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"Puedo llegar bien al Mundial"

GETAFE -- A punto de hacer las maletas para regresar a Argentina, con una mudanza a cuestas, y como un niño con zapatos nuevos, el guardameta Roberto "Pato" Abbondanzieri pasea a primera hora de la mañana por el Coliseum Alfonso Pérez con el objetivo de despedirse de todos sus compañeros del Getafe.

Boca Juniors espera. El "Pato" regresa al equipo que le lanzó a la fama y con el que tantos éxitos logró. A sus 37 años, Abbondanzieri espera triunfar en el club argentino y no renuncia a jugar el Mundial de Sudáfrica en 2010. En una entrevista concedida a Efe, la primera tras anunciar su fichaje y la última antes de abandonar España, también explicó cómo se desarrolló su fichaje por el club bonaerense. Para la fotografía, posa con una camiseta de Boca Juniors, de la época de Maradona, al que espera convencer para regresar a la selección.

Pregunta: Parece que lo de ir a Bouquet a trabajar el campo se va a retrasar dos años ¿Tanto merecía la pena fichar por Boca?
Respuesta: Boca apareció en el momento que no esperaba. La primera llamada de Bianchi fue algo espectacular. Siempre teníamos relación y que me llamara para volver me tocó demasiado. Boca puede hacer esperar un poco más mi deseo de ir al campo. Vale la pena. Más allá de que son dos años de contrato, me gustaría retirarme allí.

P: Una de las causas por las que vino al Getafe fue por el asedio mediático que hay en Argentina. Buscaba tranquilidad. ¿No le da un poco de vértigo volver a la vorágine de un equipo grande?
R: No sólo la prensa. En el fútbol, en cualquier sitio, la prensa va a tener presión. Fue por eso, pero también porque era un club grande. Allí exigen campeonatos, como pasa aquí con el Barcelona o el Real Madrid. Eso cansaba la mente. Ganabas un campeonato y en el próximo torneo tenías que empezar ganando porque te podían machacar. Eso durante tanto tiempo me cansó, pero no por la prensa.

P: Entonces, ¿en dos años y medio en Getafe ha tomado oxígeno para volver?
R: Aquí fue diferente. Salir a la calle. Vivir con mi familia... Aquí se vive menos el tema de las concentraciones. Dos años valen la pena.

P: Su fichaje ha sido como un parto. Parecía fácil pero a la vez muy difícil... ¿Qué ha pasado?
R: Parecía sencillo porque me quedaba muy poco tiempo en el club. Al no tener el contrato firmado hasta que el equipo se salvara, había dudas. Ahí apareció Getafe de nuevo, cuando en realidad es cierto que necesitaban un portero. Tenían a Ustari lesionado y una posición en la tabla difícil. Se complicó porque Getafe quería lo suyo y Boca, al saber que el jugador iba a estar libre en cuatro meses, tampoco quería pagar demasiado dinero. No sé si las dos partes tenían razón. Al Getafe le quitaban el arquero titular. Las negociaciones son así. Lo más negativo que me llevo de esto es que estuve en medio de ellas.

P: A lo mejor usted tenía miedo de que se diera un caso como el de Vivar Dorado, al que el presidente, según el jugador, le prometió la renovación y al final salió del club...
R: Miedo, no sé. Con el presidente siempre tuve una relación directa y buena. Me lo aclaró en octubre cuando vinimos a renovar para quedarme tranquilo, porque podía pasar lo que al final sucedió, que vino un club a buscarme. Si en ese momento firmo, lo de Boca no habría ocurrido y me habría retirado en Getafe en julio de 2010. No es que tuviera miedo. Pienso en mi futuro y cuando viene un club grande a buscarte con dos años de contrato hay que pensarlo. No es que tuviera miedo de que no me renovaran. Pero soy profesional y dependo de mi futuro. ¿Qué habría pasado si Getafe no me renueva? ¿Cómo le explicas a la gente? Me podría haber quedado en junio sin club. Es un poco entendible.

P: En esta semana y media, ¿se has mordido la lengua... (interrumpe)
R: En Argentina sólo declaré el domingo después del partido de Liga de la semana pasada. Sólo hablé con Olé y Clarín. Por radio jamás salí...

P: Por eso le comento, lo que leí no fue demasiado grave...
R: No, no, nunca falté al respeto. Creo que hablé bien y lo que sentía.

P: Por eso le pregunto si se mordió la lengua, porque a lo mejor, en algún momento, las palabras de Ángel Torres pudieron molestarle...
R: Si yo hubiese salido a responder habríamos estado todos los días respondiéndonos el uno al otro y eso es una falta de respeto hacia la gente que quieres y aprecias. Entonces, la situación podría no haber terminado muy bien, pero por la calentura de la negociación. Te vuelvo a repetir, la negociación me implica y me duele porque estuve metido en ella. Si yo no habría estado, si hubiera sido club con club, habría quedado al margen. Lo que dijo el presi en muchas radios, que habló por todos los lados... yo lo conozco desde hace un tiempo y se calienta y dice esas cosas. Pero por mí, no tengo ningún problema.

P: Tal vez el momento clave llegó cuando bajó al campo y le dio dos besos. ¿Ahí supo que el problema terminó?
R: Yo ya había hablado la noche anterior con él. Le dije que quería hacer una rueda de prensa y que estuviera conmigo. Le pregunté si iba a venir al entrenamiento y me sorprendió que me dijera que no y después apareciera. Para que se sepa, el presidente lo hace para que se sepa que nuestra relación, más allá de lo que sucedió esa semana, va a seguir igual. Es una demostración porque a veces no se puede demostrar a la gente como se llevan las personas. Él, saliendo al campo, estando los periodistas, es algo como para decir que está todo bien.

P: Volviendo a Boca... ¿Tiene más proyección que Getafe para convencer a Maradona?
R: En su momento me tocó no ir convocado apenas llegó Maradona. Mi pensamiento es hacerlo bien en Boca. La selección, creo que puedo llegar a jugar bien el Mundial. Ahora tengo un reto importantísimo que es Boca.

P: Su primer partido puede ser ante River Plate... ¿Ansioso, o nervioso?
R: Llego en plenitud. Estoy bien físicamente y son decisiones del entrenador. A ver si puedo jugar el sábado. Todos quieren jugarlo. Es de los partidos más lindos.

P: ¿Cuál será su recuerdo más feliz y el más amargo de su paso por Getafe?
R: El más feliz fue conseguir el trofeo de portero menos goleado y haber jugado la Copa de la UEFA. Me quedo con un porcentaje más alto con la UEFA, sus viajes en avión y todo lo que disfrutamos hasta que jugamos ante el Bayern. Eso no se olvida. Me llevo muchas cosas positivas. Lo negativo, en lo deportivo, nada. Los errores son normales en el juego y en la posición. Lo más negativo y lo más triste es irme en mitad de la Liga de la manera que no quería. Deseaba terminar de jugar y que el equipo se salvara.

P: ¿En qué quedó aquella afición de conducir coches de carreras?
R: Me gustan mucho los coches. Voy a estar más cerca de los "kartings" para andar en Buenos Aires. Tengo cosas que hacer y tendré el automovilismo cerca, aunque a mi señora no le gusta mucho. Lo tengo en la mente.