MIAMI -- Llámenle como quieran: suerte de los campeones, extra de los grandes... Lo cierto es que el Miami Heat mandó a los Brooklyn Nets de vacaciones hasta la próxima temporada, tras conseguir una increíble y hasta cierto punto inexplicable victoria 96-94, para avanzar por cuarto año consecutivo a las Finales de la Conferencia del Este de la NBA.
A 32 segundos del final, un triple salvador, una vez más, del veterano Ray Allen, puso adelante a Miami 93-91 por primera vez desde el segundo parcial, una ventaja que conservarían a duras penas en las jugadas finales.
"Fue raro. Lebron (James) le pasó la pelota a Mario (Chalmers) y pensé que él haría el tiro, pero sus pies no estaban en posición de hacerlo bien y optó por darme la bola al darse cuenta de que yo sí estaba listo para disparar", explicó Allen.
"Ese es el Ray Allen de cada día. Él siempre busca la manera de hacer las cosas hasta el final. Ahí están miles de miles de horas de práctica bajo presión simulada. Ese fue un triple inmenso", celebró Erik Spoelstra, entrenador de los campeones.
Este partido le dio la razón a quienes alegan que en el baloncesto sólo cuenta el último cuarto.
Las estadísticas globales del encuentro favorecieron en casi todos los indicadores a los visitantes, quienes dominaron los tiros desde la pintura, 42 a 28, dispararon para una efectividad del 47 por ciento, mientras el Heat lo hizo para un pobre 43 por ciento, además de conseguir más rebotes, 36 a 33.
Sin embargo, en el último periodo Miami remontó una desventaja que llegó a ser de nueve puntos, gracias a que, finalmente, sus jugadores se aplicaron a la defensa como no lo habían hecho en los primeros 36 minutos.
"Hay que darle todo el crédito al Heat. Ellos atacaron en el último cuarto. Nosotros también atacamos, pero ellos fueron los que hicieron las buenas jugadas. Son cosas que pasan en el básquetbol", dijo Jason Kidd, el debutante coach de Brooklyn.
"Siempre hay un ganador y un perdedor. En nuestro caso, tuvimos una gran oportunidad ante los campeones, pero nos quedamos cortos. De todos modos, fue una gran temporada y llegamos hasta la segunda ronda de los playoffs", añadió.
Joe Johnson encestó 34 unidades en una de esas noches en las que la pelota entraba desde cualquier ángulo y posición del tabloncillo.
Si algo mantuvo a Miami en el juego fue la eficacia en los tiros libres: 29 de 31, que dieron tiempo a que el 'Big 3' (LeBron James, Dwyane Wade y Chris Bosh) comenzaran a carburar.
El trío aportó 73 cartones y ahora el Heat tiene marca de 13-0 en playoffs cada vez que James, Wade y Bosh suman 70 o más puntos.
Miami espera por el ganador de la serie entre los Indiana Pacers y los Washington Wizards.
De ganar los Pacers, que llevan ventaja 3-2 en la serie, las Finales de conferencia comenzarían en Indiana. Cuatro de siete partidos sería allá y los otros en el American Airlines Arena.
En caso de que el rival sea Washington, cuatro choques serían en Miami y tres en la capital de la nación.