MADRID -- Javier Hernández, delantero mexicano del Real Madrid, aseguró que luego de la poca actividad con el cuadro madrilista esta temporada, sintió una emoción especial por lograr la anotación que le dio la victoria a los merengues sobre el Atlético de Madrid.
"El futbol es así de bonito. A veces te quita, a veces te da y hay que disfrutarlo. Yo lo estoy disfrutando como nunca porque lo que más amo es estar en éste rectángulo verde y este glorioso estadio y qué mejor oportunidad que hacerlo con el mejor equipo del mundo y que estoy respondiendo poco a poco", señaló Javier Hernández en la zona mixta del Santiago Bernabéu.
Al minuto 88 del encuentro entre el Real Madrid y el Atlético, el estadio Santiago Bernabéu retumbó. "¡Chicharito, Chicharito!", coreó la afición. Javier Hernández acababa de meter al conjunto merengue a semifinales de la Champions League al marcar el único tanto en la vuelta de los cuartos de final. Además, lo había hecho en un derbi. El octavo que se disputaba en la presente campaña; el primero en que los hombres de Carlo Ancelotti consiguen una victoria luego de tres empates y cuatro derrotas. Y, al final del día, el único que importaba.
"Emoción por lo que significa este gol, todo lo que he vivido este año, la paciencia y el trabajo que he tenido que hacer para estar listo cuando las oportunidades llegaran. Gracias a Dios llegaron, estuve listo y bueno... feliz por haber contribuido y no sólo con goles y asistencias, sino por todo el esfuerzo tratando de ayudar a mis compañeros. Feliz, emocionado. Agradecido con toda esa gente que vino a apoyarnos", agregó el ariete mexicano.
No hubo un Cristiano Ronaldo, con todo y los 50 goles que ha marcado en la campaña, que hiciera sombra a Javier Hernández. Era la noche del atacante tapatío, que se consagró como jugador del Real Madrid con su sexto gol en la campaña luego de haber pasado casi todo el año en la banca. Con coraje, casi a marchas forzadas, pues había sufrido un calambre, Hernández luchó hasta conseguir su gol. Sólo entonces pidió su cambio. Ovacionado, de nuevo, abandonó la cancha para deajar su lugar a Jesé.
Acto seguido, el mexicano se derrumbó en la banca, y acurrucado al lado de su gran amigo, el costarricense Keylor Navas, rompió en llanto. Acababa de marcar el gol más importante de su vida. Y más allá, el que reivindica su posición como jugador del Real Madrid, pues hace muy poco tiempo, Javier Hernández era el quinto delantero de cinco; el que pasaba más tiempo en la grada que en la cancha. Hasta este miércoles, el mexicano había disputado apenas 798 minutos con el Real Madrid en los que había marcado cinco tantos. Sólo cinco veces había salido de inicio. Había sido, hasta ahora, el año más difícil del jugador.
"Todo en la vida cuesta y yo siempre lo he dicho, mientras más grandes los sueños, más complicado es lograrlo. También tienes que trabajar al doble, al triple. Todo conlleva trabajo, sacrificio y en especial a mí, mucha paciencia", aseveró el atacante
La prensa internacional esperó durante más de una hora al jugador, que debido al calambre, tuvo que pasar por las manos del fisioterapeuta del club antes de salir del vestidor. Seguía adolorido; empezaba a pesar el cansancio después de la inyección de adrenalina. Pero el Chicharito aguantaba con su mejor sonrisa.
El mexicano, aquel que había sido recibido con cierto recelo y que "ni siquiera pertenece al club" - nadie olvida que está a préstamo por parte del Manchester United - peleó cada balón como si hubiera crecido en Valdebebas. Acaparó los reflectores desde el inicio del juego y terminó como el héroe. A lo Ramos; con un gol a dos minutos del final que acabó con la esperanza rojiblanca.
Esa entrega y compromiso le ha ganado el respeto del resto vestidor. Emocionado, el capitán e Iker Casillas, se dijo feliz porque al fin "el Chicharito tuvo protagonismo", mientras su segundo, Sergio Ramos, le reconoció el esfuerzo y apuntilló que le da especial gusto pues, además, "es un buen amigo".
RECONOCIMIENTO DE ANCELOTTI
Chicharito ha ganado puntos hasta con Carlo Ancelotti, que no lo había tenido cuenta hasta las últimas semanas.
"Tenemos que felicitarle porque ha pasado un año difícil, sin jugar mucho, pero siempre ha entrenado, luchado y sufrido y al final es merecido lo que ha pasado", dijo el técnico en rueda de prensa tras el encuentro.
Hernández agradeció los elogios, al tiempo que reconoció que ha trabajado igual de duro para ganarse ese respeto dentro del vestidor.
"Hay cosas que yo también me quiero ganar. He crecido en una familia de puro futbolista y he respirado futbol desde que nací, por mi padre, por mi verde y ellos me han enseñado mucho de todo, no sólo de lo que es dentro de la cancha, todo lo que puedes adquirir y todos los contras. Es muy bonito que tus compañeros hablen así de ti y lo agradezco porque así soy; yo no lo hago por buscar algo. Trato de ser buena persona porque en la vida, en cualquier profesión, no puedes separar el ser futbolista y después ser un ser humano. Como eres fuera de la cancha vas a ser dentro de ella, va de la mano", comentó el héroe de la noche, quien sin embargo, se rehusó a llevarse toda la gloria, pues fiel a su personalidad, recordó que no sólo él peleó por ese boleto que los coloca en semifinales de la máxima competición europea.
"No nada más fui yo. Esto es un trabajo de conjunto. Tú ves la jugada que hace Cris con James, y un buen pase que me pone Isco. Es de conjunto. No es un jugador el que hace todo. Estamos todos conscientes de que aquí jalamos todos parejo y que buscamos el mejor fin para este club, para el Real Madrid. Queremos ganar las competiciones", sentenció.