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¿Deberían los 49ers enviar a Colin Kaepernick a la banca?

SANTA CLARA, Calif. -- ¿Ha llegado el momento para que los San Francisco 49ers envíen a Colin Kaepernick a la banca?

Esto no es necesariamente para decir que es hora de Blaine Gabbert, pero si para darle un poco de tiempo a Kaepernick para despejar su cabeza, para que deje de sobrepensar las cosas y darle tiempo a su cuerpo para que se recupere de los numerosos golpes que ha recibido en el primer cuarto de la temporada. Para darle tiempo para que regrese a su rol de playmaker atlético que tuvo cuando subió a la escena nacional hace tres años.

"Ni voy a entrar en esa discusión", dijo el entrenador Jim Tomsula tras la derrota de los 49ers por 17-3 contra los Green Bay Packers que puso su récord en 1-3.

"Eso no está en mi mente".

¿Debería estarlo? La pregunta no se hace suavemente ni tampoco implica que Gabbert es la solución. Es más en la línea de que la ofensiva no puede estar peor de lo que ha estado bajo Kaepernick, quien trabajó en sus destrezas de pasador de bolsillo en la temporada muerta bajo Kurt Warner pero, detrás de una inoperante línea ofensiva, no ha tenido tiempo para lanzar el balón.

Y eso solo entra en la ecuación si es que tiene la visión para hacer esos lanzamientos.

Contra los Packers, Kaepernick completó solo tres pases de más de cinco yardas al frente de la línea de golpe, y lanzó un intercepción en un pase a Anquan Boldin que se quedó corto.

Y no es solamente Green Bay que le está dando problemas. En los últimos dos partidos, Kaepernick ha completado seis de 19 pases con cuatro intercepciones en pases de esa índole.

En la temporada, Kaepernick ha completado 72 de 116 pases (62.1 por ciento, que va por encima de su marca de carrera de 60.1 entrando a la temporada) para 727 yardas con dos touchdowns y cinco intercepciones. También ha sido capturado 14 veces, seis de ellas cortesía de los Packers.

Proyectando eso a lo largo de 16 partidos, eso le daría a Kaepernick 2,908 yardas por aire (que sería la cantidad más baja de su carrera como titular a tiempo completo), ocho touchdowns (también la cifra más baja de su carrera), 20 intercepciones (el doble de su total de 10 el año pasado) con 56 capturas (fue capturado 52 veces el año pasado) para un equipo que terminaría con marca de 4-12. ¿Y cuál es el punto?

La ofensiva está estancada en neutro, intentando subir una montaña y en peligro de ir marcha atrás, si ya no lo ha hecho.

De hecho, Kaepernick admitió que estaba siendo cuidadoso ante los Packers tras el debacle de la semana pasada en Arizona, en donde lanzó cuatro intercepciones, incluyendo dos que fueron devueltas para touchdown.

"No voy a lanzar un pase dentro de una cobertura", dijo Kaepernick. "Yo voy a proteger los lanzamientos para que, como ofensiva, podamos proteger el balón".

¿Y entonces que hay con las "roletas" que lanzó, pases tan lejos y bajos de sus blancos que lucía como que le estaba tirando a ardillas en el cesped del Levi's Stadium? ¿Y el pase profundo que lanzó a Arik Armstead, que, desgraciadamente para los 49ers, es un liniero defensivo que estaba parado cerca de la banca?

Si, Kaepernick no está tocando sus blancos, un tema recurrente en esta temporada, aún si su porcentaje de pases completados ha subido. Luce incómodo, hasta fuera de sus casillas.

"Yo diría que el pase que quisiera tener de vuelta fue el que hice a Reggie [Bush] en la zona de anotar", dijo Kaepernick sobre un lanzamiento hundido del cual el lanzador de los San Francisco Giants, Tim Hudson, hubiera estado orgulloso.

"El hizo una gran movida, pero yo no hice el tiro. Pero los otros, de nuevo, no voy a lanzar el balón en donde hay tráfico y arriesgar poner a esta ofensiva y este equipo en una mala situación", dijo.

Demasiado tarde.

Tras ser cuidadaoso, y nos arriesgamos a decir un gerente de partido, en la victoria por 20-3 en el partido inaugural contra los Minnesota Vikings, Kaepernick sacó sus destrezas de pasador contra Pittsburgh, claro, cuando el marcador ya estaba 29-3 a favor de los Steelers.

Y luego vino la deblacle en Arizona.

"Estudiar lo más que puedo, trabajar lo más que puedo", dijo Kaepernick. "Esa es la única manera que conozco para arreglar las cosas, seguir trabajando. Hablando sobre las cosas, analizando las cosas, todo lo que está bien tiene su lugar, pero al final del día, uno tiene que trabajar en equipo para mejorar".

Pero quizás ha llegado el momento de hacer esas cosas como un observador, por lo menos por ahora o hacer la pregunta: ¿Se ha ganado el respeto para tener la oportunidad de trabajar como titular para arregalr sus problemas?