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Miami Heat y los desconocidos de siempre

Draft de la NBA de 2018: mientras Deandre Ayton celebra su elección como número 1, Luka Doncic recién es seleccionado tercero y Trae Young quinto, Gabe Vincent y Duncan Robinson son dos de los jugadores que se sienten desilusionados porque ningún equipo decidió tomarlos.

Draft de 2019: Zion Williamson y Ja Morant disfrutan de los indiscutidos primeros dos puestos en las preferencias y se los proclama como nuevas estrellas antes de haber jugado un partido como profesionales. A Caleb Martin y Max Strus les gana la frustración de no haber sido elegidos.

Playoffs de 2023: Vincent, Robinson, Martin y Strus son los compañeros ideales de Jimmy Butler y Bam Adebayo, las estrellas de Miami. Ese cuarteto es el complemento que necesitaban los protagonistas para llevar al Heat a las puertas de las Finales de la NBA.

Vincent, quien debutó en la NBA en enero de 2020 y en esa temporada pasó más tiempo en la G-League que en la liga más importante del mundo, ya lleva cuatro partidos con al menos 20 puntos en la actual postemporada. Y en el juego 3 cumplió el rol de actor principal: 29 puntos, récord personal de su carrera, con 6 de 9 en triples.

Robinson tuvo una temporada 2018-2019 de adaptación. Sus participaciones en el equipo fueron a cuentagotas. Sin embargo, al año siguiente mostró un crecimiento notable gracias a su arma principal: el tiro de tres puntos. De una muy buena temporada regular pasó a unos playoffs con partidos en los que fue determinante, incluida una memorable actuación de 26 puntos en el quinto juego de las Finales contra Los Angeles Lakers. Ya en estos playoffs, luego de un pronunciado bajón en 2022, volvió a aparecer en momentos decisivos como en el triunfo de este domingo ante los Celtics con 22 puntos (5-7 en triples).

Martin, de paso fugaz por Charlotte Hornets donde compartió equipo con su hermano Cody, llegó al Heat en 2021. Su primera experiencia en playoffs, en 2022, pasó sin pena ni gloria con apenas un par de partidos con 10 puntos o más. En este 2023, Caleb se convirtió en un revulsivo que destraba situaciones complicadas y asume responsabilidades con éxito. Lleva diez partidos con anotación de doble dígito y promedia 19.3 puntos contra los Celtics, con 25 en el segundo encuentro como pico máximo de rendimiento.

Strus no solo se decepcionó en el Draft. En 2019 estuvo muy cerca de quedar en el plantel de los Celtics, pero fue cortado a último momento. Chicago Bulls lo incorporó y allí pudo estrenarse en la NBA, aunque apenas jugó dos partidos. Su llegada a Miami fue lo mejor que le pudo pasar. De a poco fue encontrando su lugar a base de esfuerzo y puntería. En los playoffs de 2022 tuvo partidos interesantes pero poca constancia. En 2023 encontró una regularidad y una confianza admirables: lleva ocho partidos consecutivos con 10 o más puntos.

Esos cuatro jugadores, más los 2 tantos del turco Omer Yurtseven, se combinaron para anotar 81 puntos en el tercer partido de las Finales del Este, la mayor cantidad en un partido de playoffs aportada por jugadores no elegidos en el Draft desde 1966.

Cada uno de los integrantes del póker integrado por Vincent, Robinson, Martin y Strus anotó al menos 100 puntos en estos playoffs. Nunca en la historia un equipo había tenido más de dos jugadores no seleccionados en el Draft que convirtiera esa cantidad de puntos en una postemporada antes de las Finales.

Pat Riley, desde su cargo de presidente de operaciones del Heat, y Erik Spoelstra, en su rol de entrenador, apostaron por este cuarteto de jugadores que habían sido descartados por las demás franquicias. Los resultados de su apuesta están a la vista de todos.