BOSTON (AP) -- Algo muy particular sucedió luego de una reunión de ejecutivos de negocios estadounidenses con el presidente ruso, Vladimir Putin, en la que se encontraban, entre otros, el dueño de los New England Patriots, Robert Kraft, y el presidente de News Corp., Rupert Murdoch.
La reunión tuvo lugar en el Palacio Konstantinovsky, cerca de San Petersburgo, y al finalizar, Kraft le mostró a Putin el anillo del último Super Bowl. El presidente ruso se lo probó, lo puso en su bolsillo y se marchó, de acuerdo con la prensa rusa presente en el evento.
¿Fue un generoso regalo, o un costoso malentendido internacional?
No queda claro si Kraft tenía verdaderamente la intención de que Putin se quedara con el anillo, pero el empresario norteamericano, que tiene intereses en empresas de papel y empacadoras, así como inversiones de capital, emitió luego una declaración para evitar dejar al primer mandatario ruso en una posición incómoda.
"Al ver el anillo, el presidente Putin, conocido fanático de los deportes, quedó fascinado por su singularidad," dijo Kraft en la declaración. "En ese momento decidí darle el anillo, como símbolo del respeto y la admiracióin que tengo por el pueblo ruso y el liderazgo del presidente Putin."
Por su parte, Putin entregó el anillo a la biblioteca del Kremlin, donde se conservan los regalos extranjeros.
El vocero de los Patriots, Stacey James, dijo que el anillo vale "bastante más" de 15,000 dólares, que es el valor que ha sido reportado. Se rehusó a especificar, pero señaló que el anillo posee 124 diamantes incrustados.
Kraft había entregado ese anillo a jugadores y entrenadores de los Pats hace dos semanas, luego de que su equipo ganara el tercero de los últimos cuatro Super Bowls.