A continuación les presento mi evaluación de los agentes libres más destacados en mi opinión. Puedes ver en estos 10 que la lista de este año incluye a nombres más impresionantes que aquellos vistos en años recientes.
Teixeira es el mejor agente libre durante este receso por varias razones. Usualmente, el mejor agente libre excluyendo a los lanzadores, es un jugador de posición con altas destrezas, pero este mercado está escaso en esas posiciones -- segunda base, campocorto, receptor, jardinero central y tercera base. De los bates de esquina disponibles en el mercado, Teixeira ofrece la mejor combinación de producción ofensiva, valor defensivo y juventud.
Teixeira todavía está en sus años mozos como bateador; jugará la toda temporada de 2009 con 29 años, así que un contrato de 6 años lo mantendría atado hasta la edad de 34 años, cuando podría firmar otro contrato de mucho dinero, probablemente por cuatro años más. En el plato, Teixeira es un ambidiestro natural que demuestre poder y paciencia de ambos lados; es explosivo al chocar los lanzamientos y no tiene problemas con los lanzadores de alta calidad.
Es uno de los mejores defensores en primera en todo el béisbol, a la par con Adrián González, ya que ofrece buena área de cobertura y manos más que confiables. Además ha sido duradero al jugar 157 partidos en 2008 y 162 partidos en 2005 y 2006, y por lo general ha sido más efectivo en la segunda mitad debido a un intenso régimen atlético diseñado para darle mayor fuerza para completar la temporada.
Sabathia es claramente el mejor lanzador en este mercado de agentes libres, ya que ningún otro pitcher puede acercarse a su résumé combinado de talento, desempeño y niveles absurdos de durabilidad.
Sabathia es un lanzador clásico de potencia. Persigue a los bateadores primordialmente con dos lanzamientos y medio: una recta de cuatro costuras de 93-96 mph que parece más dura por la decepción en su tiro y un slider/cutter (casi el mismo lanzamiento, pero con distintos grados de rompimiento) con buena caída. Tiene control sobre todo lo que tira, puede volar su recta en la zona alta de Stripes (me parece que le gusta hacer esto sólo para recordarle a los bateadores quién es el jefe) y mueve su curva por todo el plato, consiguiendo Stripes adentro y afuera.
Ha lanzado más de 500 entradas en las últimas dos temporadas si contamos los playoffs; aunque eso puede causar preocupación sobre si está sobreexpuesto, también subraya su fuerte récord de salud, buen cuadro de lanzador y entrega consistente. Aún bajo presión al final de la temporada 2008, su velocidad y curva se mantuvo sólida. No obstante, su movimiento del brazo comenzó a caer un tanto, una posible señal de fatiga. La eliminación de los Cerveceros en la serie divisional de la Liga Nacional fue probablemente lo mejor que le pudo haber pasado al próximo patrono de Sabathia.
Sí, a veces Ramírez no parecía dar el máximo en Boston. Sí, pasó aquel mes a finales del año 2006 cuando los Medias Rojas estaban fuera de contención y éste como que se tomó el resto de la temporada libre. La crítica de "Manny siendo Manny", sin embargo, ha llegado a proporciones histéricas; toda la evidencia dice que Ramírez hizo mucho mucho más para ayudar a los Medias Rojas en el 2008 que para lastimarlos. Por supuesto, fue un ciudadano modelo con los Dodgers, recibirá bastante crédito por su título divisional e incrementará dramáticamente su próximo salario.
En el plato, Ramírez es un cadete experimentado; reconoce los lanzamientos, sabe lo que puede hacer con cada lanzamiento y está dispuesto a tomar un pasaporte en lugar de forzar un turno al bate. Su poder hacia el jardín izquierdo es extremo aun con lanzamientos despegados, y puede volar un lanzamiento en las afueras del plato hacia el jardín derecho. Le pega duro a todo, lo que provoca muchas doblematanzas.
Ramírez es un defensor indiferente en sus mejores momentos, y la mayoría de las métricas defensivas han demostrado que está en el rango de lo "truculento" y "abominable" en el jardín izquierdo cuando estaba con Boston. Aunque eso en parte se debe a las dimensiones inusuales de Fenway Park, no es un punto a favor en el jardín izquierdo. También tendrá 37 años en mayo, así que un contrato de cuatro años lo llevaría más allá de los 40 años de edad, y los bateadores como Ramírez (que no es rápido y no juega buena defensa), tienden a desmejorar más rápidamente que los bateadores atléticos.
