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¿Veremos MLB en julio? Es probable, pero todavía está lejos de ser un hecho

"¿Quieres buenas noticias de béisbol? Acabo de escuchar de múltiples fuentes que el 10 de junio comenzará Spring Training 2. El 1 de julio será el día de apertura y todos los equipos jugarán en sus propios estadios": Trevor Plouffe, ex pelotero de MLB y actual comentarista, el lunes en su cuenta de Twitter.

El comentario de Plouffe ocurrió después que el periódico Tampa Bay Times reportara, el sábado, que el último plan de la oficina del comisionado de Grandes Ligas (MLB) apuntaba a estar jugando pelota para los últimos días de junio o los primeros de julio, dentro de un sistema divisional que favorecería los encuentros entre equipos más cercanos entre ellos y que los partidos se celebrarían en los estadios regulares de MLB.

En otras condiciones, estaríamos celebrando el comentario de Plouffe y el reporte del rotativo tampeño como indicativos irreversibles de que ya finalmente está aclarado el panorama para arrancar la temporada del 2020, detenida desde hace casi dos meses en un limbo por la pandemia del coronavirus.

Pero la realidad es que en la primera semana de mayo, nadie, ni aún el comisionado Rob Manfred o el director ejecutivo de la Asociación de Peloteros de las ligas mayores (MLBPA), Tony Clark, los dos personajes más poderosos de la industria, saben a ciencia cierta cuando se cantará el primer "playball" este año, o incluso si tendremos temporada de pelota en el 2020.

"La incertidumbre es el desafío, lo desconocido es el desafío", dijo Clark el martes a Marly Rivera en una larga conversación publicada por ESPN.

Desde que el coronavirus forzó al béisbol estadounidense a suspender sus operaciones el 12 de marzo, varias ideas de una temporada especial han circulado por los medios, ávidos de mantener al día a los ansiosos aficionados del pasatiempo nacional.

El primer plan, revelado por ESPN en la primera semana de abril, planteó la posibilidad de que MLB jugara todos sus partidos en Arizona.. Los partidos, sin público, se jugarían en estadios de entrenamientos y el Chase Field de los Arizona Diamondbacks.

Los jugadores, el cuerpo técnico y otro personal esencial serían secuestrados en los hoteles locales, donde vivirían en un relativo aislamiento y viajarían solo hacia y desde el estadio.

Posteriormente, el USA Today reportó la posibilidad de realinear las ligas mayores en tres divisiones de 10 equipos para jugar en Arizona, Florida y Texas. El Minute Maid Park de Houston y el aún sin estrenar Globe Life Field de los Texas Rangers albergarían los encuentros en el estado de la estrella solitaria.

Esas y muchas otras ideas que se han tirado sobre la mesa estarían sujetas, después de ser aprobadas por los dueños de equipos y la MLBPA, al visto bueno de los gobiernos federales, estatales y locales y los funcionarios de salud encargados de supervisar las actividades de la nación más afectada del mundo por el coronavirus.

Hasta el martes, cuando una gran porción del país debería estar celebrando la fiesta mexicana del 5 de mayo-- en conmemoración del triunfo de México contra Francia en la Batalla de Puebla de 1862-- Estados Unidos tenía cerca de la tercera parte de los más de 3,6 millones de contagiados y 69 mil de los 252 mil fallecimientos por coronavirus en el globo. Solamente en el estado de Nueva York se habían registrado 25 mil fallecimientos, casi la misma cantidad que en España y Francia.

El presidente Donald Trump y los gobernadores de algunos estados han mostrado disposición de reactivar el aparato productivo de la nación, incluyendo las industrias del deporte y el entretenimiento, y en ese sentido, la MLB solamente espera un pitazo de la Casa Blanca para armar un plan definitivo para regresar, incluso si es bajo un estricto protocolo de distanciamiento social.

Pero ni la señal del gobierno ha ocurrido ni Manfred ha mandado una propuesta concreta al sindicato de los peloteros para aprobar el regreso al campo.

"No sé si todavía existe un plan definitivo", dijo Clark.

"Continuamos hablando con expertos para considerar de la mejor manera posible los múltiples desafíos logísticos que implicarían regresar a jugar bajo lo que está pasando, bajo el ambiente de lo que está sucediendo. A menos que o hasta que recibamos una verdadera propuesta que podamos estudiar, todo lo que hay en este momento es simplemente conjetura", agregó.

Esa es la realidad. Los que dirigen el negocio del béisbol tienen la esperanza de que Grandes Ligas pueda celebrar una temporada en el 2020, pero ahora mismo nadie sabe con certeza cuando comenzaría.