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La Novena: La línea boricua, el bat flip de Ohtani y la necesidad de Yankees

AP Photos

1. EN ALGÚN MOMENTO no muy lejano, Carlos Correa, Francisco Lindor y Javier Báez enamoraron al mundo del béisbol. Su espectacularidad, desenfado y rendimiento consistente para jugar en el cuadro interior, principalmente las paradas cortas, fueron las cartas de presentación de este trío de puertorriqueños que hizo olvidar, o al menos encubrir, el enojo en la Isla del Encanto por tener sus peloteros que pasar por el draft y no ser considerados para firmar como agentes libres internacionales. Los tres, literalmente, se robaron el show por mucho tiempo. Y, merecidamente, los tres firmaron como agentes libres por muchísimo dinero. Lindor obtuvo el contrato más grande: $341 millones por 10 años. Correa firmó por $200 millones en seis años y Báez por $140 millones y seis años. Sin embargo, la temporada 2023 ha sido funesta para el trío boricua. Al punto que ya tengo amigos que me mencionan "La línea boricua" (una versión de la Línea Mendoza) para referirse a peloteros que batean por debajo de .230 de promedio de bateo y sus salarios no concuerdan con esa raquítica producción, que probablemente tampoco podría enmascararse con las estadísticas avanzadas de la sabermetría.

2. DE LOS TRES, quien sale mejor parado es 'Paquito' Lindor, de los New York Mets. Su promedio ofensivo es el "mayor": .229 (82 en 358), que no luce mediocre cuando observamos sus jonrones (19), impulsadas (61) y Victorias Sobre Reemplazo (3.4 WAR), en este último acápite se ubica en el puesto 19 de MLB. Correa, un fiebrú (como dirían los boricuas) de las estadísticas avanzadas debería estar muy preocupado de que su primer año del segundo contrato con Minnesota Twins marche más lento que Bartolo Colón en una competencia de corrido de bases. El paracorto de los Twins está en números rojos bajo los estándares de la vieja y la nueva escuela. Promedia un gris .227 (77 en 339), apenas ha conectado 12 jonrones, empujado 42 carreras y su WAR de 1.3 lo posiciona en el lugar 137. Mientras que Báez parecía que se recuperaba de un inicio desastroso, sin embargo, involucionó nuevamente. ¿Perdió la Magia? El campocorto de los Detroit Tigers batea .227 (82 en 361) con 7 cuadrangulares y 46 remolques. Su 0.7 WAR lo deja con 200 jugadores por delante de él. Lo más llamativo de todo no son esos números por sí solos, sino el balance entre ellos y los salarios de cada uno. Para no agobiarte mucho: Lindor $32 millones de salario base en 2023, Correa ($32 millones) y Báez ($22 millones). Saca tus cuentas...

3. EL BAT FLIP de Shohei Ohtani le ha dado la vuelta al mundo a través de redes sociales. El fenómeno japonés no pierde la etiqueta cuando disfruta sus batazos más allá de las cercas. De ahí que su perreo -"intenso dentro del estricto código de comportamiento japonés-se haya convertido en tendencia. Pero no lo fue por espectacular y sí por insólito. ¿Te interesa conocer cuál fue el motivo de la explosión de adrenalina? Te daré una pista, aunque voy a especular porque no tengo a "fuentes cercanas al pensamiento del" japonés para confirmarlo. Nada como pegarle un jonrón a los Yankees y restregárselo en la cara.