PHOENIX -- Phoenix ya está lista y en plan grande para la invasión del Super Bowl XLIX.
El área conurbada de Phoenix muestra en cada esquina algún símbolo, leyenda o sugerencia del partido de campeonato de la NFL, que disputarán los Seattle Seahawks y los New England Patriots.
El Super Bowl se jugará en el University of Phoenix Stadium, del suburbio de Glendale, localizado a unas 20 millas al oeste del centro de la ciudad. Será la segunda ocasión que alberga el partido grande de la NFL ese mismo estadio, que nada tiene que ver con la universidad que lleva su nombre, sólo es el patrocinador que pagó por imagen. Es la casa de los Arizona Cardinals.
Esa área de Phoenix es la puerta principal a los entrenamientos y campamentos primaverales de beisbol en la Liga del Cactus.
A diferencia de la ocasión anterior, en el 2007, la mayoría de las actividades oficiales se realizarán entre el centro y el área más turística de la región, Scottsdale. En el centro estarán cerradas, conforme avance la semana, gran cantidad de calles para celebrar un gigantesco "carnaval" con comida y bebida para los cientos de miles de aficionados que la ciudad espera conforme avance la semana.
También ahí está instalado el tradicional e imponente Centro de Medios del Super Bowl, donde cientos de periodistas transmitirán sus informaciones para más de 170 países y territorios, en 25 idiomas diferentes. En la sala de prensa, también están instaladas las estaciones de radio que transmiten 24 horas al día información previa al Super Bowl y es donde la liga organiza sus conferencias de prensa y anuncios oficiales.
Scottsdale es otro suburbio, alrededor de 20 millas hacia el noroeste del centro de Phoenix, donde la bonanza económica, las personalidades, los autos de súper lujo, los restaurantes, centro nocturnos y majestuosos hoteles lucen espectaculares. De hecho, ambos equipos montaron sus campamentos orientados hacia el área de Scottsdale, que también fue la sede de los entrenamientos del Pro Bowl la semana anterior. En Scottsdale también cerrarán el principal cuadro para dar paso a la fiesta sin preocupación vehicular. Y será el máximo punto de reunión nocturna para locales y visitantes durante toda la semana.
Es el sitio que ESPN eligió para montar su campamento y concentración durante la cobertura del Super Bowl, en un gran complejo abierto al público para que observe de cerca la grabación de sus programas de televisión en español, inglés y cualquier otro idioma.
La "Super Semana" comenzó ya Arizona, que este lunes sólo esperaba la llegada por la tarde del segundo invitado principal, New England, que el campeón Seattle durmió en la sede de la contienda desde la noche del domingo.