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Una aclaración que sirve para entenderse

BUENOS AIRES (DyN) -- Diego Armando Maradona adelantó el miércoles que el sábado se reunirá en Holanda con el plantel de Boca Juniors para "hablar cara a cara" con los jugadores, pero adelantó que no pretendió enfrentarse con ellos con sus declaraciones porque lo que quiso decir fue que "a ningún jugador de Boca se le ocurriría ir a cobrar premio por perder".

"Ellos ganan su dinero trabajando, ganan sus sueldos, sus primas, ganan el afecto de la gente, pero cobrar por perder no le gusta a nadie". añadió Maradona, como para poner paños fríos a su reciente cruce de declaraciones con las del delantero Martín Palermo.

Palermo y otros jugadores del equipo se habían sentido irritados debido a afirmaciones de Maradona en el sentido de que "si no ganan no van a ver un peso".

"Lo dije como lo dije, que hay que ganar para poder cobrar. Lo digo por mi experiencia, porque yo siempre pedí lo máximo por ganar, pero no entiendo que alguien pueda cobrar un premio de la Libertadores por pasar el turno habiendo perdido 4-0 con las Chivas", dijo Maradona en comunicación telefónica desde Italia con la radio La Red.

Maradona disipó las dudas en cuanto a que asistirá a reunirse con el plantel boquense e insistió en que la función que pretende ejercer es la de "nexo" entre los futbolistas y los dirigentes.

"Yo acepté el cargo de vicepresidente porque había que darle un nombre, pero le aclaré bien al presidente que voy a ser el nexo entre el plantel y la comisión directiva para que los jugadores le puedan seguir dando alegría a la gente", expresó.

Advirtió, sin embargo, que si su gestión se convierte en "un estorbo para los jugadores o para los dirigentes, yo me vuelvo a mi palco".

"Lo mío con Boca es con el corazón, no con una firma, con una lapicera. No pretendo ganar una posición dentro del plantel o dentro de la comisión directiva. Quiero ayudar a solucionar los problemas que pueda haber, pero tengo que escuchar las dos campanas. Ese es mi trabajo y si no logro eso, me voy", señaló.

Incursionó también en el conflicto entre el presidente Mauricio Macri y el delantero Marcelo Delgado, que fue separado del plantel.

"Es inútil tener en el equipo un jugador que no quiere jugar y no se le debe cortar a Delgado la posibilidad de ganar muchísimo dinero a esta altura de su vida", explicó.

Sin embargo, advirtió el perjuicio que recibiría el club, porque "hay que poner en la balanza que Boca se quedaría con un delantero menos a pocos días de comenzar el campeonato y el miércoles en el fútbol argentino regalar un delantero es muchísimo".

Cuando se le preguntó si recomendó la compra del volante de Estudiantes de La Plata Juan Krupoviesa respondió afirmativamente y lo definió como "un gran jugador", a la vez que ponderó las virtudes del tucumano al decir que es ese tipo de jugadores que gustan al hincha de Boca "porque es capaz de trabar de cabeza".

Finalmente, se definió como "desinformado" de la fecha de reanudación de la actividad futbolística en la Argentina al sostener que "acá se habla mucho de (Alberto) Gilardino, de (Cristian) Vieri o de la pretemporada de (Didier) Drogbá pero no hay ni una línea del fútbol argentino".