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HispanoameriCalcio

ROMA -- Como quedó dicho en el comentario de la jornada número 30 de la "Cátedra de la Táctica", el aporte de los hispanoamericanos del Calcio fue bárbaro, con nada menos que 13 goles y 5 figuras de la cancha. Los goleadores fueron Abel Hernández, Eric Lamela, Diego Milito (triplete, con uno de penal), Pablo Osvaldo, Rodrigo Palacio, Mauricio Pinilla, Walter Samuél, Lionel Scaloni, Nicolás Spolli, Arturo Vidal y Mauro Zárate.

Respecto a los mejores de la cancha, los goleadores Milito, Osvaldo, Pinilla y Vidal se merecieron esa mención, así como también se la ganó Juan Pablo Carrizo en el enfrentamiento entre Catania y Milan.

Entre los 59 latinos hispanohablantes que pisaron el césped en esta fecha 54 de los cuales evaluados, logramos armar un buen equipo de la semana, parado 3-4-3 con Carrizo (8) al arco - Paletta (7.5), Spolli (7) y Samuél (7) en la retaguardia - Cáceres (7), Vidal (8.5), Gago (8) y Valdés (7) en la línea de los volantes - y Osvaldo (8.5), Milito (9) y Pinilla (8) en el tridente ofensivo.

Matías Aguirregaray - 1989 - (Uruguay - Palermo): 5.5
Sufrió mucho por todo el primer tiempo. Aguantó como pudo, pero no fue suficiente y, en efecto, su entrenador lo dejó en los vestuarios en el entretiempo.

Emiliano Alfaro - 1988 - (Uruguay - Lazio): 5
Ingresó al minuto 62: produjo mucho humo, pero al final quedó poco asado. Cuanto más corría menos cosas útiles hacía para el equipo. No aportó nada de positivo a la delantera albiceleste.

Sergio Almirón - 1980 - (Argentina - Catania): 7
Director perfecto de la maniobra, dictó los tiempos de juego de cada fase de la maniobra azulgrana. Su único defecto fue el de jugar muy bien el primer tiempo y menos la última media hora, durante la cual se apagó paulatinamente. Pero fue fundamental en el cuarto de hora de la segunda etapa, cuando Catania hizo el gasto y argumentó el empate.

Pablo Armero - 1986 - (Colombia - Udinese): 6.5
Algo impreciso, pero fue sin dudas el mejor de su equipo, después de Handanovic. En efecto, las mejores ocasiones nacieron de sus jugadas.

Edgar Barreto - 1984 - (Paraguay - Palermo): 7
Condimentó un partido de sustancia y gran aporte táctico con un cierre prácticamente milagroso, cuando con una gran barrida le sacó desde el medio de las piernas el balón a Di Vaio, en la chance que podía valerle el 2 a 0 a Bologna. En suma, mantuvo vivo a su equipo y así permitió la remontada.

Pablo Barrientos - 1985 - (Argentina - Catania): 7
Fue realmente iluminador en el primer tiempo, inspirando las mejores jugadas de su equipo y dibujando un par de pases de gol geniales. Por largos ratos se lo vio poco, pero sólo debido a la dura labor táctica que Montella le pidió de cumplir. Ese trabajo lo cansó bastante y al minuto 71 su técnico lo cambió.

Fernando Belluschi - 1983 - (Argentina - Genoa): 6
La expulsión al 84º minuto fue realmente injusta. La falta fue (si bien no clarísima), pero no era ni violenta ni en clara ocasión de gol, por lo que al máximo merecía la amarilla. Por el resto, uno de los pocos que luchó con seriedad y que se sacrificó por la causa, jugando siemrpe fuera de posición.

Gonzalo Bergessio - 1984 - (Argentina - Catania): 6.5
Luchó y corrió por 90 minutos y fue muy útil para el equipo, si bien desperdició algunas de las mejores chances de gol de su equipo. No es un delantero muy efectivo, pero sin dudas es muy eficaz.

Martín Cáceres - 1987 - (Uruguay - Juventus): 7
Ingresado al minuto 66, le dio un cambio de paso importante al equipo, especialmente sobre el plano de la calidad. Lo puso en serias dificultades a Dossena con sus grandes capacidades.

Esteban Cambiasso - 1980 - (Argentina - Inter): 6.5
Se lo vio con mayores ganas respecto a los últimos partidos y, en efecto, corrió bastante y rechazó del área dos balones peligrosos. Se mostró también adelante y creó un peligro con un buen corte en el área, pero un mal cabezazo.

