GUADALAJARA -- Cuando parecería que el panorama no puede ser más obscuro para Chivas, las alarmas se encendieron en el campamento rojiblanco.
Omar Bravo dio un gran susto al Rebaño, pues en un ejercicio de ataque contra defensa, el mochiteco cayó en el área de la cancha Fausto Prieto, tomándose de inmediato el tobillo derecho y llevando la otra mano su rostro.
El delantero sinaloense intentó quitarse de la trayectoria de un disparo de Carlos Fierro y fue al momento de girar sobre su propio eje, que sintió la torcedura en la articulación.
Acto seguido fue atendido por los servicios médicos de campo y le fue retirado el botín. Cojeando salió hasta un costado de la portería donde continuó con el rictus de dolor.
Después de algunos minutos se colocó nuevamente el zapato y comenzó a trotar despacio, analizando la condición de su tobillo.
Al ver que el dolor era soportable, se reintegró al ejercicio con el resto del equipo aunque en repetidas ocasiones pisó con fuerza para buscar la seguridad necesaria al apoyar.
Para el final del entrenamiento se le observó disparando al arco con normalidad, por lo que todo parece haber quedado en un susto para el veterano.
El atacante de 35 años de edad, se encuentra a un gol de igualar a Salvador Reyes como máximo anotador en Liga para el Rebaño, aunque todavía no logra marcar en este Apertura 2015.
Chivas no puede darse el lujo de perder a un elemento más en este arranque de campeonato, teniendo ya en la enfermería a Marco Fabián, Oswaldo Alanís, Jair Pereira e Isaac Brizuela, siendo éste último quien ya comienza a realizar algunas labores en cancha, pese a que aún no es dado de alta para reaparecer.