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El campeón está "herido de muerte"

Un 2-0 no es engañosos. Es una buena ventaja, una gran ventaja. El León hizo los goles, aprovechó las fallas del rival y se llevó un triunfo que le coloca al borde de la gloria. El América se queja peligrosamente de un arbitraje que al mismo tiempo predispone para el domingo.

CIUDAD DE MÉXICO, México.- Supongo que aquel que inventó la tan sonada frase en el futbol de que "el 2-0 es el marcador más engañoso que existe" había perdido, justamente, un partido por esa diferencia.

El 2-0 existe. Es un buen resultado, es una ventaja considerable, no engañosa y lo logró el León porque tuvo contundencia, aprovechó los errores del contrario y fue, bajo las circunstancias en que se celebró el partido, el mejor.

La final no está completamente definida, pero está bastante avanzada. Digamos que el campeón está "herido de muerte" y que es cuestión de tiempo para que ocurra lo inevitable.

Aún sin ofrecer su mejor exhibición, el León logró un resultado contundente ante un América que no ha tenido su mejor nivel futbolístico en toda la liguilla. León aprovechó dos errores en la defensa del América y se llevó un resultado justo.

Miguel Herrera salió a justificar el marcado diciéndonos que el arbitraje fue fundamental en el partido. Y puede que el árbitro haya tenido una injerencia directa en el desarrollo del partido -afectando escenarios como los dos penaltis que decidió no marcar- pero no fue decisivo en el marcador. Lo que hace mal Herrera es predisponer el trabajo arbitral y "calentarle" la cabeza al silbante, a la Comisión de Árbitros y a todo ese aparato que rodea al futbol mexicano. El América es, ciertamente, un equipo de privilegios y de intereses. Cuando el América se queja del arbitraje, ¡cuidado!.

El escenario del domingo luce bueno para la final. El América tendrá que atacar, tendrá que volver a sobreponerse a un escenario adverso y que tendrá que demostrarnos porque algunos especialistas lo han calificado como "un equipo de época". Y el León, seguramente, saldrá a hacer lo suyo: buscar la portería contraria y el gol o los goles que le signifiquen el campeonato.

No hay un 2-0 engañoso. Hay un 2-0, no definitivo, pero sí pesado, incómodo y que tiene al León al borde de la gloria y el América muy cerca del abismo.

@Faitelson_ESPN