MAR DEL PLATA -- Llegamos a Mar del Plata el miércoles al mediodia y lo primero que hice fue ir a conocer el estadio Islas Malvinas, donde nuestro equipo tratará de conquistar la tercera ensaladera ante Argentina. Algo me queda claro: si bien el equipo de Mancini tiene toda la ventaja de un local, va a tener una eliminatoria muy difícil.
A las 4 de la tarde fui a ver el entrenamiento del equipo y estaban jugando un partido Ferru y Verdasco. La verdad, los dos me demostraron que estaban a un gran nivel, cada uno con su estilo. David Ferrer muy aguerrido, luchando cada pelota y corriendo hasta el final como suele ser habitual en su juego. Verdasco, que este año ha tenido su mejor temporada desde que esta en el circuito ATP, también estaba entrenando a una gran intensidad y pegándole a la pelota durísimo, como a él le gusta, con mucha aceleración y buscando winners constantemente.
Un poco más tarde, a las 6 apróximadamente, entraron a la pista Feli López, un buen amigo y un gran tenista, junto con el debutante Marcel Granollers.
Pienso que el público argentino se va a soprender con el juego de los españoles y que lo van a poder disfrutar enormemente, porque cada uno de ellos tiene caracteristicas muy particulares y eso va a colaborar a que esta final tenga el nivel que se merece.
En cuanto a los argentinos, parece que hay un poco de tensión. Y que cada día que pasa los jugadores van teniendo un poco más cerca la responsabilidad de tener que aprovechar esta oportunidad única para hacerse con su primera ensaladera.
Cuando terminó la jornada de entrenamiento nos reunimos con el equipo español y Ángel Ruiz Cotorro, médico de la Federacion Española. Se mostraba muy conforme con los entrenamientos. Nos adelantó que hoy había sido el último día de entrenamiento intensivo, ya que desde el sábado han estado practicando en doble turno.
Ahora toca buscar un poco la puesta a punto final de cara a los partidos del viernes. A las 9, los jugadores y todo el cuerpo técnico y médico se juntaron en el restaurante del Hotel Hermitage para cenar juntos y planear la jornada del jueves, en la que Emilio Sánchez Vicario, probablemente, ya comunicará en privado a los jugadores quiénes serán los que jueguen el single de la jornada del viernes.
Todos apuestan a un triunfo claro de Argentina. Desde mi humilde lugar, digo que no se descuiden. Que España va a dar batalla. Y no vaya a ser que podamos entregar la primer gran sorpresa en la Copa Davis del siglo XXI.