Bill James comenzó un artículo reciente de esta forma: "Es enteramente posible y enteramente práctico, en el béisbol moderno, que un equipo utilice una rotación de tres lanzadores. Me doy cuenta que probablemente esto no va a ocurrir, pero... esta es la forma en que podría ocurrir, y esta es la razón por la que debería ocurrir".
Pueden echarle una ojeada al artículo completo en el portal Bill James Online, pero para resumirlo: La carga de trabajo de los abridores ha ido en declive por 40 años, como resultado del cambio de las rotaciones de cuatro hombres a la de cinco hombres en los años 70, y luego la imposición de límites de pitcheos, y luego más límites en el conteo de lanzamientos. Esto se hizo para prevenir lesiones - como dice James, "quizás se hizo para que los abridores fuesen más efectivos, pero ese es un argumento luego del hecho" - pero la creencia de James es que estos cambios no han reducido las lesiones.
Él escribe:
Las lesiones de los lanzadores no han bajado porque estamos persiguiendo una quimera, un espejismo. De la forma en que usamos ahora los abridores NO ES una forma para mantenerlos saludables y en acción en la rotación. Eso es lo que yo creo.
Pero no estoy argumentando aquí un regreso a que los lanzadores vuelvan a trabajar en 300 entradas por temporada. Estoy argumentando por un cambio en el patrón que impondría un límite de cerca de 245 entradas por temporada - en realidad un número no muy lejano a lo que vemos hoy en día.
Pero he aquí el asunto: Los lanzadores abridores estarían trabajando en algunas entradas adicionales, pero en un patrón que reduce la carga de estrés relacionada con esos pitcheos.
Con límites de cinco entradas o 80 pitcheos, un lanzador abridor podría tener en teoría una carga de trabajo de alrededor de 52 aperturas y 245 entradas, con el énfasis puesto en que el lanzador está haciendo menos pitcheos cuando está fatigado, ya que tiene el límite de 80 pitcheos por apertura.
Como dice James, él no es el primero en sugerir dicha idea. Otras ideas han incluido el utilizar tres lanzadores por tres entradas en un momento dado (mientras se puede utilizar un par de relevistas estelares según se necesite). El argumento en contra de esta idea es que los lanzadores abridores lo odiarían: Ellos nunca conseguirían una victoria. Con la idea de James, aunque a menudo son sacados de juego antes de completar las cinco entradas y ser elegibles a la victoria, ellos lanzan cinco entradas con bastante frecuencia y ya que los saludables podrían abrir unas 50 veces por temporada, rayos, ellos podrían conseguir 25 o 30 victorias, o quizás más en un gran equipo.
Así que ¿podría funcionar una rotación de tres abridores? Dos grandes dudas sobre esto:
(1) ¿Le impondría una carga imposible de trabajo al bullpen?
(2) ¿Cómo responderían los lanzadores trabajando con dos días de descanso luego de hacer 70 u 80 pitcheos?
James dice que un bullpen de ocho lanzadores debería ser suficiente, lo que significa que cada relevista promediaría unas 88 entradas, asumiendo que los abridores promedien cerca de 4.5 entradas por apertura. "Eso no me suena como un número extraordinario", escribe. Por supuesto, solo un par de relevistas por temporada llega a ese número de entradas, y los relevistas mediocres que lanzan 50 o 60 entradas por campaña podrían ser mucho peores si lanzan 30 entradas adicionales por temporada. Un bullpen de nueve brazos tendría que promediar 78 entradas por relevista. Tengan en mente que tendrías algunos abridores desplazados en el bullpen, tipos que solían lanzar más entradas, así que no todos los relevistas estarían lanzando tantas entradas. También tengan en mente que los abridores que se mueven al bullpen lo hacen mejor, así que un abridor mediocre podría terminar siendo un muy buen relevista (ver el caso de Wade Davis).
El segundo asunto es la gran interrogante, aunque volvemos al punto de James sobre las lesiones: Los chicos solían abrir con tres días de descanso todo el tiempo mientras de forma rutinaria hacían más de 100 lanzamientos por juego, así que quizás ellos se mantenían más saludables haciendo menos pitcheos por juego, incluso con menos tiempo de descanso entre salidas. Pero ¿serán suficientes dos días de descanso para recuperarse? El conteo promedio de lanzamientos por juego en el 2015 fue de 93 pitcheos. Como dijo el lector Guy123 en los comentarios en el artículo, "Puesto de otra forma, la noción aquí es que si reducimos el conteo de pitcheos de los abridores en un 14%, se puede aumentar la frecuencia de sus salidas en un 65% -- sin perder efectividad. Lo siento, pero eso luce como altamente inprobable".
Una cosa que Bill no menciona: Es posible que las lesiones de los lanzadores se hayan reducido. Por ejemplo, ¿cuántos lanzadores se lastimaban en las menores cuando los chicos de 19 años lanzaban más de 200 entradas en Clase A? Y considerando que los lanzadores pitchean con mayor fuerza ahora, quizás habrían más lesiones si tuviesen la misma carga de trabajo que en la década de los 70.
Una nota adicional: Ochenta pitcheos en cinco entradas da un promedio de 16 lanzamientos por entrada. En el 2015, 133 lanzadores llegaron a por lo menos 100 entradas como abridores; 66 de ellos promediaron 16.0 o menos pitcheos por entradas. Pienso que es aquí donde la idea comienza a hacerse un poco problemática; necesitas que absolutamente tus abridores sean eficientes y lleguen a la marca de las cinco entradas tanto como sea posible.
Sin embargo, pienso que esta idea podría funcionar. (Quizás para un equipo como los Diamondbacks.) Estarías dándole menos entradas a tu cuarto y quinto abridor, quienes podrían terminar siendo más efectivos trabajando menos entradas como relevistas. Sí, sacar a Clayton Kershaw con una ventaja de 1-0 luego de cinco entradas sería algo difícil, pero estaría abriendo nuevamente dentro de tres días en vez de cinco.
No vamos a ver a algún equipo intentando esto en el futuro cercano. Si acaso, probablemente veamos primero a un equipo con dos o tres abridores tradicionales y lanzadores "en grupo" en el cuarto y quinto puestos lanzando tres entradas cada uno antes de ver una rotación de tres lanzadores. Este juego usualmente evoluciona en formas pequeñas. ¿Estará listo para un gran cambio?