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Favoritos al ataque

HAMBURGO -- Avanzaron los tres mejores del mundo y sólo uno de los tres latinoamericanos pudo dar otro paso en firme. El suizo Roger Federer, el Nº 1 del mundo, el español Rafael Nadal (2º) y el serbio Novak Djokovic (3º) ganaron en sus debuts en el Masters Series de Hamburgo, en canchas de arcilla, dotado con 2.270.000 euros en premios oficiales.

En tanto, sólo Juan Mónaco pudo meterse en los octavos de final ya que perdieron los también argentinos José Acasuso y Juan Ignacio Chela, éste último derrotado por Djokovic.

El rey Federer inició con autoridad la defensa del título en Alemania, tras superar en la segunda ronda al finlandés Jarkko Nieminen por 6-1 y 6-3, en 57 minutos. Campeón en cuatro ocasiones de este campeonato, lució cómodo desde el principio, en un día soleado.

El helvético se enfrentará en los octavos de final con el sueco Robin Soderling, que se impuso al francés Jo-Wilfried Tsonga (14º favorito) por 6-2 y 7-5. La confrontación, la novena entre ambos jugadores, resultó tan cómoda para Federer como las ocho anteriores entre ellos, que acabaron todas con el triunfo de número uno mundial en sólo dos sets.

El suizo castigó a su rival desde el primer instante de un primer set que resolvió con la gran facilidad (6-1) merced a su 84 % de primeros saques (88 % de ellos cayeron a su favor) y los 28 puntos conquistados (12, su rival).

El segundo set resultó más igualado, si bien Federer estuvo menos fino con su saque. Pero el suizo dio siempre la impresión de saber que en el momento que decidiese forzar su ritmo iba a romper el servicio de su rival. Lo hizo y se anotó el partido, con un 6-3 en el segundo set.

Nadal, finalista el año pasado, derrotó al italiano Potito Satarace por 6-4 y 7-6 (8-6), en 2 horas y 8 minutos. El mallorquín se medirá el jueves al escocés Andy Murray (15º), que con anterioridad había derrotado al francés Gilles Simon, por un doble 6-3.

El partido entre Nadal y Starace resultó duro y distinto del disputado hace apenas dos semanas entre ambos en el Conde de Godó, en Barcelona, resuelto con relativa facilidad en favor del español (6-4 y 6-2). Y es que el manacorí no exhibió su mejor tenis y evidenció no estar en el mejor momento de su carrera.

Quizás las últimas polémicas entre los jugadores españoles y el presidente de la Federación, Pedro Muñoz, así como la temprana eliminación la pasada semana en la segunda ronda del Masters Series de Roma, están pasando más factura a Nadal que sus problemas de ampollas en un pie.

Nadal no estuvo "fino", es más apareció algo descentrado e, incluso, en el segundo juego del segundo set se equivocó de lado a la hora de sacar. Su rival, además, subió su nivel habitual, pero tampoco es que realizase un gran partido (40 errores no forzados).

A última hora, Djokovic, campeón este año del Abierto de Australia, aplastó al Flaco Chela por 6-3 y 6-1 y así dejó afuera a otra de las esperanzas sudamericanas.

El jugador balcánico, vencedor la semana pasada en el Masters Series de Roma, nunca fue inquietado por el sudamericano, que jugó condicionado por su falta de acierto con el servicio. Djokovic se enfrentará el jueves con el gran sacador croata Ivo Karlovic, verdugo del español Tommy Robredo por 3-6, 6-2 y 7-6 (7-3).

En tanto, Pico Mónaco, el Nº 15 de la clasificación mundial y 12º cabeza de serie, pasó sin problemas su compromiso de la segunda ronda de Hamburgo, tras vencer al italiano Simone Bolelli por 6-2 y 6-1.

El tandilense, que en el primer turno había superado al también italiano Filippo Volandri (6-1, 4-0 y retiro), debió emplear una hora y seis minutos para derrotar a un rival con escasa experiencia en el circuito mayor. Salvó los cinco puntos de quiebre que enfrentó y dejó su marca en 19-9 esta temporada.

Este fue el primer enfrentamiento entre Mónaco y Bolelli, en el que el argentino hizo la diferencia al aprovechar cuatro de las once oportunidades de quiebre que dispuso, contra las cinco desperdiciadas por el nacido en Bolonia.

En octavos de final, Mónaco tendrá otro italiano en su camino: Andreas Seppi, que eliminó en segunda ronda al francés Richard Gasquet, octavo clasificado del torneo y de mayor roce.

Por su parte, el español Albert Montañés superó a Acasuso por 7-6 (7-3) y 6-3 y se clasificó para los octavos de final, en los que se enfrentará al serbio Janko Tipsarevic, verdugo del estadounidense James Blake (7º preclasificado) por 4-6, 6-3 y 6-3.

De esta manera el catalán venció a Acasuso por primera vez en cinco enfrentamientos como profesional, sumados a otras dos oportunidades con victoria para el argentino en challenger.

El español, que había demostrado una gran forma en la primera ronda frente al estadounidense Mandy Fish, volvió a tener una gran actuación ante Acasuso, 45 de la clasificación mundial.

En una hora y 34 minutos el español pudo imponerse en un esforzado primer set que se decidió en tie-break gracias a la solidez que demostró Montañés para devolver el servicio del oriundo de Misiones.

En el segundo set, Acasuso flaqueó en su servicio y le dio vía libre a Montañés para ganar el partido y continuar en la búsqueda del segundo título de la temporada, tras imponerse en el challenger de Monza.

MOYÁ GANÓ Y ESPERA A SAFIN
El español Carlos Moyá le ganó al belga Olivier Rochus por 7-5 y 6-3 y se clasificó para los octavos de final del Masters Series de Hamburgo, donde enfrentará al ruso Marat Safin, que batió previamente al checo Tomas Berdych, noveno favorito, por 7-5 y 6-4.

El tenista balear tardó hora y media en solventar el compromiso. Rompió el equilibrio en el undécimo parcial del primer set, en el que nunca perdió el saque, para encarrilar el juego. Su rival decayó después y la clasificación para la tercera ronda careció de contratiempos para Moyá.

El español se medirá a Safin, invitado de la organización y otro ex rey del circuito, que superó a Berdych. Desde hace dos años el balear no coincide con el moscovita, al que ha ganado en tres de los seis partidos que han dirimido. El más reciente fue en el 2006, cuando el ruso venció en el Masters Series de Indian Wells.

Con Moyá y Montañés, son cuatro los españoles en octavos de final. El martes, David Ferrer y Fernando Verdasco lograron el objetivo. Se enfrentarán entre sí, lo que garantiza la presencia de un representante de la "armada" en cuartos.