A corto plazo, con un contrato de dos años es el segundo mejor bateador en el mercado detrás de Teixeira.
Burnett podría contar con el mejor talento crudo de cualquier abridor en el béisbol. Cuando tira bien nadie le batea. El problema es cuando sale mal, o no está motivado, es ordinario y predispuesto a la entrada de carreras por ramilletes.
Burnett demuestra tres lanzamientos sobre el promedio en sus mejores días: una recta de 92-98 mph, todas con buen movimiento y algo de caída; una curva dura que rompe hacia abajo; y un cambio sobre el promedio, su peor lanzamiento, pero lo vende lo suficientemente bien como para engañar a muchos bateadores zurdos. Su control es promedio; su método es talento puro junto a sus instintos y a su plan de ataque.
La mayor preocupación con Burnett es qué versión de Burnett firmará el nuevo contrato. Tiró unas 2221.1 entradas y abrió 34 partidos en 2008 (ambas marcas máximas en su carrera). Las dos veces anteriores que Burnett lanzó sobre 200 entradas antes de 2008 fueron seguidas por temporadas abreviadas por problemas del brazo.
Burnett se desempeña mejor cuando hay poca presión y se va en rachas ganadoras en la segunda mitad de la temporada cuando los Azulejos son irrelevantes. Es una rareza en este mercado de lanzadores, ya que puede dominar a cualquier equipo en cualquier momento con su talento, y si lo hace un par de veces más al año contará con votos para el premio Cy Young.
Es uno de sólo dos jugadores Top 10 en este ránking -- el otro es Oliver Pérez -- que puede resultar como un baratillo cuando firme con su nuevo equipo. Pero una repetición de lo que hizo con Toronto podría ser una temporada mediocre.
Lowe entró a la agencia libre al culminar la temporada 2004 luego de sufrir la peor temporada de su carrera como abridor. Mejoró sus ofertas con buen trabajo en octubre aunque el contrato de cuatro años firmado con los Dodgers parecía exuberante. Pero desde que firmó, Lowe completó cuatro temporadas consecutivas con efectividad por debajo de 3.90 y al menos 199 entradas lanzadas.
La gran diferencia entre ahora y entonces, más allá de una mudanza a una liga y un parque más amigable, es el control de Lowe: Típicamente tacaño con permitir vuelacercas, Lowe también ha sido mezquino con los pasaportes, registrando sólo 38 boletos gratis en 211 entradas esta temporada.
Lowe trabaja primordialmente con un sinker de velocidad promedio pero picada dura y tardía; solamente Brandon Webb fue mejor generando rodados e impidiendo batazos de línea esta temporada. Esto lo combina con un slider con rompimiento corto para mantener a los bateadores fuera de base.
A sus 36 años, Lowe probablemente se dirige a un declive, pero no ha mostrado ninguna señal de ello hasta ahora y probablemente le resten dos -- o hasta tres -- temporadas a un nivel comparable a su desempeño de 2006-2008.
Como campocorto legítimo que llega a base, Furcal parece ser uno de los premios de este mercado de agentes libres este invierno. La pregunta es si una rara temporada de 140 turnos al bate van a propulsar su valor a niveles insospechados.
Furcal hace swing mayormente con sus manos, bateando hacia el jardín central o el jardín contrario en vez de halar la pelota y es un poco vulnerable a la bola adentro, aunque distinto bateadores del mismo estilo (como Akinori Iwamura), tiene suficiente fuerza para sacar la bola de parque. Dicho estilo de hacer swing conlleva mucho contacto pero poco poder; en 2007, su última temporada saludable, sólo bateó 33 imparables extrabases en más de 600 apariciones en el plato. Es un corredor sobre el promedio pero sus destrezas para robar bases son promedio.
En el terreno, Furcal cuenta con cobertura promedio y un brazo sobre el promedio; la discusión sobre los mejores brazos del campocorto en la liga lo incluyen a él, Yunel Escobar y Troy Tulowitzki, y hasta ahí. Furcal tiene la capacidad para servir como campocorto por tres años más, a no ser que sus piernas le fallen antes de tiempo.
Dunn recibe mucha crítica de parte de los medios de comunicación, ya que es el nuevo jugador símbolo para aquellos que le tienen miedo a las matemáticas. El valor de Dunn no se demuestra en las categorías más entrañables para los cronistas deportivos, tales como promedio de bateo o carreras impulsadas, pero sí aparece en números más sofisticados y calibrados, tales como promedio de embasamiento o valor sobre un jugador reemplazo o hasta una estadística que depende del contexto como probabilidad de triunfo añadida.
