<
>

Receso renovador en Madrid

MADRID -- La pausa en Liga por la fecha FIFA, la última hasta junio, fue benévola con el Real Madrid.

Lejos de la presión por la dinámica negativa del equipo y dejando de lado la dolorosa derrota ante el Barcelona en el clásico español, los internacionales merengues pudieron tomar aire para hacer frente a la recta final de la campaña.

Brillaron los suplentes habituales, Fabio Coentrao, Raphael Varane, Keylor Navas y Chicharito Hernández. Y también se desahogaron.

Coentrao, que marcó un gol con Portugal en el encuentro ante Serbia jugando en el centro del campo, quien manifestó su deseo de que Ancelotti "confiara más en mí, algo que no ha pasado hasta ahora".

También goleador con su selección, Chicharito admitió en una entrevista haber "llorado" de "frustración" al no contar para el técnico italiano.

Gareth Bale, discutido por la afición, lideró a Gales a una victoria ante Israel, se destapó con un doblete y jugó con una libertad que no tiene en el Real Madrid.

Iker, repudiado por la grada, fue ovacionado en Sevilla como capitán de España. El temido 'virus FIFA' fue inusualmente respetuoso con el conjunto merengue, que en las últimas ocasiones había sufrido sendos contratiempos con las lesiones de Sami Khedira y Luka Modric.

Salvo el costarricense Keylor Navas y el mexicano Javier Hernández, quienes se reportarán el jueves, los internacionales que acudieron a los llamados de sus respectivas selecciones nacionales se reportaron este miércoles en Valdevebas para integrarse al equipo en la tercera sesión de la semana.

A la vuelta al trabajo de los internacionales solo faltaron Pepe, diagnosticado con una lesión muscular que lo mantendrá apartado entre 10 y 15 días, y Dani Carvajal, quien se ejercitó en el gimnasio, según reportara el club.

El resto trabajaron con total normalidad, incluido James Rodríguez, quien desde la semana pasada trabaja con el balón y está cerca de volver.

Además, Gareth Bale, quien se mantuvo al margen del grupo por una sobrecarga muscular desde su vuelta a Madrid el pasado lunes, completó la sesión sin mayor problema.

El regreso, sin embargo, devuelve a los hombres de Ancelotti a la realidad. Los suplentes volverán a un segundo plano mientras en Madrid manda Cristiano Ronaldo, quien en este momento constituye una de las máximas preocupaciones para el madridismo.

El portugués no ha podido retomar el ritmo avasallador con que cerró 2014 y ni siquiera su participación con la selección de Portugal trajo tranquilidad, pues a diferencia de sus compañeros, tuvo una actuación discreta en el encuentro ante Serbia y no pudo marcar.

El mal momento de juego del portugués recuerda el desastroso arranque de 2015 en que el Real Madrid perdió el liderato en la tabla.

La pausa, no obstante, dio fuerzas al equipo que, desde esta semana tendrá que sumar de tres en tres y esperar a que Barcelona cometa un error para volver a la pelea por el título de Liga. A ello se suma la presión por la venidera eliminatoria de cuartos de final en la Champions League ante el Atlético de Madrid, equipo al que se han enfrentado en seis ocasiones esta campaña sin poder sacar una sola victoria.

Algo que, en gran medida, ha dado al traste a los objetivos del Real Madrid desde el principio de la campaña.