó Pep hace unos meses, que no debe ser tan condescendiente como lo fue en su primer curso como entrenador del equipo bávaro (2013-14), cuando permitió que los jugadores ejercieran influencia en su planteo de cara a la UEFA Champions League después de ganar la Liga.

Real Madrid no perdonó y arrasó al campeón alemán en el Allianz Arena para luego optar a la conquista de su décima Copa de Europa. El técnico ha planteado esta temporada el objetivo de ir a por la Copa de Europa y en ello está. Hay una diferencia sustancial respecto a la pasada, y es que no debe lidiar con una epidemia de lesiones. El Bayern está más fuerte, y el parón invernal le ha servido a Guardiola para tener lista y preparada a su tropa de cara al asalto final a los títulos. De hecho, hasta el infortunado Tiago Alcántara (víctima de un tendal de lesiones en sus rodillas desde hace algo más de un año) comienza a calentar motores con su reincorporación gradual al grupo.

Todos han aprendido que la temporada no se termina con la conquista de la Bundesliga. Buscan recuperar las sensaciones que llevaron al equipo a ganar la UEFA Champions League 2012-13 en Wembley el 23 de mayo de 2013 frente al Borussia Dortmund (1-2).

La intención del club muniqués es establecer una dinastía en Europa sin cambiar sus señas de identidad, e incorporando los fundamentos que han hecho grande en la historia del fútbol al entrenador catalán. Guardiola tiene a todos sus jugadores en tensión y no se adivina un once básico. Acumulan gran cantidad de minutos Neuer; Rafinha, Boateng, Dante y Joan Bernat; Lahm, Xabi Alonso; Robben, Götze, Ribery, y Thomas Müller. Pero Benatia, Rode, Lewandowski y el peruano Claudio Pizarro asoman siempre a mano para completar un equipo en el que nadie, se llame como se llame, puede presumir de tener asegurado el puesto. Y, por las dudas, Pep mete presión con la inclusión de 5 jugadores de 18 años llenos de ambición que buscan día a día hacerse con un lugar (los volantes Gianluca Gaudino, Lucas Scholl -hijo del emblemático volante Mehmet Scholl, internacional alemán que jugó en el Bayern durante 15 temporadas entre 1992 y 2007-, Marco Hingerl, Sinan Kurt y el delantero Michael Eberwein), más otro volante de 20 años y gran valor para el DT como Mitchell Weiser.

Como fuere, retorna la liga alemana, el campeonato mejor organizado y más equitativo de Europa en el apartado financiero. Y vuelve con morbo asegurado. Este año centra la atención la situación de varios grandes como Hamburgo, Stuttgart, Borussia Dortmund (ya en zona de descenso directo) y Werder Bremen, que luchan por no bajar a segunda división.

Borussia Dortmund, que hace dos años cautivó al mundo al eliminar al Real Madrid en las semifinales de la UEFA Champions League, acaba de hacer los trámites pertinentes para jugar en segunda división a partir de 2015-16 si se consuma su debacle. Además, su entrenador, el carismático Jurgen Klopp, podría dejar la conducción del equipo 'canario' en el próximo mes de julio.

La segunda vuelta del campeonato será fratricida.