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Los Pumas, con un sueño grande

Hourcade habla durante una práctica Puma en Portugal UAR

WARE (Enviado especial)-- Para hacer algo grande, primero, hay que soñarlo. Y hay que trabajar en pos de esa ilusión. Pero lo más importante es proponérselo. Tener ese desafío en todo el camino hacia lograrlo. En el grupo Puma el sueño está. Y los jugadores, lo dicen. No le escapan a ese titular de "queremos ser campeones del mundo".

Ya lo manifestó en más de una oportunidad el capitán Agustín Creevy, y hasta los más chicos se atreven, como Santiago Cordero, Guido Petti y Matías Moroni. Lo tienen como un objetivo y no es algo menor. Porque la vara es altísima y saben lo que hay trabajar, y tienen en la cabeza que la tarea no es para nada sencilla.

Empezar con las similitudes con la Copa del Mundo del 2007 -mejor actuación del seleccionado con el tercer puesto- no viene al caso. Son otros nombres propios y realidades diferentes. Aunque en algo sí se asemejan y es que el grupo está muy fuerte. Y todos lo dicen. Nadie le escapa. Aunque eso traiga aparejado épocas en las que puertas adentro había problemas.

El camino del 2011 al 2015 tuvo sus sobresaltos. Santiago Phelan dejó su cargo de entrenador antes de finalizar su contrato en octubre de 2013 por un clima que no era el mejor entre el staff y jugadores. Y desde el primer día, Daniel Hourcade, su sucesor, buscó aplacar las internas.

Tampoco había sido ideal la antesala del Mundial de Nueva Zelanda, con un trabajo muy duro por aquellos años de reemplazar jugadores de peso como Agustín Pichot, Gonzalo Longo, Ignacio Corleto y tantos otros, y con resultados negativos en gran parte del ciclo de Tati. Sin embargo, en la Copa del Mundo, estuvieron a la altura y cumplieron.

Pero eso ya quedó muy atrás. Este grupo se fortaleció con un escenario increíble como ser parte de la elite en un torneo con los All Blacks, Wallabies, y Boks. Logró hitos importantes como el primer triunfo en el Rugby Championship frente a Australia en 2014, y en Durban, en éste 2015, un golpe histórico a Sudáfrica. También está en la retina esa victoria contundente a Francia en París, hace un año.

Éste equipo, como el de 2007, tiene un sueño. Y sabe qué es lo que hay que hacer dentro y fuera de la cancha para conseguirlo.