Dunn es, como se podrá imaginar, paciente en el plato al extremo de la pasividad. Casi 44 por ciento de sus apariciones en el plato en 2008 terminaron con un pasaporte o un ponche. Es extremadamente fuerte y no le hace swing a muchos lanzamientos en la zona de Stripes porque prefiere esperar por un lanzamiento apto para pegar un jonrón. Esto puede resultar en un dolor de cabeza para un manager o un gerente general, pero hay un gran valor en todos esos pasaportes adquiridos.
Si tú valoras la consistencia, Dunn la tiene, con promedio de embasamiento (OBP, por sus siglas en inglés) de .388, .387, .386 y .386 en cuatro de los últimos cinco años, y exactamente 40 vuelacercas en cada una de las últimas cuatro temporadas. Ser consistente no significa mucho cuando un jugador no es muy bueno, pero es genial cuando se trata de un jugador productivo.
Dunn tiene sus fallas, mayormente en la defensa en el terreno, donde puede atrapar la pelota dirigida directamente a él pero tiene un grado de cobertura limitado en el jardín izquierdo y derecho; también podría terminar ocupando la primera base.
Dempster estuvo salvaje y errático en tres años de trabajo como relevista de los Cachorros, aunque se apuntó 85 salvamentos en ese periodo, con efectividades de aproximadamente 5.00.
La mudanza a la rotación de abridores esta temporada parecía cierta desesperación -- una decisión tipo "No podemos usarlo como cerrador, y no sabemos qué más hacer con él". Resultó ser un cambio magistral, ya que Dempster gozó del mejor control de su carrera y fue uno de los mejores cinco abridores en la Liga Nacional.
Bradley siempre tuvo la habilidad de conseguir los números que logró en 2008, pero las lesiones y su temperamento han conspirado para limitar sus oportunidades.
Es un ambidiestro natural con disciplina, además de contar con mucho poder de amos lados del plato. Bradley reconoce los lanzamientos de cambio eficientemente, deja que la bola viaje, luego le da rienda libre a su bate, tomando ventaja de la velocidad en sus muñecas. En otras palabras, es exactamente el jugador que fue hace un año, pero con una plataforma más efectiva en su año previo a la agencia libre.
El problema con Bradley es que parece no poder mantenerse saludable. Su temporada de 2008 estuvo plagada de lesiones, todas menores, en su rodilla, espalda, cuádriceps y muñeca, aunque logró acumular la segunda mayor cantidad de turnos al bate y partidos jugados en su carrera.
Probablemente no puede jugar defensa, no sea que sufra una lesión, y estaría limitado al jardín izquierdo si pudiera tomar el terreno con su guante. Pero sí puede batear.
Pérez es el agente libre más joven en este mercado entre los lanzadores abridores a consecuencia de haber llegado a las mayores a los 20 años de edad con una temporada muy favorable en 2004 a la edad de 22 años.
Luego de la gran cantidad de trabajo que acumuló en 2004, no fue el mismo en las dos temporadas siguientes y perdió tiempo con una lesión del hombro antes de regresar a su buena forma en 2007. Pérez lanza cuatro lanzamientos, con una recta promedio que alcanza las 92-93 mph pero que en ocasiones puede carecer de movimiento, además de una curva promedio, un slider fuerte de 80-81 mph y un cambio inconsistente. La falta de un buen cambio lo ha hecho vulnerable a los bateadores derechos, y tira con control reducido.
Tengan en mente que con una gran defensa a su espalda, Pérez fue sólo un lanzador promedio en 2008 y lideró la Liga Nacional en pasaportes permitidos (en una temporada rellena de buenos competidores en esa categoría). Es errático -- permitió al menos cinco carreras en nueve aperturas en 2008 -- pero tiene la capacidad de silenciar hasta las mejores ofensivas. Dominó a los Yankees y a los Filis con dos buenas salidas consecutivas en junio, y luego ponchó a 12 jugadores de los Filis en otra apertura de siete entradas dos semanas después. (De hecho, Pérez sólo le permitió una cerrar a los Filis en 26 entradas esta temporada).
Pérez está en posición de conseguir cuatro años de contrato por tres razones: Es zurdo. Ha tirado más de 370 entradas en las últimas dos temporadas. Y hace abanicar a los bateadores. Pero no hay razón para pensar que tirará suficientes Stripes para justificar el gran contrato que recibirá.