Diego Schwartzman (N° 16 del ranking) se reencontró con sus días felices en el Masters 1000 de Monte-Carlo. La victoria frente a Marton Fucsovics (57°) por 6-0 y 7-6(4) le dio el boleto a los octavos de final del certamen, etapa a la que no llegaba desde 2017.
Después de un complicado paso por la gira estadounidense -cayó en segunda ronda de Indian Wells y en el estreno dentro del Miami Open-, el argentino comenzó su cruzada en la gira europea sobre polvo de ladrillo con buenas sensaciones. Primero, llevándose una importante pulseada a tres sets en un duelo de ex Top 10 frente a Karen Khachanov, su verdugo en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 y con quien, hasta el momento, sólo se había medido en canchas duras.
En la segunda instancia del renombrado evento, midiéndose contra Marton Fucsovics, la situación comenzó con la balanza inclinada hacia el lado del representante latinoamericano. Luego, pese a la mejora del húngaro a lo largo del partido, Schwartzman se mantuvo y pudo cerrar con un 6-0 y 7-6(4) en una hora y media de juego.
En la tercera ronda, fase a la que accede por primera vez en cinco años, se medirá con Lorenzo Musetti (83°), el joven italiano que recuperó su mejor nivel y eliminó al canadiense Félix Auger-Aliassime (9°) por 6-2 y 7-6 (2). El historial favorece al europeo, quien se quedó con la victoria en el ATP 500 de Acapulco, en 2021.
En el cierre de la jornada, el azuleño Federico Delbonis (34°) no pudo dar la sorpresa ante el alemán Alexander Zverev. El número tres del mundo y máximo favorito al título en la arcilla de Mónaco tras la pronta eliminación de Novak Djokovic, fue superior al argentino y lo sacó del torneo con parciales de 6-1 y 7-5. De esta manera, el Principito se metió en octavos de final y será rival del español Pablo Carreño Busta(19°).