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Esto se sabía hace décadas

No pretendo saber la verdad, o lo que Angel Presinal hizo por Juan González o cualquier otra persona. O lo que los entrenadores en algunas de las fábricas de fútbol más grandes de la nación proveen.

Si se que la pieza de Christian Red del domingo en el New York Daily News no sólo fue mucho más significativa que el reporte de Mitchell, sino que es el comienzo de lo que será un despliegue del underground latino que Mitchell ignoró y que aparentemente plagó al béisbol las últimas dos décadas o más.

Si se porque Robinson Canó, David Ortiz y Alex Rodríguez salieron en defensa de Presinal.

Vayan al estadio olímpico en Santo Domingo casi todas las mañanas durante el invierno y hay 50, a veces 100 jugadores entrenando. Fiel al corazón de los jugadores dominicanos, aquellos a quien se les paga un alto salario pagan por el estadio y la experiencia de Presinal para que los jóvenes ganando salarios mínimos de ligas menores o aquellos en busca de invitaciones para ligas independientes puedan obtener experiencia como los muchachos más adinerados. Pedro Martinez una vez dijo, 'Los jugadores dominicanos establecidos ayudaron a mi organización -- depende de nosotros hacer lo mismo por las generaciones que siguen'.

Presinal los mata con ejercicios de velocidad y carreras con obstáculos. Martínez siempre lo dio crédito de dar los masajes más importantes y dolorosos que jamás haya experimentado. No se si Presinal le consiguió los esteroides a González que fueron incautados en Canadá, pero fui al estadio con Pedro y Ramón Martínez y Juan Guzmán y Stan Javier y más de 100 otros jugadores y creo que, como mucho, la mayoría de ellos estaban entrenando inocentemente. ¿Podría Presinal haber obtenido drogas ilegales para alguno de sus clientes ricos? Claro. Tal como publicó el Daily News el domingo, si tienes el dinero, tienes la capacidad.

Somos sacudidos con armas inmovilizadoras de atrocidad moral. Bud Selig alegó no saber nada del mundo de los esteroides hasta que leyó acerca del andro de Mark McGwire en 1998; ahora dice que empujó a la unión para hacer pruebas de esteroides en 1995. El reporte incompleto de Mitchell nunca se enfocó en el aspecto de donde provenían las drogas, ignorando el mundo subterraneo de los esteroides de Latinoamérica.

Ahora sabemos que hay jugadores de béisbol de los 1950s que tenían problemas de vista y otras falencias a causa del 'jugo rojo'. Nosotros leíamos 'Bola Cuatro'.

El super blog de John Perricone de 'Only Baseball Masters' de esta semana destacó una pieza de hace 40 años de Bill Gilbert en la revista Sports Illustrated. Aquí les presentamos un extracto del blog de Perricone:

    "Escribí reiteradas veces que simplemente no puedo creer que los periodistas deportivos hayan recién descubierto que los atletas utilizan sustancias para mejorar su rendimiento. Dije varias veces que el único motivo por el que tenemos este escándalo en el béisbol, y en ninguna otra parte, es a causa del reciente asalto del venerado libro de records del béisbol. Yo no leí este artículo de la revista Sports Illustrated hace 40 años cuando fue publicado, porque tenía tan sólo cinco años de edad, pero me hago varias preguntas:

    ¿Cómo es que estos escritores deportivos esperan que les crea que no sabían lo que estaba sucediendo en el mundo de competición elite de atletas en las últimas cuatro décadas? ¿Cómo pueden pedirme que me enfurezca cuando la mayoría de ellos vio este problema desarrollarse, y esperaron casi tres décadas para empezar a sonar la alarma?

    Bill Gilbert, un escritor del que nunca había escuchado hablar, escribió esta pieza, una acusación irrefutable del extendido uso de sustancias para mejorar el rendimiento en los deportes. Fue publicado en 1969, el mismo año que llegó el hombre a la Luna:

    … Luego de que se admitiera que la mayoría de los ciudadanos se drogan de vez en cuando, aún hay mucho camino para reclamar que en cuanto a la utilización de drogas, los atletas son distintos a nosotros. A pesar de ser jóvenes, sanos y activos especímenes, toman una cantidad y variedad de drogas extraordinarias.