Hugo Campagnaro - 1980 - (Argentina - Nápoli): 6.5
Jugó un gran partido y si bien fue él el jugador que Vidal gambeteó en ocasión del 2 a 0, hay que considerar que en la ocasión fue todo mérito del chileno y realmente poco demérito del argentino. Por el resto, fue el más sólido en defensa y por encima aportó muchísimo en ataque, protagonizando las pocas jugadas de peligro de los celestes en el complemento.

Carlos Carmona - 1987 - (Chile - Atalanta): 6
Fue suya la falta al límite que determinó el tiro libre del 1 a 0 rival. Pero si alguien tiene verdadera culpa en esa ocasión, ese es el arquero, porque el tiro libre no fue pateado tan bien. Al inicio del complemento lo exigió a Avramov con un derechazo que merecía inflar la red.

Juan Carrizo - 1984 - (Argentina - Catania): 8
Con una tapada milagrosa sobre Emanuelson y otra sobre Ibrahimovic en el primer tiempo, más otra increíble sobre Mexés en el complemento, salvó a su equipo y determinó el resultado del partido. Eso significa, simplemente, ser el mejor del partido.

Edinson Cavani - 1987 - (Uruguay - Nápoli): 5
El único remate del partido del uruguayo llegó cerca del final, cuando le pegó muy desviado desde unos 25 metros. Se movió mucho, pero se lo vio poco. Realmente un mal partido, como para casi todo el resto del equipo.

Rinaldo Cruzado - 1984 - (Perú - Chievo): 6.5
Tuvo el demérito de fallar una buena ocasión de gol, pero por el el resto disputó un buen partido y la calidad que aportó fue fundamental en el triunfo de su equipo.

Juan Cuadrado - 1988 - (Colombia - Lecce): 5.5
No jugó mal, pero falló dos buenas chances de gol y eso, en un enfrentamiento fundamental para salvarse, pesa mucho.

Diego Forlán - 1979 - (Uruguay - Inter): 7
Para él la llegada de Stamaccioni no cambió tanto, puesto que por 75 minutos (cuando salió) tuvo que jugar abierto por izquierda, siempre muy largo. De todas maneras, su actitud fue más que positiva y, en efecto, metió el gran centro del 1 a 0.

Fernando Gago - 1986 - (Argentina - Roma): 7
Sin De Rossi y Pjanic a sus costados, supo mantener las riendas del equipo. No fue tan complicado, ante un Novara mediocre, pero él estuvo realmente muy bien en las dos fases de juego, gracias a su gran sentido de la posición parado como "cinco".

Santiago García - 1988 - (Argentina - Novara): 5
Tiene en la conciencia el gol del 2 a 1: lo marcó horrible a Osvaldo y lo dejó cabecear con extrema facilidad. Por el resto, esta vez jugó bastante mal.

Walter Gárgano - 1984 - (Uruguay - Nápoli): 6.5
Entre los mejores de se equipo, a pesar del partidazo jugado por la línea de volantes rival, luchó con coraje y salió de la cancha con la cabeza alta. Fue el jugador de Nápoli que más balones recuperó, después de Campagnaro, y el que menos pelotas perdió.

Guillermo Giacomazzi - 1977 - (Uruguay - Lecce): 6.5
Grande inteligencia en la dirección, administró el juego de su equipo con buen sentido táctico, puesto que no estaba al top físicamente.

Henry Giménez - 1986 - (Uruguay - Bologna): s.v.
Poco más de diez minutos al final. No se lo pudo evaluar.

Alejandro Gómez - 1988 - (Argentina - Catania): 6.5
No tuvo un partido muy continuo, pero sus llamaradas fueron realmente positivas: astilló el travesaño, metió el gol anulado y se juntó bien con Barrientos en un par de ocasiones. Útil también para marcar al marcador de punta derecho rossonero, hasta que salió al minuto 85.

Álvaro González - 1984 - (Uruguay - Lazio): 6.5
Sin dudas el mejor de su equipo, fue el único que creyó que el partido se podía ganar hasta el último segundo. Corrió, quitó y se mostró por todos lados, luciéndose también de vez en cuando en fase de construcción.

Carlos Guarín - 1986 - (Colombia - Inter): 6.5
Jugó la última media ora del encuentro, más descuento. Entró muy bien en el partido y tuvo un gran impacto en su equipo, protagonizando también la jugada del penal nerazzurro, que él mismo se ganó. Buen debut en el campeonato italiano.

Abel Hernández - 1990 - (Uruguay - Palermo): 7
No hizo muchísimo, pero dio su aporte a la remontada también con el importante gol del 2 a 1: definición fría y eficaz en la ocasión.

