LONDRES -- El equipo Mercedes era el favorito de cara al Gran Premio de Malasia, pero al final fue la escudería del 'Cavallino Rampante' el que se llevó la victoria. Sebastian Vettel estableció un récord con su cuarto triunfo en Sepang. Fue la victoria número 222 de Ferrari en la Fórmula 1 y su primer triunfo en 34 carreras. Vettel, quien no ganaba desde el 2013 en el Gran Premio de Brasil, casi 20 carreras, es el trigésimo octavo piloto diferente en ganar con Ferrari, que por cierto es el segundo equipo italiano donde ha triunfado; ganó con Toro Rosso en el 2008. El cuatro veces campeón también se convierte en el tercer alemán que queda en el primer lugar con la la organización de Maranello, seguido por su ídolo de la infancia, Michael Schumacher, y la estrella de los 60´, Wolfganf von Trips. Vettel, ahora cuenta con 40 victorias en la Fórmula 1, y que lo colocan solo por detras del ex piloto brasileño, Ayrton Senna, en la lista de todos los tiempos de los máximos ganadores. Por otro lado, Toro Rosso tuvo otro día importante no solo porque sus dos carros finalizaron en los puntos primera vez en 12 carreras, también porque se colocaron por enfrente de los autos Red Bull por primera vez desde el Gran Premio de Australia en 2009. Max Verstappen terminó en séptimo lugar y de esa manera se convirtió en el piloto más joven en obtener puntos en la historia de la F-1 con 17 años, cinco meses y 27 días, dejando atrás el récord de Daniil Kvyat, el ex piloto de Toro Rosso, en el Gran Premio de Australia del año pasado. Por su parte, el también novato Carlos Sainz terminó en octavo, convirtiéndose en apenas en el quinto piloto en los últimos diez años en ganar puntos en sus dos primeras carreras. También hay otros datos interesantes relacionados con el retiro de Pastor Maldonado de Lotus, quien no logró terminar la carrera y está fue su segunda carrera en la que se tiene que retirar. Cabe destacar que desde la temporada 2011 (año de debut) no ha logrado ver la bandera de cuadros en sus dos primeras citas. En tanto, Fernando Alonso y Jenson Button también tuvieron que retirarse de la carrera provocando que sea la primera vez desde el Gran Premio de Estados Unidos del 2006 que ningún McLaren logre acabar una carrera.