    Las toman por propósitos discutibles, las toman en una situación de moralidad debatible, las toman en condiciones que van de lo peligrosamente experimental a lo fatal. El consumo de drogas -- drogas legales -- por atletas está lejos de ser algo novedoso, pero el incremento de consumo de drogas en los últimos 10 años es deslumbrante. De hecho, podría amenazar la tradición y la estructura del deporte.

    … '¿Acaso los esteroides anabólicos son utilizados por hombres de peso olímpico?', pregunta Dave Maggard retóricamente, quien terminó quinto en el lanzamiento de la bala en México y ahora es entrenador de pista de la Universidad de California. 'Déjenme ponerlo de esta manera. Si hubieran entrado a la villa olímpica el día antes de la competencia y hubieran dicho que acababan de encontrar una nueva prueba que detectaría el consumo de esteroides, hubiera habido muchísimos atletas quitándose de los eventos a causa de las píldoras de musculatura instantánea'.

    … Hay rumores abundantes en torno a mariscales de campo, lanzadores, boxeadores medianos, corredores y luchadores. De todas maneras, es una cuestión de motivación y moralidad lo que constituye en núcleo del problema de las drogas. Aunque ni uno sólo de los rumores pudiera ser reducido a hechos probables, hay evidencia que demuestra que el consumo de drogas constituye un dilema significativo, no tanto para atletas individuales sino para el deporte en general. Un motivo es que el uso de drogas en el deporte lleva directamente a cuestiones más serias y complicadas. ¿Acaso la integridad atlética es un tema de interés público? ¿Es de importancia que los partidos sean jugados en una atmósfera de virtud, y hasta justicia? De lo contrario, cual es la utilidad social de los partidos--¿Por qué jugarlos realmente? Estos temas dan a luz cuestiones tan pegajosas acerca de los fundamentales del deporte que uno puede comprender la reacción instintiva de los establecimientos atléticos: cuando se reduce a las drogas, ignoran, rechazan y se dan vuelta.

    … Dejando de lado las cuestiones éticas por el momento, hay motivos evidentes por los que los atletas usan drogas. El más evidente es que hay más drogas disponibles estos días para consumo diario de las que había en el pasado. Más allá de esto, se nos vende drogas empíricamente porque las hemos probado y disfrutamos los resultados. El marketing y la promoción nos han vendido las drogas de manera subliminal. Generalmente, hemos aceptado sin sentido crítico, el mensaje central de este discurso persuasivo—las drogas son buenas para ti.

    … Estos días es un reflejo cultural el ir en busca de un antiinflamatorio, una cápsula o una aguja si uno tiene fiebre, dolor, náuseas, congestión, irritabilidad, obesidad, o cualquier otra enfermedad.

    Sería sorprendente si los atletas no fueran influenciados por las mismas tendencias que nosotros. Un ejemplo de cómo la ambición atlética, ambición o ignorancia a un nivel sub-médico puede resultar en lo que puede ser llamado una dudosa práctica de drogas se dio hace un par de años en un campamento de entrenamiento de los San Diego Chargers. La historia fue relatada por Dave Kocourek, ahora un ala ofensiva para los Oakland Raiders.

    'Creo que este negocio de esteroides debe haber comenzado con los Chargers en 1963. Un muchacho que recuerdo quedó involucrado fue Howard Kindig. Llegó a nosotros altamente recomendado como centro y linebacker de Los Angeles State. Era muy veloz y querían que subiera de peso, con lo que en adición a utilizar el programa de peso utilizado por nuestro entrenador de peso, Alvin Roy, le empezaron a dar Dianabol y subió como 30 libras'.

    Es un artículo de seis páginas, uno que deben leer. Traté de no tomar demasiados extractos, pero es realmente notable.

    Esto es lo que escribió Gilbert hace cuarenta años:

    … 'Un par de píldoras -- tomo varias -- y el dolor se va', dice Dennis McLain de los Tigres de Detroit. McLain también se da inyecciones, o al menos se dio una inyección de cortisona y de Xylocaina en su hombro hábil previo al sexto juego de la Serie Mundial de 1968 -- el único partido que ganó en tres intentos. En la misma Serie, que por momentos parecía ser un enfrentamiento entre Detroit y los droguistas de San Luis, el Cardenal Bob Gibson estaba tomando pastillas para relajar su hombro. El héroe de la serie de los Tigres, Mickey Lolich, estaba tomando antibióticos.

    ¿Bob Gibson? Es uno de los héroes sobre los que estos muchachos siguen hablando.