Víctor Ibarbo - 1990 - (Colombia - Cagliari): 6
Poco más de un cuarto de hora al final. Jugó poco porque no está muy bien físicamente, pero lo suyo lo hizo.

Mariano Izco - 1983 - (Argentina - Catania): 6
Esta vez se lo vio bastante impreciso y, en efecto, cometió muchos errores en fase de construcción. Sin embargo, fue fundamental en la fase defensiva, quitando y corriendo mucho en la zona central de la cancha.

Cristóbal Jorquera - 1988 - (Chile - Genoa): s.v.
Con apenas 8 minutos más descuento jugados, fue imposible evaluarlo.

Carlos Labrín - 1990 - (Chile - Palermo): 5.5
Entre altos y bajos, tuvo el demérito de perder el balón de la jugada que podría cerrar el partido, cuando Barreto salvó el posible 2 a 0.

Erik Lamela - 1992 - (Argentina - Roma): 6.5
Jugó una media hora y sin lucirse demasiado metió el gran gol del 5 a 2, con una jugada excelente y una definición perfecta de zurda. Ingreso importante para liquidar el trámite.

Joaquín Larrivey - 1984 - (Argentina - Cagliari): s.v.
Tomó el puesto de Pinilla al minuto 82, jugando demasiado poco como para ser evaluado.

Marcelo Larrondo - 1988 - (Argentina - Siena): 6.5
No supo ser peligroso, pero inventó para sus compañeros, dibujando un par de buenas asistencias. Salió al minuto 79.

Ezequiel Lavezzi - 1985 - (Argentina - Nápoli): 5
El problema mayor fue que jugó demasiado alto, para recibir la mayor parte de los balones sin poder tomar velocidad, lo que es lo que lo rinde especial. Así, se lo vio muy poco. Tuvo decididamente una mala noche en Turín.

Cristian Ledesma - 1982 - (Argentina - Lazio): 5.5
No jugó tan mal y, desde el punto de vista de la performance, si bien no brilló, merecía cuanto menos la suficiencia. Pero pesa el error de no haber subido tras el despeje de la defensa, en jugada de tiro de esquina, quedándose así atrás y habilitándolo a Floccari en ocasión del 2 a 0.

Ezequiel Llama - 1986 - (Argentina - Catania): 6
Ingresó al 71º y dio su buen aporte en fase defensiva.

Gastón Maxi López - 1984 - (Argentina - Milan): s.v.
Apenas cinco minutos más descuento. No se lo pudo evaluar.

Diego Milito - 1979 - (Argentina - Inter): 9
El argentino la rompió ante su ex equipo, Genoa: gran cabezazo para el 1 a 0, definición fría, en puro estilo "nueve", para el segundo gol y penal perfecto para cerrar definitivamente el trámite. Con su triplete marcó diferencia y fue, por lejos, el hombre del partido.

Maximiliano Moralez - 1987 - (Argentina - Atalanta): 6.5
Fue el mejor de los suyos y si sus compañeros en ataque lo hubiesen ayudado más, seguramente Atalanta podía crearle algún peligro serio a la defensa sarda.

Ezequiel Muñoz - 1990 - (Argentina - Palermo): 6
Hizo lo suyo, jugando tanto en la línea defensiva cuanto en la de los volantes. Ordenado y solvente, no cometió errores.

Luis Muriel - 1991 - (Colombia - Lecce): 5.5
Esta vez no brilló y se lo vio algo liviano, tanto que lo evaluamos apenas insuficiente a pesar de haber creado una de las mejores ocasiones de gol, sirviéndole un balón de oro a Bertolacci. Salió al minuto 63.

Pablo Osvaldo - 1986 - (Argentina - Roma): 8.5
El italo-argentino marcó diferencia: se movió muy bien, aportó grande calidad, metió el centro del gol del empate y anotó con un cabezazo el 2 a 1. Un tanto de delantero de raza pura. El mejor del partido por lejos.

Rodrigo Palacio - 1982 - (Argentina - Genoa): 6.5
Casi invisible por todo el primer tiempo, se despertó en el complemento transformando el penal del 2 a 3 y ganándose el penal del 3 a 4 (¿por qué no habrá pateado también los otros dos penales?). Uno de los pocos que se salvó en el equipo.

Gabriel Paletta - 1986 - (Argentina - Parma): 7.5
Lazio no hizo mucho ahí adelante, pero no fue todo demérito de los albicelestes sino que hubo mucho mérito también del defensor argentino, que se demostró sólido y solvente por todos los 90 minutos. De un remate mordido suyo, además, nació el 2 a 0.

Roberto Pereyra - 1991 - (Argentina - Udinese): 6
Performance normal. Hizo lo suyo sin infamia y sin gloria. Guidolín lo sacó faltando un cuarto de hora.

Mauricio Pinilla - 1984 - (Chile - Cagliari): 8
Él solo mantuvo todo el peso del ataque, rozó un golazo en el primer tiempo cuando se llevó a pasear toda la defensa rival y luego sacudió en el palo un derechazo desde 25 metros y, en el complemento, liquidó el trámite con el fácil 2 a 0 (pero había que estar ahí). Sin duda alguna el mejor de la cancha.

Gastón Ramírez - 1990 - (Uruguay - Bologna): 7
Sin dudas el mejor de los suyos, cumplió un gran trabajo por toda la cancha, le regaló el balón a Di Vaio que podía valer el 2 a 0 (y que hubiese cerrado el desafío) y partió el palo en el intento de anotar el 2 a 3.

Walter Samuél - 1978 - (Argentina - Inter): 7
Metió el gol del 3 a 0 de rapiña, con un buen impacto de rastrón. En defensa también estuvo muy eficaz y, en efecto, tuvo que cubrir también todos los yerros de Lucio, que no fueron pocos. También él equivocó algo, pero no es fácil jugar en una línea tan "bailarina".

Mario Santana - 1981 - (Argentina - Cesena): 6
No brilló per tampoco desmereció. Se movió bien entre líneas y algo supo inventar, entre la poquedad del juego de su equipo.

Lionel Scaloni - 1978 - (Argentina - Lazio): 6.5
Tomó el puesto de Días al minuto 17. Fue uno de los pocos que logró mostrar un mínimo de solidez en defensa y, por encima, metió el gol del momentáneo 1 a 2.

Ezequiel Schelotto - 1989 - (Argentina - Atalanta): 6
En un partido ordenado, no supo marcar diferencia pero le puso una asistencia perfecta a Tiribocchi, en una jugada que podía cambiar la historia del partido.

Felipe Seymour - 1987 - (Chile - Catania): s.v.
Ingresado al 90º, fue imposible evaluarlo.

Nicolás Spolli - 1983 - (Argentina - Catania): 7
No fue fácil en defensa contra Robinho y, sobre todo, contra Ibrahimovic. Pero se demostró bastante sólido y tuvo el mérito, muy importante, de anotar el 1 a 1 en el desarrollo de un tiro de esquina.

Jaime Valdés - 1981 - (Chile - Parma): 7
Donadoni lo está "inventando" en posición de "cinco" y él, desde ahí, supo como ser realmente útil para el equipo. Movió el balón con calidad e inteligencia pero supo poner también también cantidad y dureza cuando hacía falta.

Juan Vargas - 1983 - (Perú - Fiorentina): 6
Luchó con coraje, pero con poca lucidez. Injusto darle una insuficiencia, pero imposible darle más que un seis.

Arturo Vidal - 1987 - (Chile - Juventus): 8.5
El chileno disputó un partidazo y, simplemente, la rompió. El golazo del 2 a 0, que cerró definitivamente el partido, fue la cereza sobre un pastel delicioso, hecho de quites, corridas, intensidad, ritmo, inteligencia táctica y grande calidad en cada minuto de juego. "King Artur" encarna el gran momento físico por el que pase Juventus. Por lejos la figura del partido.

Javier Zanetti - 1973 - (Argentina - Inter): 6
El Pupi hizo lo suyo, sin brillar particularmente y hasta sufriendo un poco en defensa, pero entregando un gran aporte físico.

Mauro Zárate - 1987 - (Argentina - Inter): 7
Maurito se vio bastante revitalizado por la confianza que le brindó Stramaccioni y, en efecto, entre altos y bajos, fue fundamental en la jugada del gol del 1 a 0. Después, clavó el 4 a 2 con un derechazo con comba precioso. Salió al minuto 80, tras la expulsión de Julio César. Finalmente una buena performance en nerazzurro.

Juan Zúñiga - 1985 - (Colombia - Nápoli): 4.5
La pésima evaluación no es tanto por su performance, puesto que no jugó tan mal, sino que por el codazo vergonzoso que le pegó a Chiellini, un gesto tanto violento cuanto estúpido e inútil, puesto que ahora Nápoli, en el importantísimo desafío contra Lazio, no tendrá un externo derecho (Maggio está lesionado). Inesperadamente, desilusionó.