<
>

Matt Harvey, la carta de Mets para frenar a Dodgers

NUEVA YORK - Si hay un lanzador preparado para asumir el desafío de lo que será un emocional tercer partido para los Mets de New York en la Serie Divisional de la Liga Nacional ante los Dodgers de Los Ángeles, ese es Matt Harvey.

El abridor de los Mets tiene amplia experiencia en situaciones de fuerte atención mediática, habiendo tenido que afrontar una buena dosis de controversia dentro y fuera el campo de juego desde su promoción a Grandes Ligas.

Eso incluye la manera en que Harvey manejó su rehabilitación de cirugía Tommy John, la debacle de su límite de entradas, y su ‎más reciente polémica, el no haberse presentado a las prácticas del equipo previo a la partida a Los Ángeles por supuestos problemas de tráfico.

Ahora recaerá en los hombros de Harvey no sólo acallar a los críticos superando pitcheo por pitcheo al abridor angelino Brett Anderson, sino también ajustar cuentas con los Dodgers tras el controversial deslizamiento de Chase Utley que cobró como víctima el peroné del panameño Rubén Tejada.

"Necesitamos que Matt Harvey dé la cara por este equipo y lance el tipo de juego que sabemos es capaz de lanzar", dijo el dirigente Terry Collins el domingo. "Cuando tomamos la decisión que lanzara [el tercer partido], algo que decidimos hace mucho tiempo, nos pareció que sería un juego crucial en esta serie, y resultó serlo".

Harvey, quien al igual que Collins abordó a los medios previo al anuncio oficial de Major League Baseball de la suspensión de Utley por dos partidos por lo que fue luego determinado como un "deslizamiento ilegal" contra Tejada, afirmó que las acciones del equipo hablarían por sí solas.

"Tenemos que salir y hablar mediante nuestro desempeño en el campo de juego y hacer todo lo posible por ganarles", dijo Harvey durante la rueda de prensa en Citi Field.

"Lo más importante es salir y hacer mi trabajo y lo que es mejor para el equipo. Para mí, eso es salir y lanzar un juego largo y mantenerme en la lomita la mayor cantidad de tiempo posible, manteniendo ceros en el marcador. Ese es mi trabajo, y lo más importante siempre va a ser hacer mi trabajo".

Pero la realidad es que la ardua tarea de Harvey no será sólo tratar de limitar la ofensiva de los Dodgers, sino dar la cara por un equipo sumido en frustración por lo que consideraron una "tacleada" innecesaria de Utley contra Tejada.

"El historial de [Utley] como pelotero es que ya ha pasado por esta situación antes", sentenció Harvey. "Después de ver lo que le hizo también [a Tejada] en 2010 y ahora, sabemos que hay algunas situaciones que tienen que ser abordadas. La liga hará todo lo posible por hacerse cargo".

"En la repetición de la jugada, todo el mundo vio que, más que nada, fue una tacleada", continuó. "Todos sentimos una gran empatía por lo que está pasando Rubén. Ahora vamos a dar la cara por él, y estamos muy contentos de estar de vuelta en casa".

Major League Baseball sin duda se hizo cargo de la situación, sancionando a Utley con una inédita suspensión de dos partidos por sus acciones, aunque el veterano segunda base decidió apelar y podría estar de vuelta en el terreno de juego de no agilizarse el proceso.

Se anticipa que el caso será evaluado por un asistente especial del comisionado de Grandes Ligas previo al partido de la noche del lunes entre Mets y Dodgers, donde Utley sería representado legalmente por el sindicato de peloteros.

Y mientras las palabras del dirigente Terry Collins en torno al deslizamiento de Utley han sido incendiarias, un ecuánime Harvey reiteró que su enfoque está sólo en tener un buen desempeño para su primer partido de postemporada y el primero en casa para los Mets desde 2006.

"Independientemente de lo que ha pasado, hay que disputar un partido de postemporada", dijo el abridor. "Mi trabajo consiste en salir y poner ceros y lo que ocurrió [con Utley] quedará en el pasado y es algo que manejaremos internamente. Lanzar un buen juego es todo lo que está en mi mente, y creo que eso es todo lo que está en la mente de nuestro equipo".

"Es claro que estamos muy emocionados, y eso no es algo que tenemos que rehuir o escondernos de ello", agregó Harvey. "Lo importante será canalizar esas emociones en energía positiva y todos tenemos que hacer nuestro mejor trabajo".