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El laboratorio de Simeone

MADRID -- A Diego Simeone le preocupaba, al principio del torneo, el poco tiempo que había tenido durante el verano para que sus jugadores se acoplaran.

Diez de los 21 hombres que actualmente componen al plantel del Atlético de Madrid, casi la mitad, llegaron para este torneo.

"Jugar en el Atlético es diferente; entrenamos de una forma diferente, jugamos de una forma diferente, todos se tienen que adaptar", comentó recientemente el lateral diestro Juanfran Torres, quien milita en el club rojiblanco desde la temporada 2010-2011.

No fue, sin embargo, hasta que Diego Simeone se hizo con las riendas del equipo a mediados de la siguiente campaña que el alicantino se convirtió en pieza clave para el cuadro colchonero.

Poco antes, el anterior técnico Gregorio Manzano se había visto en la necesidad de cubrir el puesto en el lateral derecho con Juanfran, un jugador de relevo que cuando jugaba lo hacía como extremo.

Una solución de emergencia que para el Cholo no pasó por alto, pues a su llegada ubicó al alicantino en el puesto que ha ocupado como indiscutible desde entonces y que lo llevó a formar parte del plantel base de la selección española a partir de 2012.

Y es que apenas aceptó hacerse cargo del conjunto rojiblanco, Simeone se dedicó, primero a estudiarlos a fondo para explotar al máximo sus virtudes, y hacer los mínimos retoques para fortalecer al plantel en las campañas subsecuentes.

Evitó que la joya de la cantera, Koke, emigrara en busca de más oportunidades lo convirtió, junto a Gabi, quien se había destapado como especialista en cobros durante su última temporada con el Zaragoza, en 2010-2011, en la pareja más eficaz de la liga si se trata de jugadas a balón parado.

Con estos hombres como pilares, jugadores el técnico ha hecho de la jugada de estrategia su arma más poderosa: siete de los once goles anotados en liga han llegado de esa manera.

Pero el Atlético de Madrid dedica apenas unos 10 o 15 minutos, cuando mucho, del último entrenamiento antes de un partido para ensayar las jugadas de estrategia. No necesitan más; ya se las saben.

El Cholo toma la decisión sobre sus equipos titulares en función del rival, pero las jugadas de estrategia involucran generalmente a los mismos, pues repite, una y otra vez, las que han funcionado antes.

Si el cobro va a primer palo, general viene de las botas de Koke y son Tiago o Miranda los encargados en rematar. Si el balón va colgado, es porque lo puso Gabi y es Godín el que aparece.

Después va añadiendo elementos para engañar.

Si Miranda no está libre de marca, Koke busca a Tiago o Raúl García; hasta Mandzukic ha entrado ya en ese rol y poco a poco se va volviendo el destinatario de los centros al área. Algo que, últimamente, el Cholo ha exigido a los cobradores pero también a los laterales.

Las jugadas a balón parado dependen primordialmente de cuatro hombres, los centrales Godín y Miranda, y los mediocampistas Koke y Gabi. Jugadores que, en opinión de más de uno en el plantel rojiblanco, no tienen recambio. Razón por la que rara vez rotan o se pierden un partido.

Junto con Juanfran, son los hombres con más minutos disputados en los últimos dos años y la tendencia no parece cambiar en este curso: salvo Gabi, con problemas en el tobillo, son los únicos que han disputado todos 900 minutos de competencia oficial en lo que va de la campaña.

Así, Koke es el líder en asistencias, siete en total y cuatro de ellas en tiros de esquina. Le siguen Gabi, Juanfran y Griezmann, con dos, y Miranda y Ansaldi, con una. Miranda, un central, se sitúa junto con Mario Mandzukic como máximos goleadores, con tres tantos.

De los diez rivales a quienes se han enfrentado en lo que va de la campaña, solo Rayo Vallecano, Olympiacos y Juventus han logrado anular las jugadas de estrategia del Atlético de Madrid.

"Tenemos un técnico muy inteligente y arma el equipo siempre en base a lo que vamos a enfrentar y trata de acomodar las piezas lo mejor que se pueda", comentó, tras la victoria ante Sevilla por 4-0 del sábado pasado, Cristian Ansaldi, uno de los recién llegados y quien, a dos meses de pertenecer al plantel, todavía se muestra maravillado con su técnico: "Es súper motivador. Tenerlo en el banquillo es muy importante".

Y no es el único que ha definido así a su entrenador en los últimos tres años. No hay jugador del Atlético que no se muestre asombrado por la pasión por los detalles del técnico. "Todo el tiempo esta viendo futbol; donde lo busques.

En el tren, en el hotel... en todos lados", lo describió uno de los pupilos del Cholo quien, cuentan, se vale de lo que tenga a mano para explicar sus tácticas. Un salero, un vaso, una pluma. Es darle cuerda y no pararlo.

Igual de obsesos resultan los miembros de su cuerpo técnico, entre los que destacan Germán Burgos, su segundo, José Ortega, preparador físico y Pablo Vercellone, preparador de porteros. No es raro llegar al Cerro del Espino y escuchar al 'Profe' Ortega gritar a todo pulmón para poner en orden al equipo al inicio del entrenamiento.

O desesperarse con alguno que todavía no entiende el español. "Que alguien le explique", vocifera mientras detalla para el resto los ejercicios a realizar al tiempo que con toda la paciencia les indica exactamente qué parte del cuerpo están fortaleciendo.

Burgos se aboca a tomar notas y el Cholo, mientras tanto, observa atento y estudia la actitud de sus jugadores.

Si algo no soporta es la falta de intensidad en el trabajo desde el primer instante. Lo mismo que Ortega, que no se corta en regañar en público al que pesque ligeramente distraído. Y desde que llegó al Atlético junto con Simeone, la condición física de los jugadores es otra. Rara vez muestran signos de cansancio y muestran una fuerza física descomunal.

Apenas hacerse con las riendas del equipo hace tres años el Cholo señaló que quería "que el Atlético sea más agresivo".

Misión cumplida. Fuertes, en gran parte gracias a Ortega, y con el carácter aguerrido que les ha inculcado el entrenador que tiene por lema que "el esfuerzo no se negocia" incluso por encima del gastado "partido a partido" raro es el rival que no tema la dureza del mediocampo rojiblanco.

"Todo el mundo dice que somos violentos, pero nosotros nos centramos en hacer nuestro juego, es nuestra filosofía, salir al campo a ganar y ya. No nos preocupa lo que digan", dijo Koke tras el encuentro ante la Juventus que se saldó con una victoria colchonera por 1-0.