MADRID -- Finalmente, Rafael Nadal no jugará la final de la Copa Davis. Por la lesión que sufre en la rodilla derecha, el mejor jugador español y del mundo deja a su equipo con una baja muy importante para la visita a Argentina, del 21 al 23 de este mes, en Mar del Plata.
Ya había desistido de participar en la Copa Masters de Shanghai, que reúne a los ocho mejores tenistas del año, y ahora ahora esta ausencia será clave en la definición copera.
Su tío y entrenador, Toni Nadal, ya se había mostrado pesimista unas horas antes de la última y definitoria prueba. El zurdo de Manacor se entrenó un rato para ver cómo respondía y comprobaron que no podrá estar en muy buenas condiciones físicas, por lo que el capitán español, Emilio Sánchez Vicario, define el martes a su reemplazante.
Nadal se sometió a nuevas pruebas médicas en Barcelona, supervisadas por el médico de la Federación Española de Tenis (RFET), Angel Ruiz Cotorro, y después de conocer los resultados, anunció que no estará en condiciones de jugar la final de la Copa Davis ante el equipo argentino.
"Después de un año largo y muy positivo, me sabe muy mal perderme los dos grandes objetivos del año, Shanghai y la final de la Davis. Son momentos difíciles, pero he hecho todo lo posible para intentar llegar a esta final. Era una ilusión enorme, estoy acostumbrado a jugar con dolor, pero este es un dolor distinto, nuevo, que no consigo controlar", aseguró Nadal.
El mallorquín lamentó que no se siente preparado "para enfocar una final como esta" en plenas condiciones y añadió que su lesión, una tendinitis de inserción del tendón cuadricipital en la rodilla derecha, hace que su pierna no le responda bien.
"La rodilla ha dicho no", comunicó Nadal, que pone así punto final a la temporada más exitosa de su carrera deportiva. "No sé si la lesión es por apurar o no en mi lucha por ser número uno porque en realidad, no he hecho ningún torneo extra, sólo he jugado lo que contaba para el ránking y no creo que se me pueda reprochar eso, no he hecho ninguna locura para ser número uno".
Nadal, en cambio, recordó que ha vivido un año muy cargado, "con un calendario difícil por los Juegos Olímpicos", y destacó que "dentro de lo negativo" del cierre del año, debido a su ausencia en Shanghai y Mar del Plata, ha podido cumplir "objetivos importantes".
El doctor Ruiz Cotorro, por su parte, que acompañó a Nadal en la comparecencia ante la prensa, afirmó que durante los próximos diez días seguirá de cerca la evolución de la lesión, pero adelantó que el número uno mundial tardará aproximadamente "entre tres y seis semanas" en recuperarse totalmente.
El médico indicó, además, que sería "totalmente imposible" plantearse que Nadal jugase infiltrado ante Argentina. "Es un músculo tocado y las cosas no tendrían un final feliz". Y recordó que Nadal "ha jugado con dolor en otras ocasiones, pero esta es una lesión nueva para él".
"Rafa lleva una temporada muy dura", añadió, "y su organismo le lleva avisando durante varias semanas. Se trata de una lesión aguda, que necesita un tiempo de recuperación. No es preocupante, pero hay que prestarle atención. Si jugase en Argentina, la lesión iría a más", dijo el médico.
Nadal conoció el alcance de su lesión hace una semana, cuando el doctor Ruiz Cotorro confirmó, tras examinarle, que el tenista de Manacor debía someterse a un tratamiento de antiinflamatorios, fisioterapia y crioterapia (aplicación de frío) local antes de volver a entrenarse en la cancha.
Los entrenamientos de Nadal ya sobre la cancha sirvieron para comprobar que la intensidad del dolor que le provoca la lesión le impedirá jugar la final de la Copa Davis. Hace una semana, Nadal ya había advertido que no competiría en Mar del Plata si no podía hacerlo al ciento por ciento. "Si estoy al 40%, no voy a ir", había afirmado.
Nadal lleva ya una semana sin actividad tenística, aunque realizaba ejercicios para tratar de ponerse bien de la rodilla lesionada, a partir de los sucesivos partidos que jugó en carpeta sintética, rápida y bajo techo.
En una cancha similar se jugará la final de la Davis en Mar del Plata, donde España presentaría a David Ferrer, Fernando Verdasco y Feliciano López, en tanto que se presume que Tommy Robredo ocupa la plaza dejada por Nadal.
En tanto, el conjunto local pondrá en cancha en los singles a Juan Martín del Potro y David Nalbandian, mientras que el capitán, Alberto Mancini, definirá luego la formación del dobles. Agustín Calleri y José Acasuso podrían jugar juntos o bien uno de los dos acompañar a Nalbandian en ese punto, que en general es clave.
Argentina, que perdió las dos finales que jugó, en 1981 y 2006, dispone de una gran ocasión de obtener, en su primera definición como local, la tan soñada y esquiva ensaladera de plata. De imponerse, sería el primer país latinoamericano que obtiene la Copa Davis.
La última palabra de Nadal, por sí o por no, se había demorado hasta última hora, ya que el martes España debe definir el cuarteto que presentará en la visita al conjunto argentino.
La importancia de la presencia de Nadal en el equipo español había llevado a que Argentina, que habitualmente juega sobre polvo de ladrillo sus partidos como local, se mudara a una superficie rápida en Mar del Plata para atenuar el poderío del astro, quien ahora desertó de jugar esa final.