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Se llena la alcancía

LeBron James

(Getty Images)

El posible pase de LeBron James a New York se calentó aún más con los intercambios del viernes

¿Sólo LeBron James?

¿Por qué deben detenerse ahí los New York Knicks?

Los Knicks efectuaron dos importantes intercambios el viernes, y eso nos dice que están tramando planes bastante más grandiosos para el delicioso verano de agencia libre 2010. Cuando le comenté esto a algunas personas que podrían conocer la mentalidad de quienes ocupan la suite ejecutiva del Madison Square Garden, no me sentí disuadido por la siguiente respuesta: Donnie Walsh y Mike D'Antoni son lo suficientemente descarados como para creer que tendrán suficiente flexibilidad como para fichar a LeBron, Chris Bosh y Steve Nash dentro de unos 586 días.

Pero la cuestión es la siguiente: Eso podría llegar a ser matemáticamente posible.

Suele decirse que nosotros, los de los medios, tendemos a ponernos un poco histéricos cuando hablamos del delirio que supuestamente estallará en julio del 2010. A lo que sólo puedo responder: ¿Nosotros?

Sólo seguimos el ejemplo de los equipos que cubrimos.

En serio. Faltan varios días para el Día de Gracias de este año, y ya hemos visto a Detroit y New York combinarse para llevar adelante tres intercambios impactantes, todos motivados por el futuro remate de LeBron, para el que faltan más de 19 meses.

Nadie parece estar muy interesado en la famosa fábula de precaución, que nos recuerda que Shaquille O'Neal fue el único agente libre en la historia de la liga que cambió de equipos teniendo un súper-contrato para ganar un campeonato, capturando tres anillos con los Lakers (y uno después de ser canjeado al Heat) tras salir del Magic.

Como señalamos en nuestro opus de LeBron este mismo mes, nada menos que 15 equipos --incluyendo los Cavaliers-- despertaron el viernes por la mañana con menos de 40 millones de dólares comprometidos en salarios para el 2010-11, acumulando flexibilidad salarial para una clase de agencia libre tan jugosa que ya casi no hablamos de jugadores como Amare Stoudemire, Dirk Nowitzki y Joe Johnson.

Pero esa lista ahora tiene un nuevo líder, ya que los Knicks han logrado desligarse de sus obligaciones a largo plazo con Zach Randolph y Jamal Crawford en cuestión de horas mediante acuerdos diferentes con los Clippers y los Warriors. Estando hecho lo que Walsh había prometido hacer desde su llegada -- pero haciéndolo más rápido de lo que él mismo hubiera imaginado -- sólo habrá cuatro jugadores actuales en la nómina después del 2009-10: Eddy Curry (quien ganará 11.3 millones en el 2010-11), Jared Jeffries (quien seguramente no renunciará a los 6.8 millones que le deben), Danilo Gallinari (3.3 millones) y Wilson Chandler (2.1 millones).

Entonces...

Aunque hará falta mucha diligencia para mantener tantos espacios abiertos para el verano de la verdad, partiendo de las decisiones que pronto tendrán que tomar sobre las extensiones de David Lee y Nate Robinson, en la liga de pronto todos asumen que el equipo con el mercado más irresistible para James se verá aún más irresistible con espacio para fichar a otros dos jugadores de elite... de la misma forma que asumen que los Knicks tendrán demasiado dinero, demasiado encanto de gran ciudad y demasiado potencial de diversión con D'Antoni a la cabeza como para no quedarse con el máximo talento más allá de lo que pase con James.

"Imagínate lo mal que Danny Ferry debe sentirse en este momento", dijo un alto ejecutivo, haciendo referencia al gerente general de los Cavaliers.

Imagina también lo que sucederá si los Knicks encuentran la forma de mover a Curry en los próximos 19 meses para crear más flexibilidad.

¿Recuerdas la advertencia que publicamos la semana pasada sobre la posibilidad de que jugadores como James y Bosh o Bosh y Dwyane Wade quieran jugar juntos todo el tiempo? "Todos estos jugadores quieren jugar juntos en la NBA", dijo.

Si Curry se va, no debería ser demasiado difícil imaginar a D'Antoni insistiéndole a Nash para que termine su carrera con un acuerdo a corto plazo para hacerles de mentor a los jovencitos, jugando menos de 30 minutos por noche en una ciudad adonde el veterano de 34 años se pasa las temporadas bajas jugando al fútbol. Especialmente si los Suns no empiezan a redescubrir la diversión que ha desaparecido de algunos rostros en Phoenix desde la salida de D'Antoni.

Sigo creyendo que todavía es demasiado pronto para decir con seguridad que James se irá de Cleveland, o que Cleveland ha dejado de ser el pretendiente favorito, aunque equipos como San Antonio, Miami, Detroit, Portland y Dallas vayan a participar en la pesca de jugadores como LeBron, Bosh y Wade. De la misma manera, sigo afirmando que los Cavs tienen muchas más chances de retener a su futuro ícono mundial de las que Orlando tuvo de retener a O'Neal, dadas las conexiones de LeBron en Ohio, la predisposición del propietario de pagar para mantener a James y la sed de Shaq por ir a Hollywood.

Lo escucharás hasta el hartazgo hasta que LeBron finalmente firme su próximo contrato -- ¡El rey James a los Knicks es un hecho! -- pero nosotros seguiremos contestando con esto: ¿Por qué LeBron habría de tomar una decisión tan pronto?

Recuerda, las cosas cambian rápido en esta liga. Toma el viernes, por ejemplo. Años de inversiones fútiles en Gotham, que gradualmente se consumió la vida y las esperanzas del estadio de básquetbol más importante del mundo, se vieron desechas en una tarde de importantes intercambios en New York.

Isiah Thomas, por cierto, tiene algo que ver en esto. Los Knicks cayeron tan bajo con Zeke que Walsh pudo interrumpir un inesperado inicio de 6-5 deshaciéndose de dos de los máximos anotadores de D'Antoni en el cuarto viernes de la temporada y convencer a sus aficionados que esperar 586 para ver a quién capturarán los Knicks con tanto dinero disponible es la jugada que más le conviene a la franquicia.

¿LeBron?

¿Y Bosh?

¿Y Nash?

Está bien, está bien. Falta mucho tiempo para tener esas respuestas, así que intentaremos controlarnos un poco más de aquí en adelante.

Al menos hasta el martes por la noche, cuando los Cavs de LeBron visiten el MSG... y cuando las pestes de los medios invadan a James con todas esas preguntas incómodas que los equipos como los Knicks no nos permiten guardarnos para más adelante.