CINCINNATI -- Hay dos outs, hombres en segunda y tercera en la décima entrada. Joaquin Arías, el campocorto suplente de los Gigantes de San Francisco, batea una débil roleta por la tercera base. El antesalista de los Rojos de Cincinnati es Scott Rolen, quien tiene en su hogar una colección de ocho guantes de oro ganados en su carrera de 17 años en las Mayores. ¿Se acabó la entrada?
El béisbol no siempre es lógico. Rolen mofó la pelota, la recogió e hizo un disparo perfecto a primera. Pero Arias llegó quieto, y Buster Posey anotó la carrera que le dio la victoria 2-1 a los Gigantes en el tercer partido de la serie de división de la Liga Nacional.
La amenaza de los Gigantes comenzó cuando Buster Posey y Hunter Pence dispararon sencillos corridos, el segundo y tercero de la noche para los Gigantes. El relevista Jonathan Broxton ponchó a los siguientes dos bateadores, pero un pasbol del receptor Ryan Hanigan movió a los corredores a segunda y tercera, preparando la escena para el batazo decisivo de Arias, quien entró como emergente en la octava entrada y se quedó jugando en el jardín corto.
La victoria de los Gigantes opacó un gran esfuerzo monticular de Homer Bailey, quien permitió el primer hit de los visitantes, un sencillo al derecho de Marco Scutaro, con dos outs en el sexto. Lanzó siete entradas completas, caminó a uno y empató su marca personal con diez ponches, seis de ellos corridos entre los últimos dos outs de la cuarta entrada y el primero de la sexta.
El exceso de agresividad de Brandon Phillips le costó a los Rojos una carrera en la primera entrada. Phillips abrió con sencillo y se robó la segunda base, pero luego de que el receptor perdiera la bola quiso avanzar hacia tercera y fue puesto fuera.
Pero la ofensiva no se detuvo con el tropiezo. Zack Cozart recibió base por bolas, avanzó a segunda con sencillo de Ryan Ludwick y anotó con otro imparable de Jay Bruce.
Los Gigantes rompieron una seguía de 12 entradas sin anotar y lo hicieron sin batear de hit. Bailey le pegara pelotazo a Grigor Blanco y caminó a Brandon Crawford. Ryan Voglensong movió a los corredores a segunda y tercera con toque de sacrificio y Blanco anotó con bombo de sacrificio de Ángel Pagán. Esta fue la primera ocasión en que San Francisco está al menos empate en el marcador en lo que va de serie.
Fue una victoria muy típica de San Francisco, amparada en buen pitcheo abridor, un relevo efectivo y la fabricación de carreras con el juego pequeño. Ryan Vogelsong mantuvo en pelea a San Francisco con una sólida actuación de cinco entradas, en las que cedió tres hits, una carrera y ponchó a cinco. El bullpen apenas permitió un hit el resto del camino.
Sergio Romo, quien lanzó dos entradas perfecta, se apuntó la victoria, mientras que Jonathan Broxton fue el derrotado.