    … 'Ocasionalmente utilizamos Dexamyl y Dexedrine; también usamos Seconal, Tuinal, Nembutal. Antidepresivos, Triavil, Tofranil, Valium. Pero no creo que el consumo de drogas sea prevalente en el Medio-Oeste como lo es en la Costa Este', dijo el Dr. IC Middleman, quien, hasta su muerte en septiembre del año pasado, era cirujano del equipo de los Cardenales de San Luis.

    ¿Cirujano del equipo? Cirujano del equipo. ¿Cómo puede ser? ¿Cómo puede ser que los equipos no supieran nada al respecto? Los dueños son paragones de la virtud, hombres de carácter impecable, que no quieren otra cosa más que los jugadores estén felices, sanos y que vivan en la misma cuadra que sus hijos e hijas ¿Verdad?

    ¿Cómo puede ser que un artículo de 5000 palabras, que fue publicado en Sports Illustrated -- que en 1969 se trataba de la publicación de mayor importancia en aspectos deportivos en América -- no haya sido notado?

    Claro que fue notado. A tal punto que el consumo de drogas continuó, floreció y se trataba de una reconocida parte del mundo deportivo. Y nadie escribía al respecto, nadie hablaba al respecto, nadie hizo nada.

    Y en ese tipo de ambiente, eventualmente, las drogas iban a funcionar. Tenemos una NFL en la que los corredores son igual de grandes que los linieros ofensivos de equipos de campeonato de apenas una década atrás. Tenemos jugadores de béisbol más grandes que los linieros ofensivos. Tenemos atletas gigantes, porque los programas de entrenamiento, junto con los impresionantes avances en medicina deportiva funcionan. El mantra, ganar a toda costa, no es un slogan para una bebida deportiva. Es el agua en la que esos hombres y mujeres nadan:

    … El tema fue analizado por Hal Connolly, un veterano de cuatro equipos olímpicos estadounidenses.

    'Mi experiencia', dice Connolly, 'me dice que un atleta utilizará cualquier ayuda para mejorar su actuación al borde de matarse'.

    Pero antes de que empiecen a preocuparse por salvar a los niños, dejemos algo en claro. Hay algo de bueno en todo esto:

    ¿Quieren saber que? Piensen en los deportes como en la NASA del cuerpo humano. Todos sabemos acerca de los avances en el programa espacial que influenciaron en nuestras vidas diarias. Se están haciendo avances en salud para personas no atléticas que proveyeron del deporte, incluyendo avances en entrenamiento de peso, técnicas de cirugía, y tratamientos de drogas. El mundo deportivo ha sido un gigantesco experimento químico las últimas cuatro décadas y cualquiera que haya asistido a una facilidad de medicina o a un gimnasio, o a un GNC, puede ver los resultados.

    Todos queremos ser mejores, y estamos dispuestos a hacer lo imposible por lograrlo. No hay nada de nuevo en eso. Es parte y parcela de ser un americano, y la influencia de América es global. En el mundo del deporte competitivo, el fin siempre justifica a los medios. Utilizar potenciadores de performance es tan sólo una de las maneras en que los atletas ubican frente al mal. Uno de mis jugadores preferidos acaba de fallecer. Brad Van Pelt era el linebacker de los New York Giants cuando Bill Parcells y George Young eligieron del draft a Lawrence Taylor. Murió en su sueño a los 57 años de edad, una historia familiar a las familias de jugadores de fútbol retirados. Los atletas retirados mueren más jóvenes, tienen muchos más problemas físicos, y generalmente viven en un mundo de dolor constante una vez que se terminan sus días de juego.

Como mínimo, Perricone debiera despertarnos. La admisión de Alex Rodríguez no le da un final al béisbol; debiera incentivar a aquellos que aman al deporte a acercarse a la verdad, y permitir que se empuje por tener una liga de jugadores.

Yo no conozco toda la verdad, nadie la conoce. Esa lista de los otros 103 jugadores que dieron positivo en el 2003 está allí fuera y podría hacerse pública, y habrá más historias y revelaciones. Pero esto es más complejo que simple bien o mal.

Perricone criticó a algunos periodistas deportivos a los que realmente les 'importa' el béisbol y a sus hijos. Pero no se trata sólo de Barry Bonds, Bobby Estalella y Alex Rodriguez -- es algo de la sociedad, y tal como Bill Gilbert destacó en el primer año de la presidencia Nixon, y lo ha sido durante varias generaciones.