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Tope salarial determinó movimientos de temporada baja en Oakland

Jugadores de la edad de Antonio Smith no suelen recibir mucha atención en la agencia libre. AP

ALAMEDA -- Los Oakland Raiders entraron al mercado de la agencia libre del 2014 con una tarea poco envidiable: necesitan gastar como locos para cumplir con lo dispuesto en el contrato colectivo de trabajo.

Dad la presión involucrada --y con palanca perdida en la mesa de negociaciones-- gracias a unos 60 millones de dólares disponibles bajo el tope salarial inicial, no sorprende que los Raiders hayan tomado algunas decisiones debatibles. La más obvia: la secuencia de eventos que permitió al tackle izquierdo Jared Veldheer salir y Rodger Saffold acordar en a un contrato masivo para reemplazarlo, antes de que los Raiders anularan la transacción por preocupaciones sobre el hombro de Saffold.

Para bien o para mal, la mayor parte de las oportunidades para gastar en el mercado han desaparecido. Así que por el momento, vale la pena echar un vistazo de cerca a lo que han logrado los Raiders, además de proyectar hacia dónde necesitan dirigirse. Recuerden que el contrato colectivo de trabajo requiere que cada equipo invierta el 89 por ciento de su dinero disponible bajo el tope salarial entre el 2013 y 2016.

Como se puede observar en la tabla, los Raiders comprometieron 32.05 millones de dólares en efectivo, y casi la misma cantidad en dinero bajo el tope salarial ($31.84 millones), para el 2014 en los primeros siete agentes libres firmados. Los totales no incluyen lo invertido en el reemplazo potencial de Veldheer, Donald Penn, quien acordó términos el martes por la noche.

De acuerdo a ESPN Stats & Information, esos movimientos dejan a los Raiders con un estimado de 30.8 millones de dólares en espacio bajo el tope salarial. Han comprometido unos 88 millones de dólares en efectivo para su plantilla del 2014, lo que de acuerdo a mis cuentas los deja a unos 30 millones de donde necesitan estar para estar en cumplimiento de lo dispuesto por el acuerdo laboral para el 2016.

Lo invertido a Penn contará en contra de ese total en efectivo, y los Raiders pueden guardar algo de eso para su generación de novatos de draft del 2014. Pero tendrán bastante disponible, digamos para un mariscal de campo veterano si deciden perseguir a uno vía canje o agencia libre, más tarde en la primavera

Hubo dos grandes interrogantes a seguir aquí, con los Raiders buscando quién tomaría su dinero: ¿El dinero adicional bajo el tope salarial diluiría el valor de su personal? Y, ¿sus compromisos actuales los dejarían en una posición menos flexible para años futuros?

Uno debe ponerse a pensar si los Raiders se mostraron un poco inquietos a la hora de decidir darle a Saffold --un jugador que los St. Louis Rams prefirieron etiquetar como guardia que como tackle-- un contrato que incluía 21 millones de dólares garantizados. También se puede debatir el posible impacto poco significativo de tres linieros defensivos veteranos para los planes a largo plazo del equipo.

Antonio Smith (32), Justin Tuck (30) y LaMarr Woodley (29) podrían ser todos productivos para en el 2014, pero con toda seguridad sus mejores años quedaron atrás. Cada uno brincó inteligentemente ante el interés de los Raiders y firmaron acuerdos en los primeros días de haberse abierto el mercado, en un momento en que típicamente los jugadores por arriba de los 27 años de edad quedan relegados como observadores.

Pero la buena noticia para los Raiders es que los siete jugadores de los Raiders firmaron acuerdos que "pagan sobre la marcha", sin dinero totalmente garantizado después de la primera temporada. Eso significa que Oakland puede despedirse de cualquiera de ellos sin volver a entregar otro centavo y con una cantidad insignificante de dinero muerto para topes salariales futuros.

No encontrarán a muchas personas que opinen que los Raiders han empleado el enorme espacio bajo el tope salarial para mejorar al equipo. Pero sus líneas, ofensiva y defensiva, tienen nueva apariencia, en el peor de los casos. Además, sus decisiones actuales no han comprometido en lo absoluto sus decisiones futuras.