TORONTO - Bismack Biyombo ha generado bastante atención en los playoffs con los Toronto Raptors por el gesto que ha tomado de una de las leyendas de la NBA y del continente africano, el miembro del Salón de la Fama, Dikembe Mutombo.
Pero antes de incorporar el gesto con el dedo índice de su mano, Biyombo recordó en una entrevista exclusiva con ESPN Digital lo que tuvo que hacer para poder jugar en la mejor liga del mundo. Esto incluyó contradecir las órdenes de su padre, François Biyombo, a quien tuvo que convencer con tal de seguir su sueño y marcharse al Medio Oriente con la esperanza de cumplirlo a los 16 años de edad.
Siete años después, tras una magistral actuación en el Juego 3 de la Final de la Conferencia Este, en el cual estableció la marca de la franquicia con 26 rebotes, su padre no se arrepiente de que el más joven y el más consentido de sus seis hijos, lo desobedeciera para iniciar en Yemen los primeros pasos de una travesía hacia la mejor liga del mundo, donde hoy es la ancla de un esquema defensivo que anhela frenar las aspiraciones de LeBron James de ir a las Finales de NBA por una séptima ocasión.
"Poco a poco mi padre se dio cuenta cuando empecé a mejorar y el equipo con el que jugaba en la República Democrática del Congo ganaba muchos partidos. Fuimos unos de los mejores equipos", afirmaba Bismack Biyombo.
"Fui uno de los mejores jóvenes. Todo el mundo hablaba de mí y llegó el momento donde él empezaba un poquito a estar conmigo y mirar mis partidos. Llegó el momento que yo le pedía si podía empezar una carrera profesional. No es algo que fue fácil para él. Cuando tomó su decisión, estuve muy contento y muy alegre por empezar una nueva experiencia, sobre todo, vivir una nueva vida".
La bendición y el apoyo de su padre coincidió durante su tiempo en Yemen con un desempeño sobresaliente que captó la atención del entrenador portugués Mario Palma, quien comenzó a gestionar en su lista de contactos un equipo para el gigante centroafricano.
De nuevo, Biyombo iniciaba otra nueva etapa de su vida al abrirse las puertas a la oportunidad de estar más cerca de la liga norteamericana, marcando una estancia de tres años con el Fuenlabrada de la liga española pese a que tuvo que empezar desde abajo en los rangos junior, debutando en la ACB en enero de 2011.
No obstante, dos meses después, Biyombo, con su dedo índice, se oponía a las órdenes de la directiva del conjunto español, quienes rechazaban la idea de que asistiera al Nike Hoop Summit en Portland, Oregon, un escaparate destacando los mejores talentos jóvenes del mundo a nivel internacional y americano. Allí estuvo su futuro compañero de los Raptors, el brasileño Lucas Nogueira, y otra futura estrella de la NBA, Anthony Davis.
El resto fue una historia para el chico que en junio de 2011 pasó a ser el séptimo jugador elegido en el sorteo de novatos por los Sacramento Kings, quien esa misma noche lo incluía en un canje de tres equipos a los entonces Charlotte Bobcats.
"Llegó el momento que yo le pedía si podía empezar una carrera profesional. No es algo que fue fácil para él. Cuando tomó su decisión, estuve muy contento y muy alegre por empezar una nueva experiencia, sobre todo, vivir una nueva vida" Bismack Biyombo, al recordar la aprobación de su padre a seguir una carrera en la NBA
"Es una suerte que yo he tenido. A veces hay cosas que nos pasan en la vida y las tomamos o las perdemos. Yo vi que fue una oportunidad que podía cambiar mi vida y estaba seguro de mí", explicó el jugador congoleño.
"Para mí fue una vez , me la voy a jugar, que sea la primera y la última vez. Entonces llego ahí en el Hoop Summit. Jugué a lo máximo. Pasó lo que pasó".
El pívot de 2.06 metros ha encontrado una nueva oportunidad en su primera temporada con los Raptors luego de que en la organización de Charlotte no se desarrolló como lo anticipó y estos decidieron no extenderle una oferta de contrato, convirtiéndolo en agente libre.
"Al principio fue una sorpresa pero luego para mí fue como una oportunidad porque hace cuatro años que estuve en Charlotte jugando. Este año es la primera vez que desde que salgo de Charlotte estoy jugando feliz, sin presión. Jugando para ayudar al equipo a ganar, y además, que cuando llegué aquí he tenido la oportunidad de jugar mucho y la responsabilidad de ser un líder del equipo", indicó Biyombo, que promedia 7.3 puntos, 11.7 rebotes y 2.0 bloqueos en la Final de la Conferencia de Este.
Desde que el lituano Jonas Valanciunas sufrió un esguince en su tobillo derecho en el Juego 3 de la semifinal ante el Miami Heat, Biyombo ha aceptado el reto de patrullar la pintura como titular, destacándose de una forma que nunca lo pudo cumplir con los Hornets.
"Eso es una responsabilidad tan grande; la que no tuve con Charlotte. Cuando llegué aquí me dieron esa responsabilidad y la responsabilidad de nuestra defensa también... Ahí es donde las cosas van a salir. Pero tal vez las cosas malas que nos pasan en la vida no siempre son malas. Al final son las cosas que nos dirigen a lo que queremos cumplir en nuestras vidas. Creo que es lo que ha pasado porque al principio yo pensaba que fue una mala decisión, pero aquí ahora estoy tan feliz que sólo le tengo que dar las gracias a